La mentalidad burguesa surge en Europa occidental, en el siglo x, en un contexto marcado por la mentalidad Cristiano feudal.

Romero

La mentalidad burguesa surge en Europa occidental, en el siglo x, en un contexto marcado por la mentalidad Cristiano feudal.

La interpenetración entre realidad/irrealidad es una de las principales características de la mentalidad Cristiano feudal, consiste básicamente en la falta de separación entre lo imaginario y lo fantástico, es tan normal creer en la existencia de las nubes como en los ángeles, a pesar de que solo uno de ellos pueda observarse.

La Mentalidad Burguesa pudo crear esta disociación entre realidad/irrealidad. Esto ocurrió debido a la creación de mecanismos prácticos, como la contabilidad, que les permitieron entender al mundo de una forma diferente, más práctica y tangible. Todo esto fue un cambio lento, que se dio a la par del surgimiento de nuevas ciudades, que debían adoptar nuevas experiencias como el comercio. El nacimiento de esta mentalidad es conocido como triunfo de la profanidad.

En el siglo XII y XIII existió la denominada Querella de los Universales una discusión filosófica acerca de cómo debía ser la visión de la realidad. Se origino en la Universidad de Paris, pero el conflicto se extendió a lo largo de toda Europa. De allí surgieron dos vertientes filosóficas: los Realistas y los Nominalistas.

• Los Realistas mantenían la postura tradicional, la de la Interpenetración realidad/irrealidad.
• Los Nominalistas tenían una postura opuesta a los realistas. Decían que se podía llegar al nominalismo de dos maneras:

• La vía académica: Por medio del contacto con otras culturas.
• La vía empírica: Es la vía de la burguesía, se trata de una forma práctica de resolver los problemas, por medio de la razón.

Consecuencia de las discusiones de la época surgieron los entonces llamados Filósofos Naturales, quienes pueden considerarse como los primeros científicos.

La imagen de la naturaleza

La mentalidad Cristiano feudal, al ver la naturaleza y pensar en el hombre, insertaba al hombre dentro de la naturaleza, tomando a ambos como iguales al ser estas creaciones de Dios.

Esto puede contrastarse con la Mentalidad Burguesa, que califica al hombre como un sujeto cognoscente, o sea, capaz de adquirir conocimiento. También caracteriza a la naturaleza como objeto, que debe ser estudiado. Esto se debe a que la Mentalidad Burguesa posee una doble disolución: 1) Hombre/Naturaleza y 2) Realidad sensible/Realidad sobrenatural. Esta mentalidad no necesariamente niega la existencia de Dios o de sucesos sobrenaturales, pero si los separa del contexto, cuando el objetivo es hacer ciencia.

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