El kinesiologo es mi amigo

¿El kinesiólogo es mi amigo?

La terapia kinésica contiene muchos factores a tratar, de los cuales depende el éxito de esta. Cuando se habla de la relación kinesiólogo-paciente, hablamos de una relación de mucho más allá de solo sesiones y ejercicios, es algo mucho mas profundo, en donde nuestra actitud, nuestra interacción con el paciente y nuestra destreza a la hora de aplicar lo que sabemos es sumamente importante, puesto que, al iniciar una rehabilitación debemos crear una conexión con la persona a tratar, debemos trabajar en equipo, crear un círculo en donde la confianza, el respeto y la empatía sea lo primordial para así, poder alcanzar juntos un mismo objetivo.

Esta demostrado, según estudios, que los pacientes con el simple hecho de entablar una conversación, al ser escuchados y ser comprendidos, sienten un alivio tanto físico, como también emocional y este último es muy importante, ya que, la rehabilitación de una persona, depende en gran parte de cómo se siente, en la actitud, en el optimismo, en las ganas de salir adelante, en esas pequeñas cosas que generaran grandes cambios. Es por esto que el bienestar emocional es crucial para un correcto avance, puesto que, si el paciente esta tranquilo, feliz y confiando plenamente en la capacidad del profesional, es muy probable que su rehabilitación sea un éxito total, por el contrario, si el paciente no quiere mejorarse, es negativo, no tiene ganas de seguir, será casi imposible progresar.

En todos estos casos, mencionados anteriormente, el kinesiólogo debe saber actuar, debe hacer todo lo que este a su alcance para conseguir el bienestar de sus pacientes, para esto existen muchas herramientas que van más allá del conocimiento, herramientas como, la primera impresión, el saludo, el ser empático, el contacto físico seguro, el saber expresarse, el lenguaje, el saber generar confianza. El paciente debe vernos como un amigo, con el cual puede hablar, en quien puede confiar, en donde sepa que va a estar seguro, en donde tenga claro que siempre se velara porque se encuentre bien.

Gran parte de los pacientes esperan que el kinesiólogo tenga un comportamiento afectivo y empático, muchas veces van con objetivos y expectativas, las cuales el profesional debe tener siempre presente y saber dar información de manera que el paciente comprenda y juntos concretar un objetivo realista y tratar de alcanzarlo. El dar la información de manera clara, entendible y simple, es trascendental a la hora de hablar con el paciente, puesto que, este al comprender lo que le sucede, al saber en todo momento que es lo que le están haciendo y porque, le producirá motivación, ya que, se sentirá participe del tratamiento y a la vez en confianza, puesto que sabrá, en base a fundamentos, que el tratamiento es el correcto y que está en buenas manos.

Debemos siempre tener claro que cada sesión es una oportunidad, para conversar,

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