IMPORTANCIA DE LA ÉTICA EN EL SERVICIO PÚBLICO

INTRODUCCIÓN

A lo largo de los años las formas de gobierno han ido cambiando, hasta llegar a lo que ahora conocemos como democracia, en la cual el Servicio Público se encuentra para satisfacer las necesidades de la sociedad, procurar y administrar la justicia; garantizar el orden, la seguridad y la paz; velar por el respeto de las libertades y los derechos del hombre; asegurar la prestación de los servicios públicos, y procurar el bienestar de la sociedad y de las personas que la integran.

Es por lo anterior que la labor del servidor público es de suma importancia para el desarrollo y crecimiento de un país, y por consiguiente, de su sociedad, por lo que el desempeño de sus funciones deberá de ser en total apego a las normas morales de conducta, con un sentido del deber y la dignidad perfectamente definidos, pues son los encargados de garantizar la soberanía de la nación.

DESARROLLO

Cuando los servidores públicos incurren en alguna falta, están traicionando la confianza otorgada por la ciudadanía y en su caso también por sus superiores, que mediante el voto los eligió para desempeñar determinadas funciones, y aunado a los daños ocasionados por la falta cometida, podemos ver también, la cadena de servidores públicos que participan en dichos actos, pues este mal ejemplo se va extendiendo y contaminando cada vez a más personas que laboran en las instituciones públicas, y es aún mayor el daño, cuando el servidor público ocupa un cargo de mucha responsabilidad.

El servidor público debe estar consciente de los derechos y deberes que tiene como ciudadano, pero también debe incorporar en su cotidianidad las exigencias por parte de la ciudadanía, en el desempeño que realiza en el ámbito gubernamental que, van más allá de sus intereses, e incorpora los intereses y las necesidades de la sociedad. Esto no es algo inalcanzable, es la garantía de que la democracia opera en el máximo de sus posibilidades en los acontecimientos diarios a través de los cuales se construye.

En la democracia, el servidor público no renuncia a sus necesidades e intereses como ciudadano y contribuyente; eso, desde cualquier visión ética capaz e autoevaluarse, sería inmoral. Sin embargo, el servidor público se enfrenta diariamente a la necesidad de evaluar las consecuencias de sus actos a la luz del interés y del fin público. En este sentido, la decadencia y el conformismo de un servidor público tiene consecuencias que impactan los servicios y los derechos de la vida democrática: sus acciones suelen repercutir en las necesidades y condiciones de los demás.

CONCLUCIÓN

Se puede decir que la moral individual constituye en su conjunto la moral social, por lo que el fortalecimiento de la ésta podría combatir la corrupción. Así que, para lograr esto

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