MAPA MENTAL LEY DE LA EDUCACION EN MEXICO

ESCUELA NORMAL URBANA CUAUHTÉMOC[pic 1]

OBSERVACIÓN Y ANÁLISIS DE LA PRÁCTICA EDUCATIVA

REPORTE DE OBSERVACIÓN

CAM 51

SARA DAYENÚ LUNA PÉREZ

Saradayenu22@gmail.com

MAESTRA KATHIA RAMIREZ MANZO

Nuevo Laredo, Tamaulipas a 6 de Abril del 2017.

ÍNDICE

Introducción………………………………………………………………………………………3

Desarrollo de observación………………………………………………………………………4

Entrevistas…………………………………………………………………………..……………7

Ubicación………………………………………………………………………………………..13

Croquis…………………………………………………………………………………………..14

Fotos en la escuela…………………………………………………………………………….15

Conclusión personal……………………………………………………………………………16

INTRODUCCIÓN

           El presente trabajo se enfoca en la observación de la visita al CAM 51, escuela de educación especial,  donde se involucra a las personas que conocen de cerca las necesidades que enfrentan cada día éstos estudiantes, las diferentes habilidades de los maestros, padres de familia, alumnos, así como las disposiciones de cada uno, las diferentes actitudes, actividades, etc.

 El análisis que aquí se expone es un acercamiento real al trabajo acontecido a un día normal, así como a las formas en que la competencia didáctica se manifiesta en las diversas actividades que implica la labor docente.
           

Éste es un breve estudio de las relaciones de la escuela y su entorno, de los rasgos particulares de su contexto y de las tareas que los catedráticos, educandos, directores y padres de familia llevan a cabo en el ámbito escolar. De esta manera, se examina la complejidad del trabajo que se efectúa en el recinto educativo y la importancia que éste tiene para la comunidad. También, en este escrito reflexivo, no puedo dejar a un lado las formas en que participan en los procesos educativos los padres de familia, y su relación con el docente, así pues, se valora el reto que involucra para los maestros establecer relaciones de respeto y confianza con las madres y los padres de los niños dando un ejemplo.

DESARROLLO DE LA OBSERVACIÓN

         El día 6 de Abril acudí junto con mis compañeros al CAM 51 en donde realizamos nuestra segunda práctica de observación.

El CAM 51 es muy grande, y lo considero completo. Tiene oficinas, salones para cada grupo, salón multiusos, baños, juegos y teatro. Todo está pintado muy bonito, algunas paredes con frases motivadoras, otras con dibujos y colores muy llamativos.

Primeramente al llegar, nos recibió la directora y el psicólogo de la escuela y muy amablemente nos empezaron a hablar un poco sobre lo que hacen en la institución, los niños que van, las atenciones que se les brinda, etc. Así como también resolvían dudas que tenían algunos compañeros.

 El horario que manejan ahí es de 8:00am a aproximadamente la 1:00pm. Este día nos ha tocado estar presentes en una actividad padres de familia e hijos de los niños de primero, segundo y tercero de preescolar. Alrededor de las 9:00am comenzaron a llegar los padres de familia con sus hijo(a)(s), todos caracterizados por un color, los de primero de azul, los de segundo de amarillo y los de tercero con rojo. Pude observar las diferentes discapacidades presentes en esa escuela, tales como discapacidades motrices, síndrome de down, autismo, etc. Todos muy hermosos y tiernos.

Antes de empezar, la maestra que dirigía el evento comenzó pasando al frente a una madre de familia, diciéndole lo siguiente: “Dígame algo que no le guste hacer, pero lo hace porque tiene que” A lo cual la señora le responde que no le gusta hacer de comer, pero lo hace porque “tiene que”, excelente forma de hacer reflexionar, porque la maestra le dijo que lo que hace la gran diferencia, es cambiar ese “tengo que” por un “elijo que” por ejemplo, “tengo que ir a la escuela de mi hijo hoy” el simple hecho de decirlo así, hace que lo veamos y lo sintamos mucho más pesado de lo que es, en cambio si decimos “elijo ir a la escuela de mi hijo” inmediatamente lo hace ver y sentir de diferente manera. En lo personal me gustó mucho, porque también es algo que puedo aplicar yo en mi vida diaria, que sin duda alguna, lo haré.

