Marketing en niños

García Barrera María Monserrat

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CONTROL DE LECTURA: “Los niños, blanco de la publicidad televisiva”

Hoy en día  es de notarse que el objetivo de las grandes marcas, las agencias de publicidad, las cadenas de televisión y los productores es transformar a los niños en futuros consumidores potenciales, usando como medios los canales infantiles como Cartoon Network, Disney Channel y Nickelodeon.

En Suiza y Francia, los niños pasan aproximadamente dos horas y media diarias frente al televisor según una encuesta de Journal de Genéve mientras que en EUA pasan aproximadamente unas 5 o 6 horas diarias, de esta manera terminan viendo una cantidad de 30000 anuncios al año y es relevante mencionar que también toman parte en gran escala  en la decisión de los padres al momento de consumir.

Se dice que un niño siendo menor de 8 años no es capaz de diferenciar o sobre analizar la manipulación de un spot publicitario, por lo cual las marcas no le son de importancia, para ellos lo que es llamativo son los colores, o incluso se han de usar animales como mascotas para llamar su atención, como el caso específico del cereal de “Zucaritas”, que lleva en su portada a un tigre y en sus comerciales el tigre se encuentra haciendo deporte o jugando y proyecta que consumiendo este cereal será un campeón y que el cereal lo va a “nutrir” para realizar sus actividades, este tipo de spots no acentúa el producto como tal cabe resaltar que solo te menciona lo que logras consumiendo ese producto, “el niño es cada vez más prescriptor más y más autónomo en su elección y expresa gustos cada vez temprano” observa Claude-Yves Robín, director general de la cadena francesa Canal J.

Se debe entender que la publicidad dirigida a estos menores es bastante engañosa y es entonces cuando el niño toma gusto por algún alimento en específico- sin identificar si es nutritivo o no- comienza a exigir la compra del mismo y es verdaderamente alarmante como los padres de familia para evitar conflictos prefieren acceder a los deseos de sus pequeños.

Los profesionales de la publicidad argumentan que la audiencia  de un niño equivale tres veces menos que la de un adulto y que la nueva generaciones más difícil de conquistar y conservar, estando de acuerdo en que  “son los padres y los maestros que tienen que enseñar a los niños las realidades del mundo comercial del mismo modo que les enseñan a mirar a ambos lados de la calle” explica el seminario Británico The Economist.

A contrario del argumento anterior se ha visto que en las últimas décadas los anuncios de alimentos y bebidas para niños son más sofisticados y con alto grado de creatividad para seducir a los pequeños consumidores hasta llegar al bolsillo de sus papas.

Pascaline Dumont, “Los niños, blanco de la publicidad televisiva” , Revista: El correo de la UNESCO – Septiembre 2001, p.44, ISSN 0304-310X

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