Entomologia Forense

Entomología Forense

Oscar Eduardo Obando Guzmán; Estudiante Programa de Biología; Facultad de Ciencias Básicas; Universidad de la Amazonia.

La Entomología Forense, también llamada Entomología Médico-Legal, es el campo del saber donde la ciencia de los artrópodos es empleada como herramienta en las investigaciones de la escena del crimen y otros casos forenses.

El entomólogo forense participa en la identificación de los artrópodos, en el análisis de la data entomológica, en la interpretación de esta y así, contribuye con la determinación del tiempo o Intervalo Post-Mortem (I.P.M.), y lugar de la muerte. Con tal finalidad, debe seguir dos enfoques principales: el primero, consiste en la observación del desarrollo de los insectos de acuerdo a la temperatura (generalmente el de las moscas); y el segundo, está representado por el reconocimiento de la sucesión predecible de artrópodos que facilitan la descomposición de la materia orgánica, incluyendo los cuerpos humanos o cadáveres de animales (CARDOZO et al 2005).

El primer documento sobre un caso resuelto por la entomología forense se remonta al siglo XIII y se encuentra en un manual chino de medicina legal, el cual refiere a un homicidio en que apareció un labrador degollado por una hoz. Se describe que el día después de la muerte, el investigador pidió a todos los labradores que pusieran su herramienta de trabajo (hoz) en el piso. Trazas invisibles de sangre atrajeron moscas a una única hoz. Confrontado con la evidencia el dueño de la hoz confeso su crimen (VENEGAS 2007); pero es Jean Pierre Mégnin (1828-1905), veterinario y entomólogo francés, el que inicia los primeros estudios sobre la fauna cadavérica.

Dentro de la clasificación de la entomología podemos encontrar varias ramas que derivan de ella:

• Entomología médico legal: define un dictamen médico que facilite conocer el motivo de muerte

• Entomología urbana: estudia la relación de los insectos con el medio ambiente

• Entomología de alimentos almacenados: aclara casos de muertes relacionados como su nombre lo indica, con alimentos empacados o almacenados (WOLFF 2011).

Y como es necesario también existen bases entomológicas que permiten desarrollar la ecología de la descomposición creándose de esta forma las llamadas sucesiones ecológicas que reconocen las fases de descomposición que son fresco, hinchado, descomposición activa, descomposición avanzada y esqueletización, además las diferentes curvas de crecimiento y la entomotoxicologia, estas son:

• La morfología de los insectos: puesto que son un grupo demasiadamente grande y tiene mucha importancia a la hora de investigar un cadáver

• Taxonomía: que incluye las estructuras que permiten la identificación de los insectos encontrados en la escena del crimen

• Ecología que es la que comprende la biología del entorno en donde se encontró el cadáver. (WOLFF 2011).

Es de resaltar que en Colombia esta ciencia es relativamente nueva, pues han sido pocos pero muy significativos los casos que se han registrado y publicado hasta el momento.

En el año 1999 se realiza el primer estudio de insectos asociados a cuerpos en descomposición utilizando para ello un perro en Cali y cerdos en Medellín, el primer trabajo publicado se presenta en 2001, a partir de allí, se han enfatizado principalmente en el conocimiento de las especies en diferentes zonas bioclimáticas del país, con el propósito de estudiar la sucesión de insectos de importancia legal como herramienta en la determinación del intervalo postmorten.

En total se presentan 17 especies de importancia forense, agrupadas en las sub familias Calliphoridae, Chrysomynae y Toxotarsinae; siendo Calliphoridae el grupo más profundamente

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