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La Piladora Del Ejercicio


Enviado por   •  2 de Marzo de 2014  •  1.359 Palabras (6 Páginas)  •  198 Visitas

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“La piladora del ejercicio”

De manera muy osada me permio hacer alusión a las palabras del quien es considerado el padre de la medicina, Hipócrates: “que todas las partes del cuerpo tienen su función y que si se usan con moderación y realizan las funciones a las que están destinadas, llegaran a desarrollarse y envejecerán más tarde, pero si no se usan se desarrollaran defectuosamente envejeciendo rápidamente, enfermando con mayor facilidad”. (De las articulaciones, Hipócrates s IV aC). “La Comida por sí sola no mantendrá al hombre en buen estado de salud: también debe hacer ejercicio. Porque la comida y el ejercicio (…) trabajan juntos para producir”. (Régimen, Hipócrates s IV aC). Hipócrates nos permite observar el hecho del cuidado del nuestro cuerpo por medio de la actividad física, siendo la inactividad física una de las mayores causas en los problemas de salud. Sedentarismo se podría decir que es un sinónimo de inactividad física, y que ha causado miles de muertes, añadiendo un gran porcentaje en la población infantil, sin contar la población adulta que no adopta una rutina diaria de ejercicio que permita el mantenimiento saludable del cuerpo. Durante mucho tiempo el ejercicio ha estado proscrito por la sociedad en general como maldición divina. El que poseía buena salud era quien vivía bien sin esforzarse mucho, al cobijo siempre de las inclemencias del tiempo. Hoy las cosas han cambiado mucho, es decir, han dado un giro total y se considera todo lo contrario. Una justificación de esta paradoja y de la razón de las ventajas de la actividad física la proporciona la medicina moderna, dentro lo que respecta señala las posibilidades incompatibles del organismo con el uso que hoy le damos. En lo que concierne a salud vs ejercicio, nuestro organismo debe gastar energía muscular para conseguir la energía de los alimentos. Como ya lo había mencionado, regresamos nuevamente al sedentarismo, el cual favorece en gran medida a la aparición de la enfermedad. De allí partimos la necesidad de las creaciones de conductas terapéuticas para la corrección de la continuidad de aquello que reduce en gran manera la calidad de vida del individuo, traemos a consideración un término muy conceptualizado sobre el verdadero arte que debemos adquirir para asumir una correcta postura ante la prescripción del Ejercicio Terapéutico, debo dejar claro su concepto de base, haciendo un corto resumen de muchas postulaciones, puedo decir que es la sucesión por la que me permita en rutar mi paciente a una conducta de entrenamiento, que diseño bajo las condiciones personalizada de tipo físico-patológico para mejorar la función musculoesquelética manteniendo un estado de bienestar o en su defecto la corrección de un determinado deterioro, consiguiendo beneficios con los menores riesgos, en la corrección o mejoramiento de calidad de vida ante un diagnóstico previo.

De las muchas postulaciones e investigaciones por los grandes laboratorios en su afán de conseguir mejor respuesta de sus fármacos, se ha topado con el hecho de que el Ejercicio terapéutico está tomando fuerza en el campo terapéutico de muchas enfermedades con una serie de beneficioso a muchas patologías. Es a eso lo que yo llamaría “La Píldora del Ejercicio”. Teniendo en cuenta la información leída a la hora de realizar este ensayo hay una parte muy interesante la cual se cita a continuación: es la de enumerar una serie de Ejemplos que apoyarían la conducta de la prescripción del Ejercicio terapéutico, para ellos tenemos que: el paciente con artritis de rodilla que recibe ejercicio terapéutico durante 3 veces a la semana por 1 hora ha reducido el nivel de dolor y discapacidad funcional en un 47%. Paciente con alto riesgo de padecer diabetes, reduce su riesgo a un 58%. Mujeres en etapas de postmenopausia con 4 horas semanales han reducido en un 41% el riesgo de fractura de Fémur. Paciente con Demencia Senil o Alzheimer reduce su declive en un 50%. La ansiedad se reduce en un 58%, la depresión un 30% de los pacientes ha mejorado con una baja dosis del ejercicio terapéutico y con una alta dosis ha llegado a un 47% y como tratamiento estrella se lo dejamos a la fatiga crónica. Y sin lugar a duda la calidad de vida dependerá de cierto modo a todo lo que anteriormente he mencionado.

