Reino Protista

Reino protista

Eucariotas unicelulares: El reino Protista está constituido por los organismos eucarióticos unicelulares, con excepción de unos pocos que representan una estructura multicelular bastante simple. El hecho de ser unicelulares no significa que sean seres simples y sencillos; en realidad, la célula que los constituye es, es quizás, una de las más complejas, con una variedad de estructuras altamente especializadas. Cada célula es un organismo capaz de satisfacer todos sus requerimientos para vivir, lo mismo cualquier organismo multicelular, como las plantas y los animales.

Este reino agrupa tantos a organismos heterotróficos (algunos parásitos) como autotróficos, y, además, a un grupo muy versátil que se comporta como heterótrofo o autótrofo según la circunstancia.

Después que aparecieron los primeros procariotas, el segundo evento evolutivo más importante fue el de los eucariotas.

Los registros fósiles indican que los primitivos protistas evolucionaron hace por lo menos 1.500 millones de años.

Los organismos eucariotas se distinguen de los procariotas por lo siguiente: La célula tiene un mayor tamaño; presentan una membrana nuclear que envuelve el núcleo y lo separa del citoplasma; el material genético (ADN) está organizado en varios cromosomas; presentan complejos y variados organelos, especialmente cloroplastos y mitocondrias.

¿Cómo fue el proceso evolutivo que dio origen a la aparición de los eucariotas primitivos?

Las diferentes explicaciones que se han dado son motivos de fuertes polémicas. Sin embargo, la hipótesis que tiene mayor aceptación, como se ha señalado, es la simbiótica. Esta hipótesis plantea que las células más grandes y complejas se formaron porque algunos procariotas se alojaron dentro de otras células.

Muchas evidencias apoyan la hipótesis de que las mitocondrias descienden de bacterias especializadas: 1) Las mitocondrias contienen su propio ADN, que es una molécula ininterrumpida de aspecto «circular», lo mismo que el ADN bacterial; 2) tanto las mitocondrias como las bacterias presentan las mismas enzimas en las membranas celulares; 3) los ribosomas de las mitocondrias se parecen en tamaño y composición química; y 4) las mitocondrias solo se reducen a partir de otras mitocondrias, por división, dentro de la célula huésped.

Es probable que las mitocondrias provengan de un tronco de bacterias purpureas no sulfurosas que perdieron la capacidad de fotosíntesis.

De manera similar se explica el origen de los cloroplastos en los organismos eucarioticos fotosintéticos: Los procariotas fotosintéticos fueron ingeridos por células no fotosintéticas más grandes y se convirtieron en cloroplastos.

Los cloroplastos, al igual que las mitocondrias, contienen su propia ADN y se replican por división. Esta simbiosis debió ocurrir independiente en varios troncos filogenéticos, originando los diversos grupos de eucariotas fotosintéticos que conocemos actualmente.

Los organismos que constituyen el reino Protista reciben este nombre porque en antiguos sistemas de clasificación eran considerados «primeros animales» y agrupados en el reino animal.

Clasificación de los protistas:

La clasificación de los eucariotas unicelulares o protistas está siendo objeto de una importante reconsideración. Esto se debe a la gran cantidad de información que se está obteniendo sobre estos organismos a través del microscopio electrónico y las modernas técnicas bioquímicas. Actualmente, a estos organismos se les agrupa en un reino.

Entre los aspectos a dilucidar está cantidad de divisiones o filos que constituyen el reino y ubicación taxonómicas correcta de determinadas especies. Hasta tanto no se determine los criterios que se deben adoptar para hacer una nueva clasificación, se continuara dividiendo el reino en tres grupos:

• Algas: Organismos unicelulares o multicelulares autotróficos fotosintéticos;

• Mohos mucilaginosos: Organismos eucarioticos uninucleados o multinucleados, heterotróficos, que se alimentan por absorción (al igual que los hongos), y

• Protozoarios: Organismos unicelulares o agrupados en colonias, heterotróficos, que se alimentan por ingestión (al igual que los animales)

A continuación se señalan las características más resaltantes de cada una de las divisiones o filos que comprenden estos grupos.

Algas

División Eugienophyta:

A los organismos que integran esta división se les suele llamar euglenoides, ya que su representante característico es la euglena. La mayoría obtiene su energía a través de sus procesos fotosintéticos, y algunos, los no fotosintéticos son heterotróficos.

Almacenan un polisacárido poco común: el paramilum. Suelen presentar un flagelo apical y una vacuola contráctil. Su reproducción es asexual. Muchos euglenoides habitan en aguas dulces. De este grupo se han descrito unas 1.000 especies. Aunque no presentan pared celular, poseen una película proteica, flexible, dentro de la membrana celular, que les permite cambiar de forma. Suelen presentar el extremo apical hasta tres flagelos por célula.

División Chrysophyta:

Esta división comprende dos clases: diatomeas y algas: pardas, doradas y verdes amarillentas. Son organismos fotosintéticos unicelulares. Presentan clorofila a y c, además de otros pigmentos accesorios, como fucoxantina y carotenoides. Elaboran leucosina y aceites como reserva de alimentos. En las especies que presentan pared celular, ésta es de origen péptico y a menudo impregnada de sílice.

Las crisofitas suelen reproducirse asexualmente, mediante división celular; y sin embargo, las diatomeas, a veces, se reproducen sexualmente. Por lo general, viven en hábitats marinos. Se conocen unas 10 000 especies de diatomeas, 1 500 especies de algas pardas doradas y 600 de algas verdes amarillentas.

División Pyrrophyta:

Son organismos fotosintéticos, generalmente unicelulares. Contienen clorofila a y c. Almacenan almidón como alimento. Muchas de las especies son dinoflageladas y constituyen clase dinofíceas. De las 1.100 especies que se han descrito, aprox. 1000 corresponden a esta clase.

La mayoría de los dinoflagelados son rojos. Las mareas rojas se deben a las grandes invasiones de estos dinoflagelados que expulsan un veneno tan toxico que un gramo puede matar a 5.000.000 de ratones en 15

...