LOS SENTIDOS DE LA ANACONDA

LOS SENTIDOS DE LA ANACONDA

La Anaconda es una boa de gran tamaño que habita en su mayoría en las selvas amazónicas de América del sur. Los sentidos de esta gran serpiente son vista, gusto, olfato, tacto y oído.

La vista de la Anaconda es muy limitada además de monocroma (ven a blanco y negro) puesto que sus ojos son de forma ovalada, siendo más ancho que alto. Sus ojos están ubicados en cada hemisferio de la cabeza y estos se mueven hacia delante y hacia atrás solamente, haciendo que no puedan ver por completo el frente de la cabeza. No poseen parpados movibles, en reemplazo tienen un lente transparente que se encuentra todo el tiempo protegiendo el ojo de la Anaconda, y éste se muda al tiempo que la piel (durante el proceso de ecdisis). Los ojos de las anacondas están compuestos por: pupila, que es de forma alargada; retina, iris, nervio óptico, conjuntiva, cornea, esclerótica, humor vítreo, que es de color grisáceo; y acuoso, que es amarillento. La transmisión del impulso es exactamente igual a la de algunos mamíferos: la imagen proyectada por la luz pasa por la pupila, se enfoca en el cristalino, y llega al revés a la retina, de allí pasa al nervio óptico y cuando pasa por el quiasma óptico (entrecruzamiento de los nervios ópticos) se endereza la imagen, para poder llevar la señal al cerebro y producir una reacción.

El sentido del tacto en las anacondas percibe los estímulos a través de la piel, y ésta se conforma por escamas que abarcan desde el cuello hasta el final de la cola, su cabeza en lugar de escamas posee placas. Tiene muy pocos receptores, corpúsculos y glándulas en la piel, pero en cambio posee muchas terminaciones nerviosas que la hacen muy sensible, pudiendo sentir las vibraciones del suelo. La Anaconda como todas las serpientes muda su piel aproximadamente cada año; La piel de este animal no es capaz de regular la temperatura del cuerpo, entonces ésta se regula mediante el ánimo de la serpiente, de ahí que la nombren como animal de sangre fría. Su piel posee varias ventajas como: la no sequedad frente a altas temperaturas o el fácil desplazamiento sin necesidad de extremidades, esto es gracias a la superposición de las escamas y su adherimiento al suelo; además hay que tener en cuenta que éstas Boas no se pueden mover en una dirección rectilínea, sino que para poder avanzar mayor territorio tienen que hacer un movimiento en zigzag.

Otro de los sentidos es el olfato, es uno de los más importantes de la Anaconda. Los orificios nasales se encuentran en la parte superior de la cabeza, de tal manera que esta pueda respirar cuando saca la cabeza del agua al encontrarse nadando. Está compuesto por dos fosas nasales flexibles las cuales pueden cerrarse para que la Boa pueda entrar al agua y retener durante aproximadamente 10 minutos el aire suficiente para su respiración; el bulbo olfativo que procesa la información captada por el órgano de Jacobson y la lleva al cerebro; fosetas termo sensitivas o la membrana termo receptora les permite detectar a cortas distancias las variaciones de calor, son muy sensibles a los rayos infrarrojos y detectan diferencias de temperatura hasta de unos 0.2 ºC. Una función semejante cumplen las llamadas fosetas labiales. Las Anacondas gracias a las fosetas termo sensitivas pueden perseguir una presa de sangre caliente por la noche o bajo el agua, es decir, cuando hay poca visibilidad (luz). El órgano de Jacobson es el encargado de percibir las partículas de olor que entran bien sea por la boca o por la nariz.

El sentido del gusto va muy ligado al olfato pues requiere también del

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