Las analogias en ciencias

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Las analogías son una estrategia muy útil para utilizar en la didáctica de las ciencias ya que nos permiten comprender nuevos contenidos a partir de los que ya se conocen con anterioridad.

El concepto de analogía hace referencia a una comparación entre dos conceptos, uno nuevo y otro que ya es familiar. Al elemento conocido se le llama también “fuente” o análogo y al menos conocido o nuevo se la llama “concepto, “target” o “blanco”.

Utilizando las analogías el profesor puede establecer una relación entre los elementos y esto permite que los alumnos adquieran el nuevo contenido realizando comparaciones y identificando las características comunes de la fuente y el concepto.

Según el modelo de “enseñanza con analogías” (Teaching-with-Analogies Model) (Glynn, 1991; Glynn y Takahashi, 1998), existen diferentes fases o paso que permiten llegar a un correcto aprendizaje del nuevo concepto. Estas fases son las siguientes:

1. Presentación del nuevo concepto que se va a trabajar: El profesor introduce el nuevo contenido o concepto a los alumnos. Según Sunal (2004) hay tres posibles alternativas en esta fase. La introducción de la analogía puede darse antes del concepto, a la vez o después de este.
2. Presentación del referente que servirá de analogía: El profesor se asegura que el referente es conocido por los alumnos y puede será útil para establecer la relación. En este paso se debe cuidar el vocabulario y tener en cuenta que los alumnos pueden no visualizar la analogía de la misma forma a como lo hace el docente. Frigo Ferraz y Terrazzan (2003), destacan la importancia de incorporar una etapa de reflexión entre la presentación del referente y del concepto.
3. Identificación de las características de los dos elementos: Se explica la analogía y se profundiza en cada elemento. 
4. Identificación de las semejanzas entre los dos elementos: Se buscan las características similares y el paralelismo entre ambos. Estos dos pasos (3 y 4) pueden trabajarse a la vez.
5. Identificación de la no correspondencia entre elementos: Se desarrollan y reconocen las características de no correspondencia y se corrigen las conclusiones incorrectas de los alumnos.
6. Conclusiones: Se elaboran las características del nuevo concepto. 

Zeitoun (1984) también propone diferentes fases para trabajar con analogías, en este caso se establecen 9 pasos. Se cual sea la estrategia utilizada es imprescindible que esta conste de tres fases básicas: presentación de la información relevante, utilización de una analogía y realización de un resumen conceptual.

Frigo Ferraz y Terrazzan (2001) establecen 9 tipos de analogías:

1. Analogías simples.
2. Analogías simples referidas a funciones.
3. Analogías simples referidas a la forma.
4. Analogías simples referidas a la función y forma.
5. Analogías simples referidas a los límites del análogo
6. Realización de un mapeado explícito de algún atributo del blanco a su análogo.
7. Explicación de dos o tres conceptos complementarios mediante dos o tres analogías, cada una correspondiente a un concepto.
8. Representación del concepto blanco mediante la utilización de varios análogos para el mismo.
9. Explicación de varios atributos del blanco y elaboración de las correspondencias con el análogo.

Según Oliva y cols. (2001), todos los modelos mentales elaborados por los alumnos a partir de los modelos científicos empleados en la enseñanza, tienen un componente analógico. Por ese motivo, es necesario potenciar en los alumnos las realizaciones de sus propias analogías para así contribuir a que establezcan relaciones entre contendido nuevos y facilitar que su aprendizaje sea significativo.

Felipe, A., Gallarreta, S. y Merino, G. (2006). Aportes para la utilización de analogías en la enseñanza de las ciencias. Ejemplos en biología del desarrollo. Revista Iberoamericana de Educación, 37(6).

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