Oportunidades: ¿Iguales Para Todos?

La segregación social es una triste realidad chilena que nos ha acompañado desde los inicios de nuestra historia como nación. Un ejemplo claro es la división ciudad-zona rural que se vivió en la época colonial, donde aquel que vivía en la ciudad tenía más acceso a los servicios y, el que vivía en un sector periférico vivía en penuria.

Más adelante, en la sociedad finisecular, esta división entre “clase alta” y “clase baja” se ve aún más marcada con la “cuestión social”. Donde los obreros eran víctima de la sobrexplotación laboral y de la extrema pobreza mientras que la aristocracia gozaba de pomposas fiestas y lujos.

Ahora, la pregunta es ¿cómo se vive esta segregación en la actualidad? No es muy diferente a la realidad de esos años. Hoy en día, se habla incluso de un Chile “segmentado” o dividido completamente por los estratos sociales. Uno de los casos más representativo de esta segregación o marginación social es la desigualdad de beneficios, a mi juicio en nuestro país las oportunidades están condicionadas por el sector socio económico.

Un estudio realizado por la Cepal (Comisión Económica Para América Latina) ha demostrado que Santiago posee un alto índice de segregación urbana y social, incluso dicho estudio habla de un Santiago dividido en cuatro categorías establecidas según el mercado del suelo. La primera de estas categorías (Vitacura, Las Condes, Providencia, Ñuñoa y Santiago) sólo contempla un 5% de los santiaguinos de estratos sociales bajos mientras que la cuarta categoría (San Bernardo, El Bosque, La Pintana, Puente Alto, La Florida, Cerrillos, Lo Prado, Renca, Quilicura, Huechuraba y Recoleta) contempla el 40%.

Este estudio nos refleja un Santiago claramente diferenciado según los niveles de ingreso, un Santiago donde existen comunas habitadas sólo por “ricos” y comunas habitadas sólo por “pobres”, un Santiago dividido por completo.

Está separación urbana trae consigo diferentes problemas para los chilenos, sobretodo a la hora de buscar oportunidades de empleo.

“(…) La razón principal de discriminación de los jóvenes en Chile, República Dominicana y Perú es el lugar de residencia. (…)”

¿A qué se debe esta discriminación laboral? ¿Por qué un joven que reside en La Pintana no tiene las mismas oportunidades que aquél que vive en Las Condes? El joven que vive en la Pintana no tiene los mismos beneficios que el que vive en Las Condes por el simple hecho de vivir en un sector “bajo”, existe un prejuicio colectivo en el que “el que vive de Plaza Italia para arriba siempre es mejor”. ¿Y a qué se debe este prejuicio? La sociedad cree que en las áreas urbanas pobres siempre existe la delincuencia, la drogadicción, y la violencia y que, por tanto, todos los pertenecientes a esta clase social baja presentan estos problemas.

Esta discriminación socioeconómica termina por dejar en desventaja a las personas de estratos sociales más bajos, es decir, no tienen las mismas oportunidades que el resto.

Asimismo la educación presenta una diferencia de calidad entre colegios particulares vs colegios municipales o subvencionados.

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