Los secretos del carajo para ser un empresario de éxito

Los secretos del carajo para ser un empresario de éxito.

1. El campo de juego para los negocios es el mundo, allí está el gran cambio.

Hoy, hay que tener una perspectiva más global para estar atento a los movimientos que se están generando en el planeta y ver cómo podrían afectarnos o cómo podemos sacar provecho de ellos.

2. No trabajes para otro, sé tu propio jefe.

Trabaja por tu cuenta, sin miedo, pero no te conviertas en un trabajador de tu propia empresa. Piensa tus proyectos con perspectiva de futuro, que cuanto más crezca tu emprendimiento, menos tengas que trabajar.

3. Los negocios están en la calle.

Si solo estás entre cuatro paredes puede que no te enteres de lo que la gente necesita.

4. Simplemente sé diferente.

Tienes que ser único para que te recuerden, y si puedes, sé el primero. Encuentra una diferencia competitiva y mantenla siempre frente al cliente.

5. Los negocios son como la cocina, la calidad no la define el cocinero,

sino el comensal.

Si deseas brindar calidad, pregúntale todo a tu cliente.

6. Ten claro lo que vendes y ten claro por qué te compran.

Tienes que saber por qué las personas te compran, ¿es por tu marca, es por un producto estrella, es por un servicio, es porque tú eres tu propia marca?

7. El mejor marketing es el de boca en boca.

El mejor marketing es que tu cliente hable bien de ti, esto es más poderoso que cualquier otra inversión en publicidad. Lo mismo es en cuanto al aspecto negativo, el peor marketing es que las persona hable mal de tu marca, producto o servicio.

8. La gente es lo más importante en una empresa.

Un empresario les daba el desayuno a sus empleados porque estaba convencido que estaba invirtiendo en el mejor capital que tenía: su gente.

9. En una sociedad de conocimiento e información, siempre hay que investigar.

Quién no estudia y persevera en sus proyectos, no puede pretender ser el “rey de oro” (un minero).

10. Tienes que ser ordenado e íntegro.

Tienes que ser el apóstol de tu propia empresa. El desorden no paga.

Se refiere a ser ordenado en todos los sentidos, en la forma de trabajo, en las cuentas, en los horarios, con el dinero, con los empleados, en la conducta, etc. Ser íntegro,

...