Pero ahora como cual medico hace su prescripción médica, así debemos tener en cuenta aspectos como: Cual es la dosis? Cuantos? Con frecuencia? Y que intensidad?. Como sería entonces el mensaje: entre más ejercicio tendremos más beneficios para nuestra salud. La Propuesta para nuestra profesión sería ir un poco más allá de la necesidad de nuestro paciente y motivarlo a plantear su propio estilo de vida y hábitos. Plantearle actividades físicas que no vean en ellas un sacrificio físico, como ejemplo: buscar una compañía para hacer una caminata diaria por lo menos 30 min, tener un perro sería un excelente entrenador y motivador para caminar, bajar del bus una parada antes, subir las escaleras a pie. El objetivo de la Prescripción del Ejercicio Terapéutico sobre mi paciente me debe llevar a mejor la calidad de su salud, por medio de la disminución del riesgos venideros de padecer determinadas enfermedades, y dándole como resultado una mejora de su calidad de vida y el nivel de su condición física.

Debemos considerar como trascendental que por medio de la Prescripción del ejercicio terapéutico el paciente puede conseguir los cambios estables e imprescindibles para sustentar, y mejorar o prever posteriores pérdidas funcionales. El profesional considerará al momento de su prescripción, el deber de decidir qué ejercicio enseñar para intervenir en la alteración, como debe ensenarlos y a que dosis requerida para conseguir una funcionalidad óptima. EL paciente debe cumplir criterios de inclusión y asumiendo una conducta profesional el hecho de acatar evoluciones médicas previas que me garantice que el entrenamiento propuesto y personalizado no descompensará al paciente.La Prescripción del Ejercicio terapéutico tiene un poder enorme y sus limitaciones. Cada uno tenemos nuestras herramientas y limitaciones, de manera coordinada trabajamos, cada uno en su negocio y nuestro pacientes tendrá la mejoría deseada. Pero mientras nuestro paciente se encuentre enfermo la prescripción debería ser controlada y orientada por un especialista sanitario. Ya tenido todo lo anterior cual sería nuestro papel en la prescripción, el fisioterapeuta debe examinar, evaluar e intervenir a nivel de lesión, limitaciones funcionales y la discapacidad. Además debe ser de su concernencia todo sobre los conocimientos y destrezas clínicas necesarias para reducir o eliminar limitaciones funcionales y discapacidades, con el fin de hacer lo más óptima posible la calidad del paciente que requiere de nuestro servicio. Es decir, debe poseer competencia sobre anatomía, fisiología y biomecánica. Pero también son importantes las nociones sobre anatomía patológica y técnicas de intervención que por lo general la formación académica no aborda, siendo su valor significativo si queremos alcanzar resultados más eficaces de esta considerable herramienta terapéutica. Siendo esta una excelente estrategia para luchar contra el sedentarismo. Resumiendo, el efecto que tendría la prescripción del ejercicio terapéutico sobre los problemas de salud, encontraremos fuerte evidencias en el tratamiento de pacientes. Aunque también existen indicaciones limitada o moderada en el nivel de evidencia para algún grupo de patologías habituales en la práctica de la fisioterapia, y teniendo en cuenta que los ejercicios son más efectivos cuando son individualizados. El fisioterapeuta está en una posición favorecida para prescribirlo. Quiero concluir con un anónimo que dice: “Quienes creen no tener tiempo para el ejercicio corporal, tarde o temprano tendrán que hallar tiempo para la enfermedad”. Y unas palabras sencillas de Hipócrates que dijo: “La Mejor medicina para el hombre es caminar”.

Bibliografía

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• OWEN N. Sparling. El Sedentarismo: La Evidencia Emergente de un Nuevo Riesgo para la Salud. 2010.

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• GRANADOS v. María. 2012. El Ejercicio Terapéutico en la Fisioterapia: Individualización y Fundamentos de Prescripción. Lulu (standard copyright license).

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