PLANEACION DE RIEGOS Y DRENAJES

Para obtener un mayor rendimiento y un mejor aprovechamiento de nuestros cultivos, debemos previamente establecer una planeación y programación de los tipos de riego que vamos a implementar, igualmente lo mismo en cuanto al drenaje de el cultivo, todo esto nos ayudara a evitar perdidas por pudriciones causadas por un encharcamiento del terreno, como también la acumulación de sales, o marchitamientos por falta de agua por lo tanto una baja rentabilidad y mala utilización de nuestras tierras convirtiendo así en un cultivo poco sostenible.

Para llevar a cabo esto tenemos que hacer un previo análisis de cual es la capacidad de agua con que contamos ya sea de reservorio o extraída de una fuente natural (superficial o subterránea) y saber con exactitud por medio de cálculos cual es la cantidad de agua requerida en nuestro cultivo, esto precisa saber cual es la capacidad de campo, y el uso consultivo de nuestro cultivo, entre otros aspectos y también conocer como se comporta el agua dentro del terreno, absorción, infiltración, retención, erosión, escorrentía, etc. pues esto puede variar dependiendo la textura y estructura del mismo.

Aparte de esto hay unos periodos críticos de consumo hídrico por parte de nuestro cultivo que tenemos que tener muy claros e identificados para proporcionar los requerimientos óptimos de agua en esta etapa del cultivo, de los contrario podría establecerse un déficit hídrico por parte de nuestra planta en el periodo en que se ven recompensados los esfuerzos y trabajos, lo que traería consigo baja producción y un bajo rendimiento y ganancias obtenidas por el mismo.

Una vez tengamos ubicada la fuente de extracción del agua ya sea (superficial, o subterránea) debemos diseñar el sistema que sea mas optimo y adecuado para la extracción del agua, ej cuanta agua necesitamos pues dependiendo de esto será la escogencia de la bomba, si podemos aprovechar la pendiente natural del terreno entonces la extracción de agua la haríamos por gravedad, o si tenemos que elevar el agua a una altura mayor del sitio de captación de la fuente y así se debe hacer un análisis de todo para tomar una mejor decisión a la hora de adquirir el sistema de extracción.

Una vez solucionado este problema el paso a seguir es estudiar cual es el sistema de riego que se ajusta mas al terreno, a las necesidades del cultivo y a la capacidad financiera del agricultor dependiendo las ganancias que se esperan obtener con un optimo desempeño de su cultivo, de lo contrario ej no valdría la pena instalar un sistema de riego por goteo si el cultivo al cual se le implementara no da mas suficientes ganancias y los márgenes de comercialización del su producto son muy bajos, entonces este sistema de riego seria muy sofisticado y costoso para tan bajos ingresos del cultivo.

También hay que hacer énfasis en como será nuestro sistema de drenaje para evitar exceso o acumulación de agua o sales, obteniendo esta información podremos prever mejores resultados en cuanto rendimiento por hectárea.

Los excedentes de agua pueden solucionarse por medio de zanjas de recolección o de drenaje abiertas, por tubo y por bombeo, todo esto se hace para captar y conducir esta agua sobrante, y evitar encharcamientos que dificulten labores culturales y se desarrollen bacterias entre otras plagas perjudiciales para el cultivo, otros aspectos importantes a los cuales un buen sistema de riego nos sirve mucho es que se evita la erosión debido a que hay una mejor circulación de agua dentro del terreno, se aumenta la profundidad radical efectiva de las raíces, facilita la optima aireación del suelo y esto permite que la micro fauna benéfica que habita en estos espacios prospere, también lava las sales de exceso, asegura una temperatura mas alta en el suelo, se aumenta la duración del ciclo vegetativo del cultivo.

Todo lo anterior teniendo en cuenta que siempre que sea posible hay que mantener la capa freática a una altura tal, que no se presente ausencia de agua como resultado de la operación de drenaje.

Los suelos para mantener su fertilidad y adecuada producción de cultivos en las áreas regables, requieren la presencia del nivel freático a profundidades iguales o mayores de 1.80 m

Aunque todas las planeaciones y proyecciones previas dependen de los rendimientos que ofrecerá el cultivo de lo contrario no se justificarían algunos costos pues seria un cultivo poco rentable y sostenible.

Al mismo tiempo al recurrir a estos planeamientos se facilita la conservación en el uso de las tierras y el agua de riego de esta forma aseguramos un alto rendimiento a un costo razonable y conservamos los recursos bases para toda plantación.

En cuanto al suelo y el diseño e implantación de sistemas de riegos es preciso hacer énfasis en temas como:

Clase o clases de terrenos que tiene la finca según la textura y estructura.

Topografía o relieve de la finca; o sea, si es plana, ondulada o quebrada.

Capacidad de retención de agua aprovechable, o sea el volumen de agua que puede almacenar, en función de sus características físicas y de la profundidad radical efectiva del cultivo.

Esto es un aspecto que se debe tener muy claro y saber identificar pues

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