Reforma Político-Electoral. Mexico

REFORMA POLITICO-ELECTORAL.

Nuestro país es una democracia electoral en la que el derecho al sufragio universal es ejercido con plena efectividad por los ciudadanos. Sin embargo, siguen presentándose viejas prácticas en este sentido como la compra y coacción del voto, que afectan gravemente el pleno ejercicio de este por parte de los ciudadanos, además las fuerzas políticas más representativas de la diversidad social mexicana compiten en elecciones a nivel local y federal, pero esto de una manera bastante inequitativa, ya que los partidos más grandes son los que siguen captando grandes cantidades recursos económicos, mientras que los pequeños apenas y se les da una pequeña parte, con la cual tienen que sobrevivir, y debido a ello es que no pueden competir a la altura de los grandes partidos, así mismo la división entre Poderes es vigorosa y el sistema de pesos y contrapesos previsto en la Constitución no sólo se ha mantenido, sino que se ha fortalecido, no obstante ello tengo la percepción de seguir creyendo en que el poder ejecutivo es el que siguen con gran margen de maniobra sobre el poder judicial y el legislativo, ya que el presidente es el encargado de mandar las ternas al congreso para elegir a los integrantes de la suprema corte de justicia de la nación, es por ello que considero que si habido avances, si se ha logrado acotar el poder del ejecutivo, si se ha logrado cierto equilibrio, pero no lo suficiente, esas todavía es una asignatura pendiente, ya que un poder no puede elegir a los integrantes del otro de manera tan directa y con gran influencia, en este aspecto, y desde mi perspectiva, la reforma ha dejado mucho que desear.

Sin embargo, existía la necesidad de transitar de una democracia electoral a una democracia de resultados. Para ello resultaba indispensable actualizar y perfeccionar el régimen político del país, así como sus reglas e instituciones electorales. Desde mi punto de visto lo anterior viene precisamente a exigir a nuestros gobernantes acciones gubernamentales eficaces, ya que de lo contrario no podrán ser considerados por el electorado una opción nuevamente para el mismo cargo una vez más, además me parece acertada la transformación del IFE al INE, y con la modificación de ciertos aspectos legales, nos da a nosotros los ciudadano, certeza de que nuestro régimen político se fortalece y será capaz de estar a la altura de nuestras exigencias que ello implica.

Nuestro diseño institucional no siempre propiciaba los acuerdos ni fomentaba el diálogo y la corresponsabilidad entre Poderes, lo que obstaculizaba la tarea de gobernar con eficacia, este hecho amenazaba con socavar la legitimidad de nuestro régimen político, pues el verdadero riesgo para una democracia radica en la parálisis. De ahí que, de acuerdo con el Latinobarómetro, en 2010 sólo 27 por ciento de la población mexicana estuviera satisfecha con nuestra democracia y que en la Encuesta Nacional de Cultura Política (ENCUP) de 2012, sólo 6 de cada 10 mexicanos hayan considerado a la democracia como la mejor forma de gobierno posible. Desde mi perspectiva considero que vale la pena señalar que en el año de 1997 cuando por primera vez no existía mayoría en el congreso, y este estaba dividido, puso en jaque a nuestro sistema de este entonces, ya que la mayoría de las iniciativas de ley se quedaban en la congeladora, ya que nunca se lograba poner de acuerdo a las suficientes fuerzas políticas para lograr concretar reformas a la constitución, lo que nos llevó precisamente a una parálisis, no fue hasta el año 2012, cuando se firmó el llamado “Pacto Por México” por parte de los tres grandes fuerzas políticas del país que junto al gobierno e peña nieto, se sentaron a la mesa a negociar, la aprobación de las reformas estructurales, que estaban estancadas en el congreso desde 1997, y que debido a la falta consensos, el país de había atrasado en sus desarrollo tanto político, económico y social, mientras que otros países aprovecharon esa época, como es el caso de Brasil, quien logro pasar las reformas convenientes y logro posicionarse como la 5 ta. economía de mundo, de ahí que la sociedad mexicana se hartó de esta situación de estancamiento y ha puesto en duda si realmente nuestro sistema democrático estaba a la altura de lo que demandamos.

Era gran relevancia fomentar la corresponsabilidad y cooperación entre el Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo, y así poder construir los acuerdos y mayorías necesarias para la aprobación de los temas decisivos para el país, situación que lo mantenía estancado y cada vez más alejado de cumplir con el bienestar común de la colectividad.

La transición gubernamental era otro elemento que necesitaba ser reformado, pues su excesiva duración restaba eficacia a las acciones del gobierno entrante e impedía al Presidente de la República incidir de manera decisiva en la confección del Presupuesto para su primer año de mandato. Además de en ciertas ocasiones creaba cierta inestabilidad y nuestro país se veía afectado por la fuga de capitales, pero considero que hoy día con estas adecuaciones que se han echo reducir el tiempo entre la elección del presidente de la república y la toma de posesión se corrigieron quedan como el primero de octubre como la nueva fecha en la que el presidente electo tomara el mando, ya que se a probado en diversos escenarios que esperar casi seis meses en demasiado y no permite que el presidente saliente y el entrante terminen adecuadamente, el primero de hacer la entrega recepción, y por el otro lado el ensamblaje para formar su equipo y el nuevo presupuesto de su primer año, que por lo regular no siempre es el mejor analizado ya que el cambio de mando provoca grandes diferencias debido a la nueva forma de gobierno.

Otro obstáculo para transitar a una democracia de resultados era la distancia percibida entre los electores y sus representantes, lo que podía revertirse mediante mecanismos de rendición de cuentas como la reelección legislativa. No obstante, esta figura se encontraba prohibida en nuestra Constitución desde 1933. Para lo cual se llevó a cabo su modificación permitiendo así nuevamente la reelección, pero esto solamente en legisladores, es decir entre diputados, senadores, así como diputados locales y alcaldes, con ello se busca desde mi punto de vista que la ciudadanía ejerza una especia de evaluación a su desempeña, y así nuevamente

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