Enfermeria y cuidado

ENFERMERÍA Y CUIDADO

Como educandos y futuros profesionales de enfermería somos seres consientes de la responsabilidad que esta profesión conlleva, en nuestras manos tendremos a cargo el cuidado de la vida de muchas personas, y durante el transcurso del proceso de formación dentro del ALMA MATER se nos ha instruido de buena manera para brindar un adecuado cuidado a todos aquellos que lo requieran.

Pero el cuidar a una persona no es simplemente limpiar sus heridas, administrar medicamentos o llevar control de sus signos vitales, va mucho más allá. Cuidar es una actividad humana que se define como una relación y un proceso cuyo objetivo va más allá de la enfermedad^[1]. Es ver al paciente como un ser total que tiene sus propios problemas, temores, angustias. Nada mejor que en las mañanas te saluden de buena manera, que te llamen por tu nombre, que indaguen de forma cortes por tu estado de ánimo, al parecer nada esto se relaciona con su recuperación pero es un concepto erróneo debido a que todas estas actividades, favorecen un buen estado de ánimo y gracias todo un proceso fisiopatológico desarrollado en nuestro cuerpo permite una recuperación en un menor tiempo.

Nuestra profesión nos exige una vocación específica la cual implica ejercer nuestro trabajo con espíritu de servicio sin admitir la mediocridad, no se admiten las cosas mal hechas; debemos estar convencidos de la nobleza de nuestro trabajo. No debemos detenernos siempre en lo fácil sino buscar y enfrentar siempre lo difícil; nuestra vocación no debe admitir nunca la rutina, no se aceptan enfermer@s mecanizados quienes realizan sus actividades por costumbre. Jamás debemos olvidar que somos personas, seres humanos tan similares como aquellos que estamos cuidando, esta por esta razón que debemos brindar un cuidado como si fuésemos nosotros los receptores de esos cuidados.

Desafortunadamente en ocasiones a nuestra profesión se le resta importancia y tal vez sea porque en la actualidad esa es la imagen que estamos reflejando, hablo de aquellos profesionales que simplemente su turno se limita a estar detrás de un escritorio, dejando así de lado el compartir aunque sea un momento con todos aquellos pacientes que se tiene a cargo, de igual manera talvez sea por desconocimiento de los pacientes o sus familiares pero hay quienes nos ven como aquellos encargados simplemente de actividades tales como su higiene, e higiene de sus habitaciones, esto podría estar relacionado a la errónea imagen que se nos ha vendido que en ocasiones solo somos ayudantes del personal médico. Pero talvez todo esto se deba a la falta de perspicacia nuestra, el no compartir con nuestros pacientes no permite que ellos nos conozcan, que nos identifiquen como personas capaces de desarrollar una gran cantidad de actividades para mejorar su salud, que no por nada para ser profesionales nos hemos preparado durante mucho tiempo, realizando grandes sacrificios y esfuerzos.

Esta en nosotros, en nuestro actuar, en reflejar aquellos conocimientos adquiridos durante el transcurso de nuestra formación, en el trato que le brindemos a nuestros futuros pacientes. De esta forma iremos forjando a futuro el respeto por nuestra profesión al ser identificado como profesionales capaces, competentes de desarrollan todo tipo de actividades en beneficio del cuidado de la salud de todas las personas, y por último y no menos importante en ser reconocimos como seres humanos.

CONCLUSIONES

Las personas quienes reciben cuidados por parte del personal de enfermería son seres humanos tan similares como aquellos encargados de brindar estos cuidados, personas las cuales tienen sus dificultades, temores, de igual manera expectativas para con nosotros, ellos esperan enfermer@s con sentimientos, quienes entiendan y compartan sus situaciones y no simplemente se limiten a realizar sus actividades de forma rutinaria.

Como futuros profesionales de enfermería nuestra labor será brindar cuidado a las personas tanto en hospitales, como en sus hogares. Muchas veces lo que pasa es que simplemente nos enfocamos en brindar este cuidado, pero olvidamos algo muy importante que es la comunicación, en ocasiones simplemente nos limitamos a dar indicaciones sin explicar estas en que les beneficiaran o porque tiene que hacerlo, de esta manera el paciente realiza las actividades solicitadas pero no se interesa en el cuidado de su salud.

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