Augusto Monterroso

1. Vida de Augusto Monterroso:

Augusto Monterroso Bonilla nació el 21 de diciembre de 1921 en Tegucigalpa, Honduras. Hijo de la hondureña Amelia Bonilla y del guatemalteco Vicente Monterroso, pasó su infancia y juventud entre Honduras y Guatemala. Fue en Ciudad de México, al llegar como exiliado, donde se estableció y donde desarrolló, prácticamente, toda su excepcional vida literaria. Hasta su muerte, acaecida en Ciudad de México en la noche del 8 de febrero del 2003, estuvo trabajando en la segunda parte de sus memorias. La creación literaria de Augusto Monterroso no cabría inscribirla en un contexto nacional específico. Es sobre todo un autor que sin renunciar a la nacionalidad guatemalteca y a su vinculación con México, pertenece a todo el ámbito latinoamericano. Ronda por geografías políticas, literarias y afectivas diversas. Utiliza los géneros cuento, fábula, epigramas, sátira, reseñas, crónicas, diarios, novela, crítica, todo ello bajo el signo inherente de un sensible y delicado humor.

1.1. Contexto Histórico-político:

Desde muy joven, Monterroso, se implicó en la vida política de su país, que compaginó con una temprana actividad en el campo de la literatura. Tras haber publicado algunos relatos, participó en 1941 en la fundación de la revista Acento, que se convertiría en uno de los núcleos intelectuales más inquietos de Guatemala en una época de incesantes convulsiones sociales. En 1941 publica sus primeros cuentos en la revista Acento y en el periódico El Imparcial, mientras trabaja clandestinamente contra la dictadura del General Jorge Ubico Castañeda. En 1944 sale al exilio a México, en los tiempos turbulentos que siguen a la posterior caída del dictador, y aún allí moviliza a la opinión pública en contra de Jorge Ubico.

El constante irrespeto a la Constitución por parte del gobierno autoritario de Jorge Ubico (1931-1944) fue un factor determinante para los hechos que se desatarán en 1944. Su gobierno, que debía de terminar en 1937, fue prolongado en 1935 para un segundo mandato, y en 1941 para uno tercero. Su régimen se caracterizó por la falta de libertades civiles, así como por restricciones a la libertad de expresión. Sus políticas en favor de los intereses de las empresas de Estados Unidos, y la Ley contra la vagancia (según la cual los campesinos debían trabajar de forma gratuita 150 días al año en las fincas de los grandes terratenientes) despertaron el descontento popular, y Ubico se vio obligado a renunciar finalmente el 1 de julio de 1944.

El escritor es detenido ese mismo año por orden del general Federico Ponce Vaides quien sucedió a Ubico como presidente provisional. Ponce continuó con los esquemas de su antecesor y aunque nunca se postuló como candidato oficial, obstaculizó el proceso democrático, persiguiendo de manera constante a los dirigentes políticos opositores al régimen. Durante el gobierno de Federico Ponce surgieron los primeros partidos políticos modernos y se manifestó una conciencia revolucionaria que se opuso a los intentos de Ponce de perpetuarse en el poder.

La Revolución de 1944 fue un movimiento cívico-militar ocurrido en Guatemala el 20 de octubre de 1944, encabezado por militares, estudiantes y trabajadores, que derrocó al gobierno de facto del General Federico Ponce Vaides, dio lugar a las primeras elecciones libres en ese país, e inauguró un período de diez años de modernización del Estado en beneficio de las mayorías de clase trabajadora.

El segundo exilio de Monterroso ocurre en 1954, cuando llega a Chile desde Bolivia, donde había sido cónsul del gobierno democrático de Jacobo Arbenz que fue derrocado por el general Castillo Armas (Presidente de Guatemala desde 1954 hasta su asesinato en 1957) con el apoyo de los EE.UU. En Santiago de Chile publica en el diario El Siglo el cuento «Míster Taylor», escrito en La Paz Guatemala, en el que ironiza sobre la intervención norteamericana en el país andino.

1.2. Contexto Social:

Monterroso se crio y educó en el seno de una familia muy liberal, en la que se leía y se frecuentaba a los intelectuales, artistas, toreros y músicos de la época, no sólo centroamericanos, sino también hispanoamericanos e incluso españoles. En su casa reinaba un ambiente bohemio. La familia regentaba una imprenta que editaba el periódico Sucesos. A los once años el autor decide abandonar la escuela y

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