Comenzaron una primera actividad, donde tenían que juntarse con su equipo los cuales eran los de su mismo color y debían organizar una porra y decidirse por un nombre para su equipo, los cuales los azules se decidieron por “Los pitufos” los amarillos “Los pollitos” y los rojos “Los chapulines rojos”. Muy bonitas y creativas las porras, muy contentos y con excelente actitud estaban los niños también conviviendo con sus padres; La siguiente actividad me llamo mucho la atención puesto que se trataba de tomar una hoja blanca y con un marcador escribir alguna meta o propósito que los padres quisieran lograr en su hijo estas vacaciones y después de terminarlo, pegarlo en la espalda de su hijo. Algunos papeles decían cosas como “Que aprenda a ir al baño solo”, “Que se ponga los calcetines solo”, “Que aprenda a hablar”, “Motivarlo a seguir adelante” etc. La actividad continuó, debían participar junto con su hijo, donde tenían que llegar a la meta, la cual era marcada por unos conos de colores, haciendo cada quien algo diferente, ya sea por ejemplo, corriendo, brincando, bailando, volando, etc. Cada padre de familia e hijo debían avanzar hasta llegar a la meta haciendo algo diferente a los demás. Hubo muchas ideas muy creativas, y sin duda alguna todos, hasta yo me incluyo, estábamos divirtiéndonos  mucho, ya que se alcanzaba a percibir esa alegría de cada niño al jugar y convivir con sus padres.  Así mismo también pasaron las maestras de cada grupo. Me encantó ésta actividad o dinámica porque deja mucho por reflexionar, ya que se enfoca más que nada, en encontrar mil formas de llegar a nuestra meta, ya si una no funciona, debemos intentar con otra, y otra, y otra, pero nunca rendirnos, y creo que es algo que definitivamente olvidamos día con día, o nos acostumbramos a sólo intentar las cosas de alguna manera, siendo que podemos probar con muchas formas más e ir mejorando, y no sólo como docente, sino también como persona, padre, alumno, etc.

En la siguiente actividad, fue algo muy parecido, debían llegar a la meta igualmente padre e hijo, sin embargo debía el niño acostarse en una sábana siendo arrastrado por su papá en competencia con otro equipo. Aquí pude observar, las diferentes formas de ser de cada niño sin importar su diferente tipo de discapacidad, unos niños se divirtieron mucho y no paraban de reír, sin embargo había otros a los cuales se les tuvo prácticamente que obligar porque tenían miedo y no dejaban de llorar. También pude notar las actitudes de cada padre de familia con sus hijos, y me gustó mucho ver que los tratan con mucho amor y paciencia, al igual que las docentes, y algo que considero muy importante que no puedo omitir, es la forma en que les hablan, en un simple jueguito como el que estaban haciendo, les decían palabras como “Sarita tu puedes, vamos”, “Mira, que bien lo haces”, etc. Hubo padres de familia que se tropezaban y sin ninguna pena o disgusto se volvían a levantar y continuaban con el juego, creo que eso también fue un buen ejemplo para los niños. Me gustó mucho presenciar esos momentos.

 Para finalizar las actividades, organizaron una donde tenían que juntarse en círculos de x número de personas que dijera la maestra que estaba dirigiendo el evento, aquí niños y adultos convivieron entre sí y se divirtieron mucho también y terminando esto, comenzaron a preparar las cosas para comer todos juntos.

Mis compañeros y yo dejamos ese lugar para ir junto con nuestra maestra  y la directora de la institución a observar un salón especial para los niños, el cual le llaman “Aula multisensorial”.  En esta aula se llevan a los niños para que se tranquilicen, se relajen, se distraigan, etc. Cuenta con varios artefactos, como luces especiales, normalmente el aula está a oscuras para que éstas puedan hacer bien su trabajo, unas luces simulan agua en el piso por ejemplo, también hay una una alberca de pelotitas luminosas, que sirve para que el niño desarrolle su interacción física, unas fibras luminosas donde los niños interactúan con las texturas, éstas son como palitos de goma largos que van cambiando de colores y brillan, también un cilindro lleno de agua que hace burbujas, y éste sirve para que el niño aprenda sobre colores, movimientos, y si se puede hasta contar, también mientras el niño está en cada artefacto está presenta música relajante, para que el niño pueda sentirse mejor, se concentre más, etc. También tienen una cama de agua; normalmente dejan a los niños alrededor de 15 a 20 minutos una vez por semana, ya que no pueden pasar más de dos niños por vez. A los niños les gusta mucho asistir a esa aula, comentaba la directora que después de estar en ese tipo de terapia, los maestros afirman que los niños vienen más despiertos, se concentran mejor, tienen mejor nivel de aprendizaje.

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