Prueba De ENI BELE
BREMOME30 de Mayo de 2015
2.586 Palabras (11 Páginas)446 Visitas
INTRODUCCIÓN
1.1 EL DESARROLLO NORMAL DEL LENGUAJE (ADQUISICIÓN, COMPRENSIÓN Y EXPRESIÓN)
El desarrollo humano se caracteriza por ser especialmente social y cultural. Desde el nacimiento vivimos rodeados por los demás e incluso nuestra naturaleza biológica está adaptada al entorno social. El desarrollo psicológico es también fruto del desarrollo social, pues, en el grupo, los individuos aprenderán hábitos, formas de expresión y compresión del lenguaje.
Al adulto le corresponde transmitir al niño la herencia sociocultural sin la cual ese desarrollo psíquico no sería posible. Por ello, la relación adulto-niño tiene una especial importancia.
A continuación haremos mención de algunos teóricos que hacen aportaciones destacadas en el tema de la adquisición del lenguaje que será fundamental para la comprensión y la expresión del mismo.
Chomsky afirma que la capacidad para hablar de los humanos está genéticamente determinada. Es decir, cree que existen unos universales lingüísticos que forman parte del código genético. Sus aportaciones se ciñen al aspecto sintáctico de la lengua. (Blanco, 2008)
Lev Vygotsky declara que el desarrollo de los conceptos, o el del significado de las palabras presupone a su vez la evolución de muchas funciones intelectuales: la atención deliberada, la memoria lógica, la abstracción, la habilidad para comparar y diferenciar. Estos procesos psicológicos complejos no pueden ser denominados a través del aprendizaje aislado (Vygotsky, 1995, pág. 119)
El niño adquiere determinados hábitos y destrezas en un área dada antes de aprender a aplicarlos consciente y deliberadamente. No existe nunca un paralelismo total entre el curso de la instrucción y el del desarrollo de las funciones correspondientes (Vygotsky, 1995, pág. 139)
En otras palabras, simplemente para llegar al Sistemas Semántico, ya debió de haberse desarrollado muchas funciones intelectuales. Además de que gracias a la instrucción, puede aplicar habilidades aprendidas de manera consciente. Esto se hace evidente en la aplicación de BELE cuando al sujeto se le pide que deduzca la palabra que se le pide a partir del contexto. Gracias a el desarrollo propio de la atención, la abstracción, sumado además a la capacidad de discriminar las palabras buscadas a partir del criterio del evaluador (lo que sería una instrucción), como el no decir artículos o hacer que el sujeto diga una palabra en específico; el individuo que realiza la prueba hace uso de un amplia gama de habilidades cognitivas.
Jean Piaget, defiende que lo que diferencia a los animales y a los hombres no es la capacidad lingüística sino la cognitiva. Junto a estos planteamientos, se abrieron paso otros puntos de vista. Hacia los años setenta aparece una corriente que pone el énfasis en los aspectos comunicativos del lenguaje. Desde este punto de vista, aprender a hablar no implica sólo conocer las reglas fonológicas, semánticas y sintácticas, sino también saber cómo utilizarlas en un contexto determinado. (urjcvicalvaro, 2008)
La adquisición del lenguaje implica un adecuado funcionamiento de los mecanismos neurofisiológicos, psíquicos y socioculturales interrelacionados.
A nivel neurofisiológico se necesita una maduración del sistema nervioso central, del aparato fonatorio, y contracciones musculares implicadas en la producción de sonidos. A nivel psíquico, es necesario la aparición de la función simbólica (estructura cognitiva). Solamente es posible el lenguaje cuando existe una estructura simbólica de naturaleza anterior. Aparición de la función semiótica (simbólica).
Es la evocación representativa de objetos o acontecimientos no percibidos actualmente (urjcvicalvaro, 2008). Es decir el niño tiene una capacidad de representación (imágenes mentales de la realidad) y de simbolización (manejo de objetos y situaciones no presentes a través de su representación simbólica: palabras, signos, números)
Alexander Luria, para este autor, en un principio, el habla que regula la conducta es el habla del adulto. En torno a los 3 años, la regulación se hace autónoma, pero es necesario que el habla autodirigida sea audible. Hacia los 4 años y medio pierde el sentido el carácter audible de las verbalizaciones y, por tanto, se interiorizan. Así pues, el habla jugará un papel primordial en la construcción del psiquismo, porque la mediación verbal de las acciones modifica cualitativamente cualquier función cognitiva. (Vazquez, 2006)
Con respecto al desarrollo del lenguaje desde el punto de vista evolutivo, nos vamos a centrar en uno de los aspectos funcionales no abordados, el comunicativo.
