Origen del Maiz

Resumen: Maíz, origen

Las plantas más importantes en la historia de la agricultura son el trigo y el maíz, estos han acompañado al hombre por miles de años y, más allá de ser una planta, ha sido el fundamento de múltiples culturas, siendo motivo de diversas investigaciones de interés para la ciencia. El maíz tiene un gran trayecto evolutivo, desde el origen, que es el evento el cual dio lugar al surgimiento del maíz a partir de una especie ancestral hasta la domesticación, proceso de transición genética donde la intervención del hombre ha sido fundamental para la selección y preferencia de rasgos característicos de la planta.

El proceso para encontrar el origen del maíz fue complejo, al ser una planta tan adaptable y que se encuentra en muchas partes del mundo lo primero que se debía hacer era ubicar a las especies mas antiguas, lo que llevo a investigadores al continente americano, pero incluso allí no se encontraba al ancestro, incluso se pensó que se había extinto. No fue hasta que el genetista George Beadle, durante la investigación de una planta llamada teosinte observo que los cromosomas de este eran muy similares al del maíz. También se percato que al hacer una hibridación entre estas se producía una descendencia fértil, lo que llevó a la conclusión de que estas plantas estaban altamente relacionadas y que la probabilidad de que el teosinte fuera el ancestro del maíz era elevada. Con esta teoría se estimó que el origen era de hace 9,000 años.

En un principio esta teoría no era aceptada por la gran diferencia morfológica entre estos; Una de las principales y más notables diferencias es la inflorescencia, en el caso del teosinte el filamento es muy delgado, lo que conlleva que no soporte tanto el peso de las semillas, en relación con las semillas cabe destacar que estas se encuentran completamente encapsuladas, siendo muy rígidas. Otra diferencia notable e importante es el corte, el teosinte es un pasto muy ramificado, tiene tallos secundarios (cosa que no es común en el caso del maíz).

La investigación del genetista Beadle no quedó solo en una investigación, después de años de esta, Beadle decidió realizar un experimento de gran escala para demostrar que si tenían una relación y además encontrar la cantidad de genes involucrados. A partir de esto se podría conocer aproximadamente cuando fue la domesticación de la planta, entre mayor sean la cantidad de genes mayor será el tiempo durante el que evolucionó.

Como se mencionó en un principio la cultura ha sido parte fundamental de la evolución de la planta, por lo que estudiar los lugares para poder encontrar el lugar de origen también fue un proceso arduo. Con la ayuda de geólogos pudieron llegar a zonas cercanas al rio Balsas en México, donde se encontró restos de teosinte, pero estos eran muy pequeños para poder ser estudiados; Sin embargo, también se encontraron restos de “fogatas”, con estos si era posible determinar la antigüedad de los restos de teosinte y existía casi una coincidencia con lo que se había estudiado genéticamente. La antigüedad encontrada fue de 8,700 a. C.

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