Alimentacion Durante El Ambrazo

IMPORTANCIA DE UNA ALIMENTACION BALANCEADA DURANTE EL EMBARAZADA

La mujer debe mantener un buen estado de nutrición y salud ya que es fundamental, cuando piensa quedar embarazada. El estado nutricional de la madre antes del embarazo, tiene un impacto en el peso del niño al nacer, que el incremento de peso durante el embarazo. El déficit nutricional antes y durante el embarazo, puede ser causa de infertilidad, aborto espontaneo, parto prematuro, malformaciones congénitas, menor peso de nacimiento y mayor probabilidad del niño, de enfermarse y morir en el momento de nacer o en los primeros días de vida.

En el momento de la concepción, la mujer debe tener muy claro que las pautas dietéticas le serán impuestas, ya que de ello dependerá que el futuro bebe tenga un desarrollo equilibrado. El organismo de la madre debe adaptarse a las nuevas necesidades. No existen muchas diferencias entre esta dieta y el de una mujer no embarazada, pero deben introducirse ciertos cambios: hay que aumentar solo un 20 o 25% la cantidad total de calorías diarias (unas 300 o 400Kcal más al día) en forma de hidratos de carbono y proteínas y aumentar el consumo de vitaminas y minerales.

Una nutrición adecuada agiliza la recuperación de la madre después del parto. Las complicaciones en el embarazo como la toxemia (trastorno del organismo causado por la presencia de toxinas en la sangre), el parto prematuro y la anemia, pueden originarse de una dieta insuficiente e inadecuada.

Debido a que las moléculas alimenticias pasan de la sangre materna a la del bebe por el cordón umbilical a través de la sangre, es muy importante llevar una dieta sana y equilibrada durante este periodo; así que se debe tener cuidado al escoger los alimentos para consumir la calidad y cantidad que realmente se necesita, sin comer el doble como se acostumbra.

No se necesitan dietas especiales, dietas restrictivas, ni eliminar el consumo de algunos alimentos por creencias o tabúes equivocados; al menos que exista alguna contraindicación médica o nutricional. En la práctica cotidiana muchas mujeres en edad fértil tiene un bajo consumo de lácteos, verduras y frutas, por lo cual debe haber una preocupación especial por cubrir las recomendaciones de estos alimentos. El cambio en la dieta debe por lo tanto ser más cualitativo, que cuantitativo.

Existen circunstancias que pueden comprometer el estado nutricional materno: situación económica, tercer embarazo en menos de dos años (las reservas maternas se agotan y esa deficiencia se manifiesta mediante anemias, descalcificaciones, etc.), dietas extremas durante el embarazo, malos hábitos alimenticios, consumo de tabaco, alcohol u otras drogas, bajo peso del embarazo, embarazos gemelares y embarazadas adolescentes.

Las necesidades de estas últimas son superiores a las de una mujer adulta al estar aun en edad de crecimiento, donde se genera una especie de competencia, entre el organismo materno y el del feto para conseguir nutrientes esenciales para el desarrollo.

Este control de la nutrición de una mujer en estado debe ser llevado a cabo bajo una evaluación de un medico que sigue el desarrollo del embarazo, junto con el profesional sanitario especialista en nutrición.

INCREMENTO DE LAS NECESIDADES DE ENERGIA Y PROTEINAS

Las necesidades de energía y de nutrientes de la madre aumentan durante el embarazo, como consecuencia de los cambios corporales que ocurren en su organismo y de las necesidades del bebé en formación. La medida de los requerimientos energéticos para la mujer embarazada es de 2563Kcal/al día.

El objetivo de incremento es suministrar los nutrientes (hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales) para cubrir las necesidades de la propia madre.

Por otro lado podemos encontrar que las proteínas son aminoácidos que ayudan también para el desarrollo del feto y la placenta y para el aumento del tamaño del útero y los pechos.

Como el gasto energético es variable, la mejor forma de garantizar que la alimentación sea la adecuada, es un aumento de peso suficiente. La energía necesaria durante el embarazo, se obtiene principalmente de los nutrientes esenciales tales como carbohidratos y grasas, mientras las proteínas forman tejidos y órganos.

Se tiene que tener en cuenta que todo en exceso es dañino, por ende el consumo excesivo de carnes, aceites, quesos, huevos, etc. pueden causar ciertos trastornos en el feto como lo son las modificaciones genéticas, ocasionando defectos cardíacos congénitos. Las interacciones entre los genes y el medio ambiente van de la mano por ende pueden afectar el desarrollo del embrión durante su periodo de gestación.

NUTRIENTES ESENCIALES PARA EL EMBARAZO

Cada grupo de alimentos por sí solo es incapaz de proporcionar todo lo que el organismo necesita y menos en una etapa tan delicada como lo es el embarazo. Por este motivo, es esencial elegir una amplia variedad de alimentos para construir una dieta sana

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