Los Enfoques Generales De La Geografia Politica

Los enfoques actuales de la geografía política:

Heriberto Cairo Carou

La geografía política tiene una considerable importancia y de ella se desprenden distintos enfoques con influencia de la ciencia política y de la geografía. A partir de los años setenta se ha ido renovando la disciplina y en la actualidad existen diversos enfoques, de los cuales se pueden destacar: al análisis de la política territorial, las geografías de los bienes públicos y de la elección racional, las geografías políticas marxistas y neo marxistas, la geografía política humanista, la geografía del poder y las teorías geográfico-políticas postmodernas o postestructuralistas.

El análisis de la política territorial se entiende, de acuerdo a las palabras de Bulpitt, cómo: “El ámbito de la actividad política que se ocupa de las relaciones entre las instituciones políticas centrales en la capital y aquellos grupos de interés, comunidades, organizaciones políticas y cuerpos gubernamentales que están fuera del complejo institucional central, aunque dentro de los limites reconocidos del Estado, y que tienen, o es ampliamente percibido que tienen, un carácter significadamente geográfico o local/regional” (Bulpitt 1983: 52).

Dentro del estudio del análisis de la política territorial se aprecian los siguientes enfoques: el de sistemas territoriales, el de las relaciones centro-periferia y el del regionalismo político.

A) Los sistemas territoriales: en el interior de los Estados se distinguen varios sistemas territoriales: confederaciones, federaciones y sistemas unitarios. Duchacek (1986: 80 y SS.) sugiere que cada uno está asociado en su nacimiento a un conjunto distintivo de valores y, por lo tanto conlleva un diseño constitucional, un proceso político y una cultura política distintivos.

B) Las relaciones centro periferia: el enfoque de Rokkan y Urwin (1982, 1983) se basa en un modelo centro periferia de construcción del Estado. Tres conjuntos de procesos (militar-administrativos, económicos y culturales) que permiten a los centros dominar a las periferias de una o varias formas, pero teniendo en cuenta que cada conjunto influye sobre los demás, no son independientes unas relaciones de otras. Se ancla en el modelo de la economía neoclásica: los centros surgen porque tienen condiciones naturales más ventajosas, que son magnificadas por la división espacial del trabajo. La competencia por los recursos económicos y políticos asegura la regeneración del sistema y, el intercambio entre centro y periferia es mutuamente ventajoso para ambas aéreas.

C) Regionalismo político: se destacan las teorías estructuralistas de Hetcher (1975) sobre el “colonialismo interno” y de Nairn (1975, 1977) sobre el origen del nacionalismo periférico en el desarrollo desigual de las regiones.

La geografía de los bienes públicos se basa en la definición de Laswell (1936), como el estudio de “quien en la sociedad obtiene qué, cuándo y cómo “. La división espacial del trabajo, los gobiernos y los diferentes medios, son las determinantes de la geografía del bienestar. Se basa en la Economía Política neo positivista. Según Buchanan (1975), el gobierno realiza dos funciones: tiene un rol protector del intercambio individual y voluntario en un mercado privado y, tiene un rol productor de bienes y servicios que en el mercado privado no se logran producir pero que los individuos consideran necesarios para su bienestar social. El Estado es el encargado de los bienes públicos y de la existencia de los bienes públicos “impuros”, se ocupa la geografía de los bienes públicos.

En las geografías políticas marxistas y neo marxistas se tiene que destacar el enfoque que se basa en la economía política marxista y el del análisis de sistemas mundiales.

Economía política marxista: se critica a la Economía política moderna, porque no se limita a preguntar “quién consigue qué y dónde en la sociedad”, sino que también pregunta “cómo y por qué”. Clark y Dear (1978, 1984) destacan las siguientes funciones del Estado capitalista para mantener el orden social: primero, como suministrador de bienes públicos, regulador y facilitador de la actuación del mercado e ingeniero social; segundo, las tres funciones anteriores se subsumen en el rol del Estado como “árbitro” entre grupos o clases sociales en conflicto y, por último, como “agente” en la sociedad y la economía de una clase cuyo interés sea mantener el sistema capitalista.

La Geografía Política no debe examinar sólo el Estado en el sistema internacional, sino también el sistema internacional en el Estado.

El aparato del Estado local es objeto de estudio importante. La “geopolítica del capitalismo” también es objeto de estudio. Harvey expresa que se estudian “las consecuencias geopolíticas de vivir bajo un modo de producción capitalista” (1985: 128). Las estructuras geográfico-políticas profundizan sus orígenes en la forma y condiciones en las que se realiza la producción de bienes –en el caso del capitalismo, mercancías-, que es históricamente variable.

El análisis de sistemas mundiales: Peter J. Taylor lo define como: “un enfoque materialista del estudio del cambio social desarrollado por Immanuel Wallerstein. Este enfoque se elabora a partir de tres tradiciones de investigación: el estudio de la dependencia, la escuela de los Annales y la teoría y práctica marxista” (Taylor 1986: 527).

Taylor elabora una perspectiva geográfico-política, en la cual se considera al mundo, un sistema espacial de centros, periferia y semiperiferias, que se interrelacionan entre si y que cambian al ritmo de los ciclos de auge y crisis a los que se somete la economía capitalista. Se destacan tres escalas de análisis: la economía-mundo (ámbito de la realidad); la localidad (ámbito de la experiencia), y el Estado- nación (ámbito de la ideología). La decisiva es la de la economía-mundo.

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