La finalidad principal de un herbario

Introducción:

La finalidad principal de un herbario es la de servir para estudio de las plantas secas que lo componen, es fundamental que las mismas se hayan preparado y se conserven en el mejor estado posible.

En la escuela como una actividad práctica en la clase de Ciencias, que puede ser tanto personal como grupal. Todo lo que recolectemos nos servirá luego como material de consulta o de estudio, por ello es que debe quedar bien preservado.

Un herbario es una colección de plantas o partes de plantas, desecadas, preservadas, identificadas y acompañadas de información. Representa a la flora, o patrimonio vegetal, de una localidad, región.

Los herbarios son una fuente de información acerca de las plantas y del medio en el que habitan y suponen en sí mismos un registro permanente de la biodiversidad.

Los objetivos del herbario son almacenar materiales de referencia. Para ello se requiere la preservación de los ejemplares y un tipo de ordenamiento que facilite su ubicación.

La información genética de cada especie determina, junto con las condiciones del ambiente, la estructura anatómica de la hoja. De manera que las hojas en general desarrollan mayor o menor proporción de ciertos tejidos, en relación al tipo de ambiente en que viven. Las principales adaptaciones observadas están relacionadas a factores que afectan en conjunto, como la disponibilidad de agua, la temperatura y la luz.

Materiales:

50 hojas de plantas (extraídas de la localidad) previamente deshidratadas.

2 cartones duros de 18 x 20 cm. (aproximadamente) que serán utilizadas como tapas del libro.

50 hojas de cartón fino en las que sujetaremos los ejemplares ya secos.

50 hojas de papel tipo manteca 18 x 20 cm. para separar un cartón del otro y que no se dañen las hojas.

1 ovillo de hilo para amarrar las hojas de cartón fino, papeles tipo manteca y las tapas duras de cartón.

50 etiquetas adhesivas, para colocar el nombre del tipo de hoja según su borde.

1 tijera

1 libreta o cuaderno para tomar apuntes;

1 lápiz para hacer anotaciones.

Metodología.

En primera instancia se Procederá al secado de forma natural de las hojas recolectadas, recordando que la humedad puede dañar todo el trabajo. Colocaremos las hojas, bien extendidas, entre varias hojas de papel absorbente que cambiaremos cada dos o tres días hasta que el secado se haya realizado satisfactoriamente. Mientras se realiza ese proceso podemos también añadirle el de prensado, ubicando las hojas que contienen el material entre dos grandes libros. (Esta actividad se realizara con antelación al armado de los herbarios)

Para el armado definitivo del herbario necesitaremos hojas de cartón fino en las que sujetaremos los ejemplares ya secos, podemos intercalar el papel tipo manteca entre los cartones con los ejemplares, a fin de que sea más duradera.

Los ejemplares secos sujetos a los cartones finos con el papel manteca intercalado serán amarrados por un cordel, con un cartón duro al principio y otro final (como tapas); formando así un libro.

Posteriormente se procederá a la clasificación de las hojas según su forma, para ello se utilizará un esquema con los distintos tipos de hojas, entregado por el docente,

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