Generalmente se distinguen dos grandes periodos en el desarrollo del lenguaje; un primer momento denominado prelingüístico, que se enmarca sobre el primer año de vida, desarrollándose los precursores y componentes del lenguaje, y otro que se sitúa en algún momento entre el año y año y medio, y que comienza con la emisión de las primeras palabras.
En conclusión, podemos decir que para la hipótesis cognitiva, las estructuras y procesos cognitivos son previos y determinantes de la aparición y desarrollo del lenguaje.
Ahora haremos mención de la zona de desarrollo próxima que propone Lev Vigotsky que es: ”la distancia en el nivel real de desarrollo, determinado de la capacidad de resolver independientemente un problema, y el nivel de desarrollo potencial, determinado a través de la resolución de un problema bajo la guía de un adulto o en colaboración con otro compañero más capaz” (Vygotsky, 1995, pág. 133)
Podemos ver en la aplicación de ambas pruebas como es necesaria e indispensable la intervención de un instructor para percatar el desarrollo potencial del niño y la intervención del instructor en el momento en que el niño ya no es capaz de desarrollar ciertas tareas en este caso en particular la comprensión y la expresión del lenguaje.
Después de a ver abordado las teorías de los principales exponentes de la adquisición, compresión y expresión del lenguaje, ahora mencionaremos el esquema de Mesulam:
Fig. 1 Modelo Mesulam (Portellano, 2005)
Mesulam (1985) propone un modelo de atención constituido por cuatro componentes, sistema reticular, relacionado con el mantenimiento del nivel de alerta y vigilancia, sistema límbico y giro cingulado, responsables de los aspectos motivacionales de los procesos atencionales, sistema frontal, responsable de coordinar los programas motores, sistema parietal encargado de realizar la representación o mapa sensorial interno. (Portellano, 2005, pág. 147)
Además de que gracias a la instrucción, puede aplicar habilidades aprendidas de manera consciente. Esto se hace evidente en BELE cuando al sujeto se le pide que deduzca la palabra que se le pide a partir del contexto. Gracias a el desarrollo propio de la atención, la abstracción, sumado además a la capacidad de discriminar las palabras buscadas a partir del criterio del evaluador (lo que sería una instrucción), como el no decir artículos o hacer que el sujeto diga una palabra en específico; el individuo que realiza la prueba hace uso de un amplia gama de habilidades cognitivas.
Ya que hablamos de atención en el anterior apartado, no podemos sino referirnos al modelo de Mesulam (Fig. 1), ya que nos ayuda a comprender todos los pasos y ubicaciones (neuroanatómicas) que el sujeto debió de utilizar para lograr tener una concentración y una atención adecuadas para la resolución de la batería.
Como podemos ver, el objetivo que pareciera simplista a primera vista de BELE (calificación de fonémas), realmente implica muchos procesos cognitivos y sociales (instrucción) que tienen individualmente y en conjunto una complejidad que convierten a BELE en una eficaz herramienta de evaluación humana.
Para comprender todas las implicaciones de la Batería de Evaluación de la lengua Española (BELE), debe de quedar claro ciertos conceptos y modelos. En primer lugar, ya que BELE califica fonemas, debemos de tener en cuenta el modelo de Ellis y Young (Fig. 2). Debido que el participante debe de deducir la palabra que se le pide, además de pronunciar correctamente el fonema buscado, se debe de hacer comprensión semántica. Es decir, del modelo de Ellis y Young, podemos decir que BELE interactúa con el Sistema Semántico, el Output Léxico del habla, y con el Nivel Fonético (el cuál es el que califica).
Fig. 2 Modelo Ellis y Young (Parkin, 1999)
Mapa Modular de Ellis y Young (1999), a saber: Análisis Auditivo, Léxico de Entradas Auditivas, Sistema Semántico, Léxico de Salidas Fonológicas y Conversión Acústico Fonológica. (Parkin, 1999)
Fig. 3 Estructuras. Neuropsicológicas del Lenguaje (Ortega Miranda, 2014)
Mapa de las áreas funcionales especificas en la corteza cerebral, que muestra sobre todo las áreas de Wernicke y de Broca para comprensión del lenguaje y la producción del lenguaje, situadas en el hemisferio izquierdo en el 95% de las personas. (Ortega Miranda, 2014)
1.2 PLANEAMIENTO DEL PROBLEMA
1.2.1 ENI
Se identificará y reconocerá a través de ejemplos prácticos, la estructura fonológica, semántica, estructura sintáctica, habilidades metalingüísticas y las áreas principales de valoración en el lenguaje (Producción, comprensión y repetición) en el infante de 6 años de edad.
1.2.2
...