CÓDIGOS ESTÉTICOS EN BARES Y DISCOTECAS - ESTADO DEL ARTE

CÓDIGOS ESTÉTICOS EN BARES Y DISCOTECAS - ESTADO DEL ARTE

Por:

Andrés Rubio López

Yessenia Usma Yepes

John Fredy Vergara Vélez

Investigación 2

Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid

Medellín

2016

Estado del arte

Códigos estéticos es bares y discotecas

Las discotecas hoy en día se han convertido en un espacio en el cual convergen prácticas culturales, personas de diferentes lugares, con diferente forma de vestirse. Pero en muchos de estos establecimientos se han implementado códigos estéticos que de alguna manera perfilan a las personas que pueden o no ingresar a estos lugares de esparcimiento, ya sea por la forma de vestirse o por factores exclusivos, estos establecimientos determinan el estrato socioeconómico de la persona y su posible aceptación.

En el marco de los fenómenos sociales ocurridos en lugares de esparcimiento tales como las discotecas, investigaciones como: HADFIELD, PHIL, MEASHAM, FIONA, Todo empieza con "E": Exclusión, etnicidad y formación de élites en el mundo actual de las discotecas inglesas, Adicciones [en línea] 2009, 21. Se pudo encontrar que los autores hacen un estudio sobre la polarización que se dio en las discotecas inglesas, pero que perfectamente puede ocurrir en cualquier discoteca del mundo. Las discotecas son establecimientos comerciales en los cuales su mayor interés es fomentar el consumo de alcohol a través de música popularmente conocida y por otro lado algunas discotecas alternativas se centran generalmente en el consumo de drogas ilegales. Este artículo profundiza en los diferentes fenómenos culturales que se adoptan en las discotecas o lugares de diversión nocturnos y hace énfasis en que este tipo de división, forma discotecas “pop” o “underground” creando una fragmentación en la estructura social, la exclusión y el espacio. Esta investigación hace referencia a la exclusión y desigualdad social en establecimientos de la vida nocturna por múltiples factores, entre estos los códigos estéticos; afirmando que: el código indumentario se utiliza para excluir a los que se cree, partiendo sólo de una primera impresión, que proceden de ambientes más pobres («catetos, tribus urbanas o pandilleros») y tienen un menor capital subcultural en el mundo de las discotecas. Esto se fundamenta en la valoración de la marca de ropa, en el estado de la misma, en su significado estilístico amplio y en la «actitud» del cliente, más que en la prenda de ropa concreta. Dichas personas no se consideran «discotequeros genuinos» y se rechazan por su capacidad potencial para «corromper el ambiente».

Un artículo referente es LA SEDUCCIÓN COMO ESTÉTICA de Calle 14: revista de investigación en el campo del arte de los autores Barrera Castañeda, Claudia, [en línea] 2012, 6 (Enero-Junio), en el cual tratan la seducción desde diferentes campos como la literatura, la sociología, la psicología y la política como estrategia de manipulación. La capacidad relacional de la estética y sus poderes condensados en el espíritu del hombre no pueden pertenecer al aparato instrumental de la sociedad de consumo o las estrategias de manipulación donde ha sido estigmatizada. Por esto la seducción es presentada como fuente de deseo y potencia vital. Es interesante tener en cuenta el artículo ya que una de las cosas en las que más se piensa al ir a una discoteca o un lugar de esparcimiento nocturno, ya sea público o privado es seducir y no solo lo piensan las personas sino el establecimiento como tal, ya que exigiendo un tipo de estética determinado esto conlleva a la seducción.

Por su parte ITURRIAGA ACEVEDO, EUGENIA, en su Investigación: La ciudad blanca de noche: las discotecas como espacios de segregación,

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