Tutela judicial efectiva derecho o principio

Henry López                    

Tutela judicial efectiva, derecho o principio

El derecho a la tutela judicial efectiva es desde su núcleo, inherentemente abstracto débase a que su contribución, desde el acceso a la justicia para la ciudadanía y su irrupción es fruto del estado social de derecho y la propia protección activa de los derechos fundamentales de los ciudadanos, en su concepción se podría argumentar que el “derecho a la tutela judicial efectiva no es un derecho”.

Los derechos, dentro del ordenamiento se encuentran taxativamente delimitados pero claro, no quiere decir que no se pueden ligar unos de otros y antes se magnifican como seria el ejemplo de la vida digna, donde no solo se manifiesta el deber del estado de mantener la vida, sino una estratificación del mismo en cuanto es inadmisible para el ciudadano caer en una situación que se contemple la vida como los sistemas eléctrico pulsativos que nos mantienen en una vida biológica sino como la concepción de aquel ser pensante y su prospecto subjetivo de lo que concibe como una vida por otro lado seria así la muerte el antagónico complemento que configura la existencia del mismo, de manera más lógica y simple, la antítesis del derecho en su mismo incumplimiento puesta en una lógica binaria le da su propia existencia, trabajo/desempleo, vida/muerte, educación/analfabetas.

Por otro lado, se encuentra la tutela, un mecanismo creado por el ordenamiento colombiano en busca de la protección de los derechos fundamentales, en ese orden de ideas la tutela es la encargada de hacer valer los derechos fundamentales que fueron vulnerados. No es un igual entre ellos, no hay una lógica que me indique si la tutela fue vulnerada y de serlo así el ciudadano no contempla la idea de que así mismo ella fue vulnerada porque inicialmente un derecho fundamental si lo fue y por ella se recurrió al mismo, así mismo un ciudadano al que se le decide no tutelar no fija sus actitudes y pensamientos en que le fue vulnerada la tutela sino el derecho que no decidieron tutelar…

De esta manera al unificar los derechos fundamentales con la tutela, no se magnifica una a la otra como en el anterior ejemplo de la vida digna por el contrario al unir un derecho con tutela se entiende que dicho derecho fue vulnerado y que inequívocamente la existencia de dicha tutela la da el derecho, la tutela se encuentra normativizada, sí. Pero no otorga el impacto inmediato que representa el derecho.

Es por eso que me doy a  la tarea de recontextualizar la tutela “judicial efectiva” no como un derecho sino como un principio, dentro de la misma soporta contenidos como ser núcleo esencial del debido proceso y el acceso a la justicia lo que le da sentido ya a los derechos de lo que realmente significa la tutela judicial efectiva, desde mi perspectiva, la tutela judicial efectiva si ya nace con el estado social de derecho, siendo uno de los frutos más importantes del mismo manifestando consigo la razón de la constitución y el estado moderno que se consagra, pasando de una constitución que hablaba sobre derechos a una que propugna su protección, una que la ciudadanía no observo como letra muerta, inerte, para la gente de alta alcurnia y de bastos desprendimientos económicos sino que contemplo al leproso de la calle y lo elevo a la categoría de ciudadano, protegido y dignificado otorgándole palabra, que nada más significa un estado participativo, entregándole en sus manos un arma, una verdadera arma para combatir y elevar su frente a las inclemencias o injusticias que puedan devenir de la sociedad, un mecanismo, un principio que regula el concepto temporal del ahora, palpable en la vida de un ciudadano inconforme que usa aquel mecanismo para manifestar lo que el estado de derecho vio nacer solo para él.

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