La protesta de los trabajadores frente a la cesantía por la empresa Iansa

La protesta de los trabajadores frente a la cesantía por la empresa Iansa

Isidora Arias y Paula Ormeño

Sin duda alguna Iansa ha sido una de las empresas líder en la producción de azúcar que conocimos en Chile, desde que somos pequeños hemos escuchado de ella y todos tenemos más de un producto de ella en casa, una de las más reconocidas empresas en Chile. Sin embargo ahora una amarga noticia deja ver como esta empresa va reduciéndose para casi llegar a su fin, pudimos ser testigo de esto a mediados del año 2018 en una gran controversia se anuncia el cierre de la planta de Linares, una de las primeras y grandes plantas que se encontraba en el país desde que fue fundada en 1959  y ahora actualmente se suma la planta de Los Ángeles que en septiembre del 2020 anuncian el cierre y despido de más de 100 trabajadores y su traslado hacia la planta de chillan. Quedando más de 400 familias detrás siendo parte de un cambio de estilo de vida y sufriendo las consecuencias del despido. Sin duda alguna, es un cierre que no solamente afecta la vida de los trabajadores de IANSA, sino que también la vida de los agricultores, transportistas y a todas sus familias.

Pero ¿qué ha sucedido que la empresa toma esta decisión tan drástica? hasta el momento Iansa ha justificado el cierre de sus plantas debido a la falta de competitividad en el mercado chileno. Como lo señaló su gerente general Pablo Montecinos, en una entrevista a Diario Financiero, "queremos transformar verdaderamente Empresas Iansa en una compañía de alimentos", por lo que esta decisión impacta directamente en los diversos procesos productivos, donde el azúcar hoy representa poco más de un 50% de los ingresos de la empresa. En palabras más coloquiales se dice que es por el deficiente resultado que ha tenido la venta de sus nuevos productos aunque hayan abierto más la variedad de ellos.

Según la empresa otro de los factores que abría impactado en la decisión es el alto costo que tenía la producción en las plantas de Linares y Los Ángeles, costos que aumentaron debido a la creación del “impuesto verde” debido a la utilización de enormes cantidades de combustible fósil para sus calderas y aunque en el 2018 negociaron una exención tributaria al parecer este no fue suficiente para mantener competitiva las plantas.

También se fundamenta que parte del cierre es por la caída en el precio del azúcar. Pero a pesar de la baja en el valor del azúcar, Iansa realizó inversiones por más de 80 millones de dólares y según su informe financiero del año pasado tienen una posición financieramente sana, una posición tan sana que no le importó enviar a la calle a cientos de trabajadores siendo así que el ex ministro de agricultura Antonio Walker insistió a la empresa de que postergara esa decisión y sin embargo Iansa prefirió pagar más de 1 millón de dólares en indemnizaciones y trasladar toda la producción a Los Ángeles y Chillan.

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