Germinación de semilla de pepino con Ácido Giberélico
Tannya ValenciaInforme23 de Noviembre de 2015
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Germinación de semilla de pepino con Ácido Giberélico
Las semillas de pepino son alargadas y de color amarillento. El número de semillas pro gramo se puede cifrar en 30-40. La capacidad germinativa de estas semillas es de unos 5 años.
El ácido giberélico, más comúnmente conocido como GA3, es una hormona vegetal de crecimiento natural que se cosecha en los hongos y se produce de forma comercial para las industrias agrícolas y de jardinería. Debido a su baja toxicidad, la Agencia de Protección Ambiental ha aprobado el uso del ácido giberélico para ayudar a apresurar el proceso de germinación y de crecimiento en el cultivo de alimentos.
El GA3 induce la síntesis de a-amilasa, que es la enzima que toma parte en la desintegración de las reservas de almidón durante la germinación de las semillas. Debido a esta función, es bien conocido su uso como promotor o inductor de la germinación en diversos tipos de plantas (Lewak & Khan 1977; Bewley & Black 1994; Baskin & Baskin 1998; Tigabu & Odén 2001).
Durante el periodo de almacenamiento de las semillas inciden numerosos factores que determinan la viabilidad de las mismas, tales como la constitución genética de las semillas, de la temperatura a la cual ellas se mantienen, la humedad de las semillas, la temperatura a la cual ellas se mantienen, la humedad de las mismas y la duración del periodo de almacenamiento.(Alexander y doijode,1995)
La pérdida de la capacidad de germinación podría estar relacionada con los cambios en el balance endógeno de los reguladores del crecimiento vegetal en la semilla por lo se requiere de un suministro externo de estas sustancias para estimular la germinación. Dentro de los reguladores del crecimiento más estudiados se encuentra el ácido giberélico (AG3) el cual se ha empleado para estimular la germinación de semillas de diferentes especie. (Aoyama 1996)
Evaluación de reguladores de crecimiento sobre la germinación de semillas almacenadas de pepino.
Las semillas fueron lavadas con agua y detergente comercial, y enjuagados en agua corriente. Para su desinfección fueron colocadas en etanol 70% (1min) sumergidas en una solución de lejía comercial (2.5 %de cloro activo) durante 10 min y posteriormente lavadas con agua destilada estéril por tres veces.
Las semillas una vez desinfectadas fueron colocadas en placas Petri sobre papel de filtro con agua destilada (control) y diferentes soluciones, a una concentración de 0.1 y 1 mg/L cada una, de los reguladores de crecimiento utilizados .Se utilizaron 25 semillas/ placa y se analizaron dos replicas por tratamiento .Las placas fueron incubadas a 25 ± 2°C en un fotoperiodo de 16 horas luz y 8 horas de oscuridad durante un periodo de diez días.
Los resultados obtenidos en los porcentajes de germinación a los diez días posteriores al tratamiento variaron grandemente ante la aplicación de los diferentes reguladores empleados.
En la evaluación de semillas almacenadas de pepino cv ‘SS-5’Se obtuvieron incrementos en los porcentajes de germinación de 2 y 4 % en los tratamientos con 0.1 mg/L de ácido indol acético(AIA) y mg/L de becil amino purina (BAP) respectivamente con respecto al control
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La relación LH /LR mostró valores aceptables en ambos tratamientos seleccionados, lo que indica una buena calidad de las plántulas obtenidas. La longitud del hipocotíleo y la radícula están entre los factores que contribuye el vigor de las plántulas obtenidas en estudios de germinación.
Se ha evidenciado que las GA revierten la inhibición de la elongación de los hipocótilos de pepino que produce la luz roja (Azcon-Bieto y Talón, 2000).
El ácido giberélico es un regulador de crecimiento que hace posible un desarrollo óptimo de cultivos como el pepino el cual requiere abundante luz y calor .El empleo adecuado de esta sustancia puede incrementar la producción. El pepino, por su característica de fruto tropical, requiere de mucha luz y calor, por lo que especialistas determinaron desarrollar una técnica que satisficiera las demandas del fruto de la planta del pepino en condiciones de climas fríos, incrementando su follaje mediante la utilización del AG3 como regulador de crecimiento. (Mata y Rodríguez, 2000)
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