La historia del loco – Jonh Katzenbach

La historia del loco – Jonh Katzenbach

Yair Pedro Marines González

La historia del loco es un libro de constante suspenso y algo de terror, escrito por el novelista estadounidense Jonh Katzenbach, autor de otros libros como: “El psicoanalista”, “Personas desconocidas”, entre otros. La historia es narrada por el personaje principal llamado Francis X. Petrel veinte años después de que transcurrieron los sucesos a finales de la década de 1970 en el Hospital Estatal Western. La narración comienza con una descripción de la vida actual de Francis, después de haber sido de alta del hospital psiquiátrico, una persona de mediana edad que vive solo en un apartamento y que explica las voces que escuchaba cuando era más joven debido a que padece esquizofrenia pero que ha sido controlada por los medicamentos que utiliza para aminorar los posibles efectos de la enfermedad mental. Menciona también que no era una persona muy sociable y que las únicas que le podían hacer algo de compañía eran sus voces, pero que le incitaban a realizar cosas peligrosas o dañinas como se describe en el libro. Francis es un personaje activo y que no puede mantenerse de una manera sedentaria, ya que se explica que él sale a caminar por horas al atardecer para poder relajarse y finalmente volver a su pequeño apartamento. Se menciona que trabaja en una escalera para peces en una presa y que tiene dos hermanas que lo visitan constantemente para estar informadas de la situación de su hermano. Un día, Francis recibe una carta de la administración del hospital Estatal Western, el lugar en el que fue recluido veinte años atrás y que ya había cerrado sus puertas. La carta, tenía su nombre mecanografiado y mencionaba que Francis estaba siendo invitado al Hospital Western para hacerle saber que iba a ser convertido en un museo y que él formaba una parte importante de la historia del mismo, estaba siendo invitado a asistir a discursos, seminarios y diversiones. Francis dudaba de su decisión, ya que no sabía si debía asistir al evento o no, pero que al final decide asistir, aunque de una manera no muy segura. Cuando llegó al lugar en el que había estado internado, arriba de una colina, se dirigió hacia una carpa que poseía un letrero que decía “Inscripción”. Cuando se encontraba en la fila, decidió salirse y dirigirse al patio interior del hospital, y cuando menos se lo esperó se encontraba en su antiguo edificio, el edificio Amherst, el cual se encontraba en malas condiciones y degradado por el paso del tiempo. Y como era de esperarse, el edificio se encontraba cerrado para su próxima demolición, pero Francis decidió adentrarse… Empezó a recordar todas esas cosas que le habían ocurrido en el pasado, al punto de no tener la noción del tiempo que permaneció en cuclillas bajo el edificio. Cuando decidió retirarse del edificio, se dirigió a una banca situada bajo un árbol para reflexionar y contemplar lo que algún día fue su hogar. A lo lejos vio acercarse a un hombre de baja estatura, que es apodado Napoleón y que fue uno de los compañeros de Francis durante su estancia en el hospital. Cuando Napoleón se acerca a Francis empiezan a platicar sobre los viejos tiempos en el hospital, y le menciona también los amargos recuerdos de los incidentes ocurridos en aquellos días. Para esto, Napoleón tiene que retirarse para dar al público un discurso, pero no se va sin antes decirle a Francis que debería contar su historia, todo lo que sus compañeros habían vivido con él en aquel lugar donde reinaba la locura.

Cuando finalizó aquel día, Francis regresó a su hogar, se encontraba inquieto y dudoso debido a lo que Napoleón le había dicho, tenía las cosas necesarias para escribir, como lápices y bolígrafos, pero no tenía papel. Entonces, Francis a falta de papel, decide utilizar las paredes blancas de su apartamento para poder escribir su historia. Francis fue internado en el hospital debido a sus comportamientos ante las personas y sobre todo ante su propia familia, permaneció ahí durante veinte años e ingresó a la edad de 21. Durante la historia, se presentan distintos personajes cada uno con una personalidad única y que el escritor hace distinguir de una manera muy buena sus aspectos tanto físicos como mentales. Es un libro que tiene muchos giros y te mantiene entretenido en muchas partes, aunque también es cierto que en algunos momentos la historia puede llegar a ser algo tediosa o aburrida, tiene partes que te incitan a seguir leyendo y quieres saber qué es lo que ocurrió después.

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