Saber leer

SABER LEER

Es, sin duda, una paradoja en nuestra sociedad actual. A pesar de que suponemos que la educación formal escolar, cada día con mayor cobertura en muchos países del mundo, podría asegurar un debido proceso de instrucción y aprendizaje de la lectura.

Saber leer se ha vuelto una habilidad fundamental en la cultura letrada actual y en el mundo globalizado contemporáneo. Los nuevos formatos digitales, entonces, imponen nuevos modos de leer y desafían al lector a participar de nuevos planes estratégicos, en donde su protagonismo como interactuante con el escritor a través de la virtualidad adquiere relevancias insospechadas.

Tipos de lectura.

Lectura recreativa: La lectura recreativa es la lectura que se realiza por placer. El objetivo de este tipo de lectura es disfrutar del texto y relajarse. Por ejemplo, leer novelas, cuentos, poemas o cómics.

Lectura inferencial: La lectura inferencial es la lectura que se centra en el significado implícito del texto. El objetivo de este tipo de lectura es entender las ideas principales, las conclusiones, las relaciones causa-efecto y los significados simbólicos. Por ejemplo, leer un cuento o un artículo de opinión.

Lectura informativa: La lectura informativa es la lectura que se realiza para obtener información. El objetivo de este tipo de lectura es aprender sobre un tema concreto. Por ejemplo, leer artículos de noticias, libros de texto o informes.

Lectura crítica: La lectura crítica es la lectura que se realiza para evaluar un texto. El objetivo de este tipo de lectura es analizar el texto y formar una opinión propia. Por ejemplo, leer ensayos, artículos de opinión o críticas literarias.

Lectura creativa: La lectura creativa es la lectura que se realiza para generar ideas nuevas. El objetivo de este tipo de lectura es usar el texto para crear algo nuevo, como un resumen, una pregunta o un texto creativo. Por ejemplo, leer para inspirarse o para crear una nueva historia.

Formas en cómo se realiza una lectura.

Prelectura: En esta etapa, el lector se prepara para la lectura familiarizándose con el texto. Esto puede incluir leer el título, el índice, la introducción o las primeras oraciones.

Lectura: En esta etapa, el lector lee el texto de forma activa, prestando atención al significado de las palabras, las oraciones y las relaciones entre ellas.

Poslectura: En esta etapa, el lector reflexiona sobre el texto y lo que ha aprendido. Esto puede incluir responder preguntas, escribir un resumen o discutir el texto con otros.

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