Pensamiento Simbolico

Desarrollo del pensamiento simbólico

Autora: Judy S. Loache

“Los niños confunden los objetos reales y el símbolo que los representa. Este y otros errores revelan las dificultades que posee el aprendizaje de la simbolización”

• En un ensayo realizado en niños de 2 años y medio y 3 años, donde se buscó conocer la memoria, se construyó una maqueta a escala de una sala de laboratorio real, donde se le mostraba primero a los niños de 3 años, un perrito pequeño de juguete llamado Snoopy, que se ubicaba en un lugar de la maqueta y se animaba a los niños a buscarlo en la sala real donde se había puesto el mismo perro pero de tamaño grande, inmediatamente utilizaban su recuerdo y salían a buscarlo dentro de la sala e inmediatamente lo encontraban, en cambio al realizar la prueba a niños de 2 años, salían corriendo pero sin buscar en el lugar correcto, no realizaban la relación sala-maqueta, este estudio pensado inicialmente para conocer la memoria, era realmente un estudio para conocer la comprensión simbólica.

“El pensamiento simbólico desarrolla una función esencial en casi todo lo que hacemos”

Los dibujos son los primeros objetos simbólicos que se aprenden a manejar, para comprenderlos se debe realizar un doble trabajo cognitivo, “representar mentalmente el objeto en sí y la relación entre el objeto y lo que simboliza”.

El pensamiento simbólico desarrolla una función esencial en casi todo lo que hacemos. Quizás no exista un aspecto del ser humano más importante que aprender a interpretar símbolos.

• En otro estudio realizado por un conjunto de expertos, se decidió estudiar las conductas, partieron por investigar la comprensión que tenían los niños de las representaciones gráficas.

Frente a niños de 9 meses se puso un libro con fotos en color, de objetos individuales, la mayoría de los niños extendían la mano para tocar, acariciar o intentar tomar los objetos fotografiados intentando sacarlos del papel.

Esta prueba se realizó también en la aldea Beng en Costa de Marfil, donde los bebés estaban sentados en la tierra o en las piernas de sus madres, en un ambiente totalmente distinto, nunca habían visto una fotografía, estaban rodeados por naturaleza, pero a pesar de las diferencias ambientales hicieron exactamente lo mismo, esta confusión al parecer es conceptual, no perceptual, ya que los niños al tener enfrente el objeto, fotografía o dibujo, inmediatamente tomaban el objeto, pero al ver solo la fotografía o solo el dibujo necesitaban explorar para saber si estaba o no realmente el objeto.

Ejemplos:

1. Al mostrarles una botella en fotografía de tamaño real los niños acercaban su boca a la botella.

2. Al sentar a niños de 9 meses frente a la televisión, alargaban sus brazos y trataban de alcanzar los objetos que se movían en la pantalla.

• Entre los 18 y 24 meses los niños ya saben diferenciar entre un objeto y una imagen y realizan el pensamiento simbólico.

• Uno de los factores que contribuyen al abandono de la exploración manual de dibujos y fotografías, es el desarrollo de un control inhibitorio, ya que a lo largo del transcurso de los primeros años, los niños van adquiriendo la capacidad de refrenar los impulsos que se producen en el cortex cerebral.

• Aprenden a contemplar, aunque es un proceso largo y que no todos los niños realizan al mismo tiempo, con 4 años pueden cometer errores aún.

• No solo las fotografías los confunden, también puede ser con objetos en miniatura que representen algo que conocen y quieren darle el mismo uso, como por ejemplo; sentarse en una silla de maqueta acostarse en la cama de la muñeca o meterse al auto de juguete.

Errores de Gulliver

• Tienen que ver con la no diferenciación del tamaño de los objetos, por ejemplo: niños entre 1 año y medio y 2 años y medio fueron llevados a una sala donde había una silla, un auto y un tobogán, donde podían subirse y jugar, luego de unos minutos fueron sacados y cambiaron los objetos por unos mucho más pequeños, la mayoría de los niños al volver a la sala siguieron jugando con las miniaturas de juguetes, aunque se cayeron o no entraban en los juguetes seguían intentándolo.

• Los especialistas

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