“Acciones humanas que impactan en el ambiente”

Universidad Tecnológica Equinoccial

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Integrantes:

Carolina Dután

Daniela Zaragosin

Fecha:

Jueves, 25 de enero del 2018

Asignatura:

Lenguaje y Comunicación

Carrera:

Ingeniería Automotriz

Ensayo:

 “Acciones humanas que impactan en el ambiente”.

En la actualidad el medio ambiente vive amenazado por el hombre, que ha sido el autor del deterioro de las condiciones de vida en los diferentes ecosistemas. Todo esto se debe al crecimiento en el desarrollo industrial, político y económico de los países, que han provocado e influido en la perdida y el empobrecimiento de los recursos naturales de nuestro planeta, logrando así la extinción de hábitat y especies, importantes para el equilibrio del medio ambiente.

De acuerdo al artículo publicado por Noticias teleSur (2017), entre las organizaciones que se encargan de medir el impacto del hombre al ambiente se encuentra Worldwatch Institute^[1], los cuales afirman que la situación de la Tierra es insostenible, pero ¿cuáles son los impactos que hacen que el hombre amenace al medio ambiente?, ¿cómo logra destruir ecosistemas enteros y acabar con la biodiversidad de la Tierra de una manera tan veloz?, estas preguntas son fáciles de contestar, pues las acciones humanas que impactan en el ambiente son innumerables. Sin embargo, en el Ecuador una de las actividades que sin duda ha afectado y alterado en gravedad a nuestro ecosistema es el derrame por la extracción de petróleo, que como consecuencia da cabida a la destrucción de la flora y fauna, así como la contaminación del agua en las zonas afectadas.  

"Ecuador es el mejor ejemplo de por qué no se debe extraer petróleo en la Amazonía. Ha habido derrames muchísimas veces. En los últimos 30 años por las operaciones petroleras en la Amazonía se han derramado algo así como 20 millones de galones de petróleo", dijo Diego Mosquera director de la Estación de Biodiversidad de Tiputini (2010), pero ¿por qué no se detiene la extracción de petróleo en el país?, la respuesta es simple, la capacidad que ha tenido el petróleo dentro de la historia financiera del Ecuador, ha logrado que en varias ocasiones se pase por alto leyes y derechos expuestos en la Constitución, causando no solo un delito en zonas protegidas, sino la falta de control y supervisión sobre  la extracción de petróleo, poniendo en riesgo el ecosistema y los servicios básicos que conllevan a problemas en la salud de varias poblaciones cercanas.

Según el  Instituto Regional de Derechos Humanos (INREDH)^[2], un claro ejemplo del impacto ambiental que produce el derrame por extracción de petróleo, es el ocurrido el 25 de febrero del 2099, en Santa Rosa, provincia de Napo, provocado por el oleoducto OCP (Oleoducto de Crudos Pesados), con un derrame de aproximadamente 14.000 barriles de crudo, que afecto la flora y fauna de la zona de Lago Agrio, contaminando algunos ríos, como el Coca, y el abastecimiento de agua de las comunidades que habitan en ese sector como el Cantón Francisco de Orellana. Por lo tanto, los derrames por petróleo tienen grandes repercusiones ecológicas y económicas, todo esto causado por la negligencia de ser humano. 

De acuerdo al Biólogo Paúl Tufiño, la explotación petrolera es la principal causante de pérdidas de animales, plantas y ecosistemas en la Amazonía, especialmente en Napo, Sucumbios y Orrellana. Por consiguiente, debemos comprender que el impacto del derrame por extracción de petróleo conlleva a la destrucción de la flora y fauna, provocando la migración, la desaparición y reducción de animales y plantas. ¿Por qué la extracción de petróleo afecta la flora y fauna?, la extracción del petróleo destruye la flora y fauna porque contiene algunos componentes solubles en el agua y otros con emisiones toxicas, que se consignan en el fondo de los ríos. Así mismo la destrucción de la fauna y la flora se debe a la infraestructura y construcción indirecta. Por ejemplo: el bloque 31 ubicado dentro del Parque Nacional Yasuní, cuenta con una central de procesamiento, 30 kilómetros de oleoducto, campamentos, helipuertos tanto permanentes como temporarios, líneas de transición, carreteras, 14 pozos y 2 plataformas. Todo lo que implica la ubicación de yacimientos petroleros, representa una pérdida de la flora y fauna, logrando que existan cada vez más especies en peligro de extinción. Cabe recalcar, que la extracción de petróleo genera la deforestación y degradación de varias especies de árboles, ya que, al crear yacimientos de pozos, se facilita el acceso a bosques, y por ende este conlleva a la tala de los mismos. 

Algo semejante ocurre con la contaminación del agua en zonas afectadas, causada de igual manera por los derrames de la extracción de petróleo, que pone en peligro la salud, el bienestar y la forma de vivir de varias poblaciones. Hoy en día existen muchas comunidades dentro de las zonas afectadas que no pueden consumir y utilizar el agua de los ríos. Es necesario recalcar que exponer a poblaciones a consumir agua contaminada con materiales tóxicos o metales pesados, va contra la integridad y el derecho de todas las personas. El estado tiene el deber de garantizar al acceso al agua limpia y de calidad, para el consumo de la mima y evitando el riesgo en las poblaciones.

De acuerdo al artículo realizado por INREDH (2016), el 82.4% de la población se ha enfermado en alguna ocasión por la contaminación: el 96% de los enfermos reportan problemas de la piel, 75% problemas respiratorios, 64% problemas digestivos, 42% problemas en los ojos. Por lo tanto, el impacto de derrames de petróleo ha afectado a muchas poblaciones, contaminando las fuentes de agua en la región. De manera especial han sido afectadas las etnias como los Cofanes, Sionas y Secoyas que se han reducido su número de pobladores corriendo hoy en día  el peligro de desaparecer.

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