ANTIBIOTICOTERAPIA EN PEDIATRIA
Denisse3695 de Abril de 2013
38.866 Palabras (156 Páginas)474 Visitas
STAPHYLOCOCCUS SPP
Staphylococcus (del griego σταφυλή, staphylē, "racimo de uvas" y κόκκος, kókkos, "gránula"). Los estafilococos son bacterias aerobias, grampositivas que crecen en parejas y racimos y son ubicuas como flora normal en los humanos y están presentes en los fómites y en el polvo. Son resistentes al calor y a la desecación y pueden encontrarse en ambientes no biológicos semanas o meses después de la contaminación. Las cepas se clasifican en Stafilococcusaureus si son coagulasa-positivos o en alguna de las múltiples especies si son coagulasa-negativos (p.ej., S. epidermidis, S. saprophyticus, S. haemolyticus).
Es una de las causas más frecuentes de infección piogénica de la piel y de los tejidos blandos; produciendo impétigo, forúnculos, celulitis, abscesos, linfadenitis, paroniquia, onfalitis e infecciones de heridas.
CLÍNICA PEDIÁTRICA:
Piel: Causa importante de infección cutánea piógena, que incluye impétigo contagioso, ectima, impétigo ampolloso, foliculitis, hidradenitis, forúnculos, ántrax, síndrome de piel escaldada estafilocócico y un síndrome que semeja el rash de la escarlatina. La infección puede complicar una herida o presentarse como la sobreinfección de otra enfermedad cutánea no infecciosa. (p. ej., eczema). La foliculitis o piodermitis del folículo piloso puede extenderse y formar un forúnculo o ántrax si se afecta más de un folículo. La forunculosis recurrente es una patología de causa desconocida que se asocia con episodios repetidos de pioderma durante meses o años. Los abscesos recurrentes cutáneos y de tejidos blandos se han observado en S. aureus resistente a meticilina (SARM) asociado a la comunidad. Staphylococcus es también una causa importante de infección cutánea nosocomial.
Tracto respiratorio: Las infecciones del tracto respiratorio superior debidas a S. aureus son raras si se considera la frecuencia con que esta área se coloniza (especialmente las fosas nasales anteriores). La otitis media y sinusitis debidas a S. aureus son poco frecuentes. La sinusitis estafilocócica es bastante habitual en los niños con fibrosis quística o con defectos en la función leucocitaria. La parotiditis supurativa es una infección rara, pero S. aureus suele ser su causa. La traqueítis membranosa que complica el crup viral puede infectarse por S. aureus, pero también por otros organismos. Los pacientes suelen tener fiebre alta, leucocitosis y presencia de obstrucción de la vía respiratoria superior o un cuadro similar al shock tóxico. La laringoscopía directa o broncoscopía muestran una epiglotis normal con estrechamiento subglótico, así como secreciones purulentas y densas en la tráquea. El tratamiento consta de antibióticos y cuidado de la vía respiratoria.
La neumonía debida a S. aureus puede ser primaria (hematógena) o secundaria a una infección viral como la gripe. La neumonía hematógena puede ser secundaria a émbolos sépticos, endocarditis derecha o la presencia de dispositivos intravasculares. La neumonía por aspiración se debe a alteraciones en el aclaramiento mucociliar, disfunción leucocitaria o adhesión bacteriana iniciada por una infección viral. Lo más frecuente es la fiebre alta, el dolor abdominal, la taquipnea, la disnea y la bronconeumonía localizada o difusa, o bien la afectación lobar. S. aureus puede producir neumonitis necrozante; con frecuencia desarrollan empiema, neumatoceles, pioneumotórax y fístulas broncopleurales. La neumonía estafilocócica ocasionalmente produce enfermedad intersticial difusa, caracterizada por disnea extrema, taquipnea y cianosis. La tos puede no ser productiva. S. aureus es un patógeno importante en los pacientes con fibrosis quística.
Sepsis: La bacteriemia estafilocócica y sepsis pueden ser primarias o asociadas a cualquier infección localizada. El inicio puede ser agudo, con náuseas, vómitos, mialgias, fiebre y escalofríos. Los organismos se localizan en cualquier lugar (normalmente un foco único oculto), pero especialmente se encuentran en el pulmón, válvulas cardiacas, articulaciones y huesos.
En algunos casos, en especial en los varones adolescentes, se produce enfermedad diseminada, caracterizada por fiebre, bacteriemia persistente a pesar de los antibióticos y afectación focal de dos o más tejidos separados (p. ej., piel, hueso, articulación, pulmón, hígado corazón, riñón). Debe descartarse endocarditis y tromboflebitis séptica.
Músculo: Los abscesos estafilocócicos musculares localizados y asociados con elevación de las enzimas musculares pero sin septicemia se han venido llamando piomiositis tropical. Esta enfermedad se ha descrito con más frecuencia en las áreas tropicales, también se ha registrado en Estados Unidos en niños sanos. En un 30-40% de los casos hay abscesos múltiples. Los síntomas pródromos consisten en coriza, faringitis, diarrea o traumatismo previo en el lugar del absceso. El drenaje quirúrgico y el tratamiento antibiótico adecuado son esenciales.
