ÉTICA Y RESPONSABILIDAD SOCIAL

UNIVERSIDAD DEL VALLE DE MÉXICO

CAMPUS TEXCOCO

ASIGNATURA:

ÉTICA Y RESPONSABILIDAD SOCIAL

DOCENTE:

GENOVEVA NAVA GUARNEROS

ESTUDIANTE:

DANIEL ALÍ CABRERA RODRÍGUEZ

CARRERA:

EJECUTIVA DE DERECHO

ACTIVIDAD 2.

REFLEXIÓN

INTRODUCCIÓN

La presente actividad, tienen la finalidad de analizar el caso de Aaron Beam y el fraude de Health South, donde se inflaron lo números de utilidades de dicha empresa para mantener el alcance de las metas estipuladas por Wall Street, esto con la finalidad de realizar una reflexión sobre la actitud, conducta y los valores que se visualizan en el caso.

DESARROLLO

Es fácil acreditarle la responsabilidad de las acciones a una persona, aún más si esta desempeña un cargo jerárquicamente elevado y de mayor importancia, es fácil suprimir la voluntad y disculpar nuestro actuar al estar subordinado al mando de quien gestiona nuestro desempeño dentro de una organización.

Como lo deduce Guadalupe Varela en el libro Etica una Norma es un “criterio infalible para el reconocimiento o para la realización de valores absolutos”. No se puede desvirtuar la infalible directriz de lo moralmente correcto y necesario en nuestro actuar, cuando se hace fácil desvirtuar los valores éticos como la honradez, la honestidad, la veracidad, que tienen como principio prevalecer la dignidad humana en el actuar de sus funciones profesionales.

Es fácil desvirtuar una norma al no seguir el procedimiento que determina con la capacidad de garantizar el desarrollo eficaz y transparente de nuestra actividad profesional.

Y de un ente que pierde la orientación y congruencia sobre las directrices moralmente aceptables y éticamente obligadas, se consigue un efecto dominó que termina no solo desvirtuando sino corrompiendo todo el esquema ético profesional de una organización, tal como sucedió en el caso estudiado, tomando como objetivo el no perder una posición de crecimiento, sin tomar en consideración estrategias internas para su solvatación.

Nadie se puso a analizar las razones reales por las cuales existía un problema que generaba una baja en el crecimiento de las utilidades y en el cumplimiento de las metas establecidas por la Bolsa. Scrushy falto al valor de la responsabilidad para establecer una mecánica interna para detectar los problemas e implementar mesas de trabajo para darles solución. De igual modo Beam falto a la ética profesional impuesta en su carrera como Contador Público Certificado, pudiendo acotar la serie de delitos cometidos en aras de mantener una mentira como la propuesta por Scrushy, sin omitir que también estaba en la aptitud de prever el efecto de tener un despilfarre como el que se describe, a cargo de una empresa en creciente desarrollo.

Ambos faltaron a la dirección del corporativo, al poner el riesgo inminente una empresa que si bien se encontraba en continuo avance, no tenía la capacidad de impactar en un nivel corporativo como el requerido en Wall Street. Mentir fue la primera opción para lograr posicionarse dentro del campo económico, justificando en una ideología poco ética era manejada igualmente por los inversionistas, “deben saber”, “todos lo hacen”, “entienden la contabilidad agresiva”.

Presuponiendo que todo estaba a favor, desvirtuaron no solo normas éticas y morales sino jurídicas. Que culminaron en responsabilidad administrativa y penal, al cometer actos fraudulentos.

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