Ensayo “Ser un abogado” Justicia, moral, profesional

ENSAYO “SER UN ABOGADO”

JUSTICIA, MORAL, PROFESIONAL

Presentado por:

Andrea Sofia Ulloa Masmela

Presentado al Docente:

Universidad Cooperativa de Colombia

Facultad de ciencias jurídicas

Programa de Derecho

Metodología de la investigación

Corte 2024-1

Neiva

La profesión del abogado es una de las más antiguas y respetadas en el mundo, los abogados han sido los encargados a la actividad personal de una manera estable y honrada al servicio de demás, es una profesión muy noble. Esta profesión tiene como finalidad realzar los valores de los abogados, por medio de sus funciones asesorando jurídicamente, representando, asistir a la mediación en conflictos. La inconciencia que ha incurrido por la falta de amor en su profesión provoca que caigan en la corrupción, la falta de ética profesional. El propósito de este ensayo es incursionar en temas (Que es el abogado, la moral, el secreto profesional, la palabra, justicia…,), con finalidad de conocer el alma de la abogacía.

El autor Ossorio, Ángel define correctamente el término de “abogado”. Dice que ser abogado va más allá de haber recibido un título de Licenciado en Derecho. Afirmando que el verdadero abogado vendría siendo aquel que ejerce la profesión dando consejos jurídicos y pidiendo justicia, disfrutando lo que hace, amar el trabajo, pero sobre todo ocupar las leyes y el pensamiento de él de cómo llevar a cabo de manera justa un caso, las técnicas que ocupa, pero sobre todo el secreto profesional que tiene hacia su cliente porque le está confiando su patrimonio, su familia, etc.

Las decisiones del abogado deben basarse en las rectitudes de conciencia, puesto que la moralidad debe primar cualquier circunstancia ya que es mantiene integra nuestros principios, además el camino para iluminar al juez hacia la verdad y la justicia conservando siempre la tranquilidad de nuestra conciencia y las decisiones sean amparadas en la moral. Ossorio, menciona la moralidad ya que este acepta un caso es porque se está defendiendo una causa justa y se deberá ser de manera justa y moral. Según nos dice el autor, se presupone que cuando un abogado acepta un caso, es porque está defendiendo una causa justa, y éste deberá hacer todo lo moralmente dentro de lo justo para defenderlo.

Hoy en día los abogados se han visto nublados por la avaricia, la corrupción que han dejado la sensación de justicia, lo cual es timón de la carrera, en consecuencia, han hecho desprestigiar el oficio, acomodando las leyes para su propio beneficio, no actúan acorde a sus principios, sino que se han desviado su sentir de lo que es justo, prudente, bueno, verdadero, equitativo. Ganar un caso no lo es todo, debemos encontrar el equilibrio de las cosas, entre brindarle nuestra ayuda al cliente sin caer en la injusticia para con los demás. Esto es algo, que recae mucho en lo que es la familia y los valores que se enseñan en casa, porque hoy en día podemos ver como valores tan importantes como este, “la justicia”, han sido olvidados por muchos.

“La Justicia no es fruto del estudio sino una sensación”, nos dice Ángel Osorio. Y es totalmente cierto pues la justicia no es algo que se pueda aprender en libros, es algo que solo se aprende en la vida.

En la abogacía la palabra es un don que se ha aprendido a utilizar, pero a la vez puede ser un arma si el ser humano no es capaz de utilizar correctamente. Se debe saber utilizar antes el juez ser breve, que no aburra, coherente y claro. El buen uso de la palabra ahora que se entienda lo que queremos transmitir.

El uso correcto del léxico, más no tan rebuscado pues lo que se intenta es que se entienda lo que queremos transmitir; y la amenidad, pues es muchísimo más agradable escuchar a esa persona que nos habla con calidez y sencillez a la que nos habla.

Con respecto al pasante el autor brinda una visión del abogado el inicio de la carrera, su buena práctica, también hace énfasis en la ensayas duradera. El pasante es quien en verdad ve como es la verdadera abogacía, ya que la teoría es muy diferente que en la práctica. Siendo pasante es que en realidad podemos ver cómo funciona la verdadera abogacía, puesto que en la Universidad aprendemos muchísimo sobre la abogacía, pero es solo teoría, en la práctica muchas cosas pueden variar.

Al terminar la carrera, el profesional que porte la toga es alguien bueno y sabia, el uso de la toga causa respeto entre las demás personas que lo observan por tan digna labor. Actualmente los abogados no usan la toga en los juicios.

El autor menciona la mujer, dice que esta debe estar participando en el bufete permanentemente ya que la mujer posee muchas virtudes como es la intuición el instinto que casi siempre son certero. También hace la ilusión la importancia de la mujer en la vida de un hombre y hace como la importancia de la familia. De igual forma, es muy interesante ver como se resalta la importancia del valor de la familia para el abogado y como halaga a la mujer.

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