La característica de los géneros de la literatura

12.1 Género narrativo

Para entender mejor este tema, recuerda la forma de expresión: narración, ya que de ahí se desprende este género. El género narrativo es aquel que relata una historia por medio de un narrador, el cual se inmiscuye en el diálogo o monólogo para dar voz a los personajes; puede hablar en primera o tercera persona.

A este género pertenecen las obras escritas en prosa, generalmente. En su estructura se distinguen cuatro partes fundamentales: presentación de la historia, nudo o conflicto, clímax y desenlace. Estos momentos están presentes prácticamente en todos los textos de este tipo, pero también varía su presencia dependiendo del autor; hay unos que darán mayor énfasis a algunos momentos y hay otros que preferirán ser más reservados.

El narrador

El narrador es otro de los elementos importantes en este género literario. Éste se puede presentar de diversas formas.

Narrador protagonista: donde narra su propia historia.

Narrador en segunda persona: donde le cuenta al protagonista su propia historia. Este narrador es poco común e implica una dificultad mayor.

Narrador en tercera persona: Narra la historia de otra persona. Puede ser:

Testigo: Narra la historia de otro, pero sólo aquello que se puede ver; además tiene que justificar lo que sabe.

Omnisciente: Narra la historia de otro personaje, pero en este caso el narrador lo sabe todo, hasta lo que no se puede ver y que ni el mismo personaje sabe.

Dentro del género narrativo encontramos tres géneros que derivan de él: la novela, el cuento y la fábula.

Subgéneros narrativos

La novela

Típicamente se ha descrito a la novela como una narración en forma de prosa de acciones extensas e imaginarias de los personajes de la historia, pero hoy día podemos afirmar que no necesariamente tienen que ser hechos imaginarios, ya que hay historias basadas en casos reales que también son consideradas novela. Este género ha evolucionado tanto que podemos considerar a la novela un espejo de la realidad.

El origen de la novela se debe a la transformación de la épica decadente en la mayoría de los casos, aunque en otros es la ampliación de un cuento.

En sus inicios fue un género muy conocido en la antigüedad grecolatina; en la Edad Media se divulgaron los cuentos y las fábulas orientales, se cultivó la novela filosófico-religiosa y surgieron los libros de caballerías como consecuencia de la degeneración de los cantares de gesta; en el siglo XVI reluce la novela pastoril y merece un lugar destacado la novela picaresca (exclusivamente española); en el siglo XVII aparece Don Quijote de la Mancha que termina el ciclo de la novela de aventuras y nos sitúa en la novela realista moderna. Este género decae en España durante el siglo XVIII y, aunque el Romanticismo cultiva la novela histórica sólo hasta la segunda mitad del XIX, empieza a advertirse un creciente realismo en la novela europea. La generación del 98 y posteriores dan a la novela un carácter más personal, hasta llegar a la importancia que tiene ahora.

Algunos novelistas hispanoamericanos destacados que han dado a la novelística un nivel y riqueza incomparable son:

Carpentier (cubano)

Goytisolo (español)

Carlos Fuentes (mexicano)

Cortázar (argentino)

Onetti (uruguayo)

Garcia Márquez (colombiano)

Vargas Llosa (peruano)

La novela corta es un género menor como el cuento, pero que tiene todos los elementos esenciales de la novela. Su origen está en el desarrollo y complicación de los cuentos.

También es importante destacar que existen varios tipos de novela que en este curso no abordaremos, pero que vale la pena nombrar:

Picaresca

Psicológica

Epistolar

Histórica

Policiaca

Biográfica

Autobiográfica

De ciencia ficción

De caballería

Existencialista

Antinovela

Novela corta

Cuento

Se cree que éste es el género literario más

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