Los Transgenicos

Cuando hablamos de los Transgénicos se vienen a nuestra mente cantidades de ideas y de opiniones, sobre algo que ilusa e irónicamente creemos conocer; pero es que este tema es tan amplio, como amplias son las posiciones frente a él y las consecuencias en muchos campos de la vida- social, político, económico, religioso, ético, etc. - que podría suponer.

Si se me pregunta cuál es mi punto de vista al tema que nos expone el video titulado “La Granja del Doctor Frankenstein” creo que aun estoy confundida, estoy de acuerdo en buena parte con los aportes que estos adelantos científicos proporcionan a la sociedad actual pero no puedo evitar sentir temor al conocer los alcances que el Ser humano ha podido llegar a poseer a través de tantos años de estudios pues me es imposible echar de menos la mente tan corrupta y vil que nosotros sabemos bien utilizar.

Tomando el tema de la Selección natural llevado a cabo por ejemplo en los exponentes de la raza bovina Belga Azul, podríamos bien entenderlo como algo “natural”; no nos podemos negar que a lo largo de la historia los elementos que están en el universo han ido evolucionando, y de esta evolución podremos observar que solo los seres con mejores capacidades se han adaptado y han sobrevivido, ahora bien tomando como punto de referencia la situación actual, donde no podemos negar que todo va mas rápido y en crecimiento desproporcional, se nota- desde mi punto de vista- la necesidad de alterar un poco lo que conocemos para responder a las necesidades que genera la sobrepoblación.

Con estas reces y también con las “truchas del pacifico” , como deciden llamarlas, que crecen de forma mas paulatina sin importar las condiciones de tiempo, además del llamado “Arroz de oro” que brinda no solo los aportes nutricionales que ya conocemos sino también el Beta Caroteno indispensable para la producción de la Vitamina A, se puede solucionar de una manera fácil y efectiva las hambrunas a las cuales nos vemos enfrentados día a día, pero el dilema esta en llegar a pensar si seguirá sucediendo lo mismo; los ricos tendrán más, y los pobres cada vez menos; de nuevo el mismo y latente problema de la mala distribución de los recursos.

Pero si podemos recordar los pollos sin plumas vemos que literalmente los beneficios que se obtienen no solo se ven representados en el aspecto social y económico de la raza Humana sino que de igual manera, quizás en menor porcentaje, los animales modificados genéticamente, quitando aquello que los hace más débiles y de menor producción y agregándoles lo que el Hombre supone que los hará mejores, tendrán una calidad de vida superior.

Entonces encontramos así el trasplante de células de una especie a otra con el objetivo de mejorar sus características que según mi posición aunque atentan contra la moral y la ética que responsabiliza a los Humanos, como seres con razonamiento y nombrados protectores del medio que los rodea, a cuidar y preservar las especies existentes, está bien pensada y tiene unas bases de justificación demasiado bien plateadas.

Por otro lado, encuentro un punto que realmente me sorprende y que muestra que a pesar de los múltiples comentarios en contra de el tema de los transgénicos y el posicionamiento contradictorio de la Iglesia, hay experimentos que poco intervienen en el ámbito de lo natural y que generan grandes beneficios para los estragos que incesantemente el hombre ha ocasionado a su planeta : La Tierra; y es que como se nos explicaba

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