Huesos y articulaciones: S. aureus es la causa más frecuente de osteomielitis y de artritis supurativa en los niños.
Sistema nervioso central: La meningitis por S. aureus es rara; se asocia con traumatismo craneal penetrante y con procedimientos neuroquirúrgicos (p. ej., craneotomía, colocación de derivación de líquido cefalorraquídeo y menos frecuentemente con endocarditis, focos parameníngeos (p. ej., abscesos epidurales o cerabrales), diabetes mellitus o neoplasias. Los resultados del líquido cefalorraquídeo en la meningitis por S. aureus son indestinguibles de los de otras causas bacterianas de meningitis.
Corazón: La endocarditis infecciosa puede seguir a una bacteriemia estafilocócica. S. aureus es una causa frecuente de endocarditis aguda en válvulas nativas. Puede complicarse con perforación valvular, abscesos miocárdicos, insuficiencia cardiaca, alteraciones de la conducción, hemopericardio agudo, pericarditis purulenta y muerte súbita.
Riñón: S. aureus es una causa frecuente de abscesos renales y perirrenales generalmente de origen hematógeno. La infección urinaria por S. aureus es poco frecuente.
Síndrome de shock tóxico: S. aureus es la principal causa de Síndrome de shock tóxico.
Tracto intestinal: La enterocolitis estafilocócica sigue al sobrecrecimiento estafilocócico de la flora normal intestinal. Aunque es poco frecuente, esto puede originarse tras el uso de antibióticos de amplio espectro por vía oral. La diarrea presenta sangre y moco. La peritonitis asociada con S. aureus en los pacientes en diálisis peritoneal a largo plazo suele afectar al túnel del catéter. Para conseguir la cura bacteriológica es necesario retirar el catéter.
La intoxicación alimentaria puede deberse a la ingesta de enterotoxinas preformadas producidas por estafilococos en alimentos contaminados. Aproximadamente 2-7 horas tras la ingesta de la toxina aparecen intensos vómitos súbitos. Puede presentarse una diarrea acuosa, pero no hay fiebre o es poco elevada. La sintomatología rara vez persiste más de 12-24 horas. En raras ocasiones se produce shock y muerte.
TRATAMIENTO ANTIBIÓTICO:
Primera elección niños Contraindicaciones Nombre comercial Dosis adultos Nombre genérico Efectos adversos Alternativas
Staphylococcus, resistente ameticilina Vancomicina
40-60 mg/kg/24horas divididos cada 6 h i.v). Sospecha de s. aureus. Hipersensibilidad. Vancocín; Vancoled; Vancomax; Vancotie Oral. Ads.: 500 mg/día, repartidos en 3-4 tomas, 7-10 días; casos graves hasta 2 g/día. VancomicinaClorohidrato Nefro y ototoxicidad, neutropenia reversible, reacción anafilactoide y síndrome del cuello rojo tras infus. rápida, flebitis local, fiebre medicamentosa, náuseas, escalofríos, eosinofilia, exantemas, dermatitis exfoliativa, S. de Steven-Johnson. TMP/SMZ
Dicloxacilina
Minociclina
Fluorquinolona
Linezolida
Daptomicina
Tigeciclina
Gentamicina
3- 7.5 mg/kg/día i.v (máx. 500 mg día) divididos cada 6 h Hipersensibilidad a aminoglucósidos. Gentamina; Glevomicina; Plurisemina; Rupegen; G.Larjan; Gentaflam; G. IM/IV. Ads., infección grave: 1 mg/kg/8 h o bien 3 mg/kg/24 h en perfus. IV (30-60 min), 7-10 días; en riesgo vital: máx. 5 mg/kg/día, repartido en 3-4 dosis; infección respiratoria, fibrosis quística: 8-10 mg/kg/día; infección de gravedad moderada y urinaria: 1 mg/kg/12 h. Gentamicina Aumento de BUN, nitrógeno no proteico y creatinina sérica; oliguria, cilindruria, proteinuria, mareo, ataxia, vértigo, tinnitus, zumbido de oídos e hipoacusia, neuropatía o encefalopatía periférica, adormecimiento, hormigueo, contracción muscular, convulsión y síndrome tipo miastenia gravis, depresión respiratoria, letargia, confusión, trastorno visual, disminución de apetito, pérdida de peso, hipo e hipertensión, picor, urticaria, edema laríngeo, reacción anafilactoide, fiebre, cefalea, náuseas, vómitos, incremento de salivación, estomatitis. Aumento de transaminasas y bilirrubina sérica, disminución nivel de Ca, Mg, Na y K, anemia, leucopenia, granulocitopenia, agranulocitosis transitoria, eosinofilia y trombocitopenia.
RifampicinaNiños ≤ 1 mes: 10 mg/kg/día, en 1 toma; niños > 5 años (< 5 años, sin determinar): 10-20 mg/kg/día en 1-2 tomas; máx. 600 mg/día. Quimioprofilaxis de N. meningitidis: 10 mg/kg/12 h, 2 días; niños < 1 mes: 5 mg/kg/12 h, 2 días.
Vía IV (en politerapia). Ads. Tuberculosis:
...