Habituación O Rehabilitación Auditiva

LOS PROBLEMAS DE AUDICION EN LA EDAD PREESCOLAR.

El sonido implica movimiento. EL mundo está en movimiento. EL mundo es sonido. El ser humano está rodeado por fenómenos sonoros que, al captarse, lo ponen en comunicación con su medio.

Para los animales , el sonido es fuente primordial de información pues los condiciona para desplazarse, busca el alimento, huir del peligro, sobrevivir y perpetuar la especie. En el hombre, el sonido permite la realización de conductas no solo reflejas o instintivas, si no también intelectuales. esto se realiza fundamentalmente por la modulación de los sonidos .

nada de esto es posible si el oído no funcionara o funciona defectuosamente. mas aun, el oído es la puerta de entrada y el punto de partida de la comunicación lingüística oral, pero no debemos de olvidar que es básicamente por el oído que se adquiere el lenguaje.

Es importante comparar el desarrollo de un niño norma oyente con el de un niño sordo. desde los primeros dias de nacimiento, el niño oyente reacciona ante ciertos sonidos. En cambio, el niño sordo no reacciona ante el ruido, pero esta ausencia de respuesta no es captada de inmediato por sus padres. Estos empiezan a inquietarse cuando el niño, ya mas maduro, no responde de acuerdo con lo esperado.

A los dos o tres meses de edad, el niño oyente fija su mirada en los labios del adulto que le habla y esboza movimientos lábiles con o sin emisiones de voz; el niño sordo, a esa edad, presenta características similares. a los tres o cuatro meses existe ruidos que tienen significado propio para el niño oyente: sabe bien si alguien entra en su habitación, si se le está preparando el biberón o si la madre lo llama, más adelante, distingue los ruidos familiares: la campana, el grifo del agua, la llave de la cerradura que se abre. en la misma edad, el niño sordo es indiferente el ruido del medio ambiente.

El lenguaje, como ya señalamos, es el elemento prioritario para el desarrollo del niño sordo. sin embargo, algunos padre de familia o terapeutas especializados tienen distintas opiniones respecto a las prioridades de un niño sordo. algunos dicen que lo más importante es el lenguaje; otros citan la educación auditiva, los aparatos para la audición, la interpretación del movimiento de los labios , el nivel intelectual, la orientación psicológica y didáctica a la terapia por medio del juego.

El niño sordo requiere que se le situé en un ambiente agradable y feliz, donde pueda desarrollar sus actividades y adquirir las experiencias de cualquier niño con audición normal.

El niño sordo debe ser tratado con una metodología especial elegida y empleada con rigor quienes participan en la orientación integrada de estos problemas.

La educación preescolar del niño sordo ha sido erróneamente comprendida y mal interpretada. Un niño con pérdida auditiva necesita desarrollar al máximo sus posibilidades. es la única manera

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