Urbanismo- La ciudad que queremos

Stephanie Guerrero

Herramientas de la Ciudad

Toda ciudad es parte fundamental para el desarrollo de las sociedades, como tal, debe adaptarse a los cambios y evolucionar, constantemente, con el tiempo y las nuevas tendencias. Producto de esa evolución, es indispensable la integración de ciertos elementos o herramientas que permitan el progreso de sus integrantes, los ciudadanos. Elementos o herramientas que, integrados en un solo espacio, nos permiten avanzar hacia la creación de una mejor ciudad, la ciudad que queremos. Uno de estos elementos es la movilidad. Se debe contar con un transporte público, en buen estado, que permita movilizar a toda la colectividad, que cubra la mayor cantidad de sectores y que sea accesible para todos los ciudadanos. Así mismo, se pueden considerar alternativas como la creación de redes de ciclo vías, o la ejecución de proyectos que ayuden a crear ciudades más caminables. Estas son soluciones que no solamente ayudan a la salud de los ciudadanos, sino que también ayudan al medio ambiente. Otro elemento para el desarrollo de una ciudad es la tecnología. Un recurso indispensable en la actualidad, que se puede aprovechar en todos los ámbitos y el cual permite, por ejemplo, tener un control permanente de la ciudad, generando un sistema eficaz de vigilancia, así mismo aporta en la educación de la ciudadanía, y provee de mayor eficacia en la distribución de recursos naturales. Por otro lado, un elemento importante que conforma a una ciudad, que se ha ido perdiendo con el paso del tiempo, es el espacio público. El lugar en donde empieza la ciudad como un espacio de encuentro para las personas, que se ha convertido en un espacio para contemplar. Hoy en día, el espacio público refleja la cara de una ciudad, por lo que se debe retomar la esencia con la cual inició: ser un espacio de encuentro, en donde las personas puedan integrarse y apropiarse de su ciudad. Finalmente el elemento más importante que conforma la ciudad, y por el cual esta existe, son las personas. Los habitantes que hacen que una ciudad se encuentre en constante evolución, dándole vida cada día. Es por esto, que se debe considerar al usuario como el componente principal de toda ciudad a la hora de diseñar un espacio, entender sus necesidades y su cultura para que puedan disponer y hacer uso de lo que su ciudad les puede ofrecer. Son los ciudadanos, quienes dan vida a la ciudad

La movilidad es curiosamente un punto de alta complejidad. Es un sistema que, a medida que la ciudad crece económicamente, se vuelve un sistema insostenible. A pesar de eso, hoy en día, es posible manejarlo adecuadamente y en beneficio de todos. Es una cuestión de igualdad y equidad. Dicho de otro modo, cuando el sistema de movilidad  de una ciudad se encuentra estructurado de forma eficiente y eficaz, el transporte público seria el medio de transporte por excelencia, sin distinciones económicas ni sociales. Sin embargo, no siempre es como se espera. Los gobiernos municipales, cumplen un papel fundamental en estas situaciones, dado que son los que asignan recursos a la inversión de autopistas, carreteras y vías destinadas para automóviles. Un hecho que deja menos espacio para las ciclo vías o vías peatonales dentro del perímetro urbano.

Por ley, todos los ciudadanos son iguales, lo que debería verse reflejado en la ciudad. Si se parte de este concepto, lo lógico sería que un bus con 80 pasajeros, tenga 80 veces más espacio en la carretera, que un carro que circula con un solo pasajero. Lo maravilloso de esto, es que algunos gobiernos en el mundo lo han acatado para sus ciudades. Un claro ejemplo es la ciudad de Quito. La Ecovía y el Trolebús, son sistemas de trasporte público, buses articulados que cuentan con carriles exclusivos. Esto permite que el traslado de un lugar a otro sea más rápido. Además, son construidos a nivel de calle, abaratando costos. Estos sistemas son tan eficientes que trasladan a más personas por día que el metro, la única excepción es la ciudad de Pekín.  

No obstante, existe cierto tipo de desigualdad en este tema. Generalmente, y en parte debido a la cultura social de esta ciudad, en ocasiones, el automóvil cree tener prioridad por sobre el peatón. Esto se ve evidenciado en las aceras, o en los pasos cebra, donde los automóviles ocupan los espacios destinados para el peatón. Así mismo, el gobierno decide invertir en pasos a desnivel, para el uso exclusivo de los automóviles, nuevamente, dejando de lado ciertos espacios para que los peatones circulen con seguridad. En ciudades como Bogotá, Quito, entre otras, se ha optado por cambiar esta realidad. Se han creado más espacios para las personas, y se ha reducido un poco de espacio destinado exclusivamente a los automóviles. Lo que demuestra la igualdad en la movilidad de una ciudad, entre el peatón, un ciclista y el usuario de un automóvil.

En la actualidad, las bicicletas se han convertido en un medio de transporte alternativo. Sirve para trasladarse dentro de la ciudad, por distancias relativamente largas. No obstante, en nuestra ciudad, no es un medio que todos o la gran mayoría estaría dispuesto a usar. Generalmente, la ciudad no cuenta con los mecanismos suficientes para garantizar la seguridad de quien utiliza la bicicleta como medio de transporte. Ahora bien, existen ciudades en el mundo que si las tienen. Estas ciudades emplean  sistemas de vías exclusivos para bicicletas, lo que hace más fácil y seguro el uso de las mismas. Al tiempo que fomenta su uso. Al implementar estos sistemas de bicicletas, se evidencia de mejor manera la equidad en la ciudad, como lo expresa Enrique Peñalosa, Alcalde de la ciudad de Bogotá: “los carriles de bicicletas protegidos son también un poderoso símbolo democrático porque muestran que un ciudadano con una bicicleta de 30 $ es tan importante como uno en un auto de 30.000$” (ted conferences).

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