Los Tambores De La Rebelion

Los Tambores de la Rebelión

‘’11 de septiembre de 2014, una fecha para no olvidar, un día cálido, cielo despejado y el ambiente en la universidad del Tolima se torna de cultura clandestina identitaria, pues en esta fecha se conmemora la muerte de norma patricia Galeano. ¡Boom!, ¡Boom!, suenan los tambores de la rebelión anunciando lo común conocido como la fiesta o tropel.

Hombres y mujeres con atuendos oscuros y pañuelos que cubren su identidad dan inicio a una parada militante frente al parque ducuara donde reflejaron su manifiesto ante los y las estudiantes presentes.

Unos corrían saliendo de la UT desesperados, como si fuesen a proteger sus vidas, la adrenalina se apodera de los espíritus rebeldes y de la nada empiezan a brotar como si salieran de la tierra más mujeres y hombres encapuchados dispuestos a ‘’ frentear la causa ‘’, más y más ¡Boom!, mi corazón latía con ánimo pues lo que esperábamos los presentes era descargar esa energía causando la represión. Con coraje, destreza y valentía salen a la calle los primeros militantes hombres con elementos tradicionales de la fiesta ‘’papas bomba’’ para dar su bocado a quienes dicen ser los encargados de la seguridad ciudadana (Policía y ESMAD), los cuales paradójicamente también esperaban el momento del choque como si supieran lo que estaba a punto de suceder.

Inicia la confrontación (fiesta), papas van, lacrimógenos vienen, la resistencia de aquellos jóvenes valientes continúa mientras se acercan esos hombres con sus escudos escoltados por tanquetas arrojando chorros de agua a presión, más gases y bombas de aturdimiento. Los militantes clandestinos repliegan hasta ingresar nuevamente al interior de la universidad donde muchos estudiantes cubríamos sus espaldas tácticamente pero los gases nos invadían cada vez más mi cara ardía, picaba, sentía sensación de que por mi esófago y pulmones bajaban aguijones de avispa, el desespero de no poder respirar oxígeno y las ráfagas Paint ball hizo que muchos saliéramos corriendo en busca de cubierta y protección, reanimación cardiaca y respiratoria, pude ver como caían compañeros desmayados incluso yo caí; mujeres heroicas prestaban sus primeros auxilios mientras aguantábamos otras y otros tapaban los gases con canecas para amortiguar esa gaseada.

Conmigo se encontraba la Mayor Parte del tiempo un compañero el cual era su primera vez que tropeleaba debo aceptar que tuvo muchas bolas pues logro mantenerse en pie por mucho tiempo en las rejas del portón principal donde más duro se debe parar, era muy bueno lanzando molochas yo lo cubría y el a mí de repente sentimos una explosión muy fuerte en medio de mi hombro derecho y muy cerca a la cara del pues una aturdidora de la policía cayo quede en un estado extraño, y por su puesto con esquirlas en mi hombro, el solo quedo muy asustado solo le preguntaba a él marica, marica ¿Esta Bien? Solo dijo Si, quedo sentado y me entrego su molotov con más ánimo la lance, replegamos pues era excesivo el gas lacrimógeno. El tropel cogía más fuerza y aumentaba la presencia de fuerza policial, mientras esto sucedía preparábamos molochas con paciencia entonces notábamos incluso que ya se veían compañeros heridos y entre mi pensaba Mierda no quiero que me jodan así la adrenalina la sentía hasta el infinito y cuando salía para actuar me sentía de película, cada paso era un gran salto la noción del tiempo era rara todo pasaba tan veloz, los minutos se estiraban finalmente el tiempo real continua, gritos por aquí y por allí se convertían en esos minutos de silencio por nuestros muertos. Seguido varios minutos se agotan hasta el final nuestros materiales de defensa y un tanto el de los adversarios, claro ellos también tuvieron hombres heridos. La fiesta entonces termina los anfitriones embriagados de amor y los invitados sobrios de

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