Esclava que realiza faenas de trabajo en la Hacienda San Mateo

Bolívar: Niño travieso a la edad de 07 años aproximadamente, siempre ha sido protegido por su negra Hipólita. Había quedado huérfano de padre en el año1786.

Madre de Bolívar: Doña Concepción Palacios y Blanco, el apellido Palacios era gallego, descendía de una familia culta, era pariente de los Sojo. Se casó con Juan Vicente Bolívar y Ponte a la edad de 15 años, a los 25 ya tenía cuatro hijos siendo el menor Simón Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar y Palacios. Dama culta, hogareña, preocupada por la educación de sus hijos.

Misia Hipólita: Esclava de la familia, pero no considerada como tal, ante la enfermedad de la madre de Simón lo amamanta junto a Inés Mancebo amiga de la familia . Simón siempre las trato con el cariño que se le otorga a dos madres.

Pascual: Esclavo de la familia trabaja en la hacienda San Mateo. Representa a cualquier esclavo de confianza.

Narradora: Esclava que realiza faenas de trabajo en la Hacienda San Mateo.

Esclavos: peones de la hacienda ubicada en los Valles de Aragua en una pequeña población San Mateo, trabajaban en la plantación a la cual con frecuencia viajaban los Bolívar

Misia Hipólita – Pacual, Pacuaaaal, ondetará ese mojino. Pacuaaaal, (aparece entre los esclavos que vienen de la cosecha).

Pacual – a la olden misia Hipólita.

Misia Hipólita - ¡Ya me le va a pega ¡... ¿Y po’que le va a pegá? ¿Po quéute e su mamá?. ¡Esa no elazón¡.¡Yo tambie soy su mámá ¡(señalándose así misma).! Su mamá somo la do¡. No me le pegue a mi niño, mi ama Concepción. ¡ Déjemelo maluco, déjemelo grosero, déjemelo lambio déjemelo pegón.

Madre de Simón. – Hipólita suelta a Simón que hay que corregirlo.

Misia Hipólita – E que ute no sabe como hay gente mala mi ama Concepción. ¡Que viene lo blanco malo¡ ¡Que viene lo negro malo¡, ¡Que le pegue a too¡. Que el tiene juticiapa pone la mano. No me le pegue mi ama (Con voz de ruego), no me le pegue, ute no emamae que yo. E ma él es del blanco, el es del neglo, ¡pa lo Bolívar¡, ¡pa lo Palacios¡...Pero mile mi ama Concepción, de peleón y justiciero, pa su maita lambia e. ¡Que si uté es su mama... la sangle es suya, la sangle es suya; pero la leche es ¡MIA...¡ (Señalándose así misma).

Narrador –“!Oh ¡símbolo de la justicia de Dios, el de una esclava que le da de mama a un Libeltadol.

(Quedan inmóviles: Simón, Hipólita y la madre de Bolívar. Suena un golpe muy suave de tambor y

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