Analizar el impacto de la inflación en la gestión presupuestaria en las empresas sector minero

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL

“SIMÓN RODRÍGUEZ”

NUCLEO DE EDUCACIÓN AVANZADA, CARACAS

CONVENIO PDVSA

METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN

SECCION: B

Proceso Inflacionario y su incidencia en el Presupuesto Público en

La Gestión Presupuestaria del Sector Minero

Caracas, 25 de Mayo, 2015

CAPITULO I

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Analizar el impacto de la inflación en la gestión presupuestaria en las empresas sector minero. Esta investigación permitirá a la organización analizar el impacto de la inflación en la gestión presupuestaria de las empresas mixtas del sector minero e interpretar las variantes halladas y anticipar los costos que se han generado por la inflación, así como actualizar sus tabuladores y toma de decisiones, en concordancia con el índice inflacionario originado.

La crisis financiera mundial y latinoamericana es el resultado de la liberalización financiera de las últimas dos décadas, que no fue acompañada de una nueva regulación adecuada, y del exceso de liquidez global, generado principalmente por los países desarrollados. Es decir, el exceso de liquidez y la inadecuada regulación de un sistema financiero internacional muy integrado, ha colocado a la economía mundial al borde de la recesión. En el marco de este contexto es fácil concluir, que tal situación afecta todos los distintos sectores económicos incluyendo el sector minero a nivel internacional, lo que incide en los cálculos presupuestarios para fortalecer cada uno de estos sectores.

FORMULACIÓN DEL PROBLEMA

Porque La liquidez y la inadecuada regulación del sistema financiero internacional integrado ha colocado a la economía mundial al borde de la recesión

La crisis financiera internacional, causada por el exceso de liquidez y la inadecuada regulación de un sistema financiero internacional muy integrado, ha colocado a la economía mundial al borde de la recesión. Además, las acciones unilaterales que los distintos gobiernos adoptaron en un principio pusieron de manifiesto la dificultad de la coordinación en un mundo económico multipolar y sin un liderazgo claro. Afortunadamente, se han aprobado paquetes de rescate y, bajo liderazgo británico, parece haberse forjado un consenso sobre la necesidad de recapitalizar el sistema bancario y asegurar los depósitos y los préstamos interbancarios. Ello no evitará la recesión, pero podría servir para que no sea profunda y duradera. En ese sentido, las lecciones de anteriores crisis han permitido a las autoridades reaccionar con cierta celeridad. Aún así, persisten importantes retos sobre cómo establecer un liderazgo compartido para dotar de mejores reglas a la globalización financiera.

Esta crisis tendrá consecuencias geopolíticas importantes, que todavía son difíciles de anticipar. Primero, la crisis significará un punto de inflexión en la globalización económica y pondrá fin al período de liberalización iniciado en los años 80 de la mano de Ronald Reagan y Margaret Thatcher. Aunque la crisis no supondrá la debacle del capitalismo, el Estado recuperará legitimidad y poder en relación al mercado y el modelo liberal anglosajón perderá parte de su atractivo e influencia, especialmente en favor de los modelos de inspiración europea con mayor regulación e intervención pública. Segundo, la crisis acelerará el declive relativo de EEUU y el auge de las potencias emergentes en la economía mundial (que con sus fondos soberanos adquirirán multitud de activos en los países ricos), lo que posiblemente anticipará y hará más radical la reforma de las instituciones de gobernanza global. En este sentido sería importante integrar rápidamente a las potencias emergentes en las deliberaciones sobre las reformas de los organismos económicos internacionales con el fin de que sean partes activas del proceso y lo consideren legítimo. Para ello las economías

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