Como es reflejada la imagen de las mujeres en la obra Macbeth de William Shakeaspeare

La ilustración de William Shakespeare de la mujer a lo largo de la obra, Macbeth, se transmite claramente a través de una variedad de recursos literarios y el empleo de distintos personajes. Aunque durante la era jacobea (siglo XVII) las mujeres vivieron el papel estereotipado de gestionar las tareas del hogar, vistas como dependientes, ingenuas, débiles… en Macbeth, la mayoría de las mujeres presentes trascienden la típica ideología y Shakespeare demuestra que a pesar de estar mayoritariamente bajo el dominio de los hombres , ellas también pueden ser influyentes al rechazar su feminidad.

Uno de los personajes clave que componen la obra es Lady Macbeth. Se la retrata como una figura manipuladora y convincente que ejerce una fuerte influencia sobre su esposo, Macbeth, al dictar sus acciones. En primer lugar, su hambre de poder es un claro motor de la trama; en el Acto 1, Escena 5, expresa sus deseos de perder su feminidad gritando 'Venid, espíritus... anuladme el sexo aquí'. Esto implica una disrupción de los roles de género, ya que quiere que la llenen "de la coronilla a la punta de los pies con la crueldad más terrible" para poder ser digna de asesinar al rey Duncan, ya que supuestamente las mujeres no pueden ser poderosas. Al convocar a los 'espíritus' la mujer se relaciona con la brujería

Además, Lady Macbeth afirma: "Vengan a los senos de las mujeres y tomen mi leche por hiel, ministros asesinos", enfatizando aún más que quiere escapar de su feminidad ya que sus "pechos" y "leche" reflejan la maternidad. Ella está rechazando directamente esta idea que en ese momento podría verse como algo extremadamente malo y simplemente impensable. Lady Macbeth también cuestiona con frecuencia la tal vez frágil masculinidad de Macbeth con una frase directa "¿Eres un hombre?".

Por el contrario, Lady Macduff aparece en las obras de Shakespeare y ejemplifica el papel estereotipado de la mujer durante la época en que se produjo la obra. El personaje refleja la imagen de una madre y esposa cariñosa, amorosa y leal al priorizar el bienestar de su familia, como se esperaba. A pesar de ello, transmite su decepción y cataloga a su marido de traidor cuando huye a Inglaterra: '¡Sabiduría! ¿Dejar a su esposa, dejar a sus hijos, su mansión y sus títulos en un lugar del que él mismo huye? El uso de la técnica de listado agrega énfasis a todo lo que Macduff dejó atrás y al cuestionar la situación, Lady Macduff demuestra su estado de sobresalto. Además, Lady Macbeth representa una figura con valores morales que choca con la naturaleza malvada de Lady Macbeth, equilibrando así el bien y el mal a lo largo de la obra. defensa, ¿Decir que no he hecho daño?'. Esta cita simboliza la incapacidad de las mujeres para defenderse de fuerzas despiadadas. Además, el escenario de Macbeth es Escocia, lo que significa que los asesinatos de personas inocentes resaltan aún más el hecho de que el país estaba sufriendo luchas y se experimentaron malas acciones durante el tiempo que se desarrolla la obra.

Finalmente, las Brujas son la fuente de conflicto en la obra, quienes también producen la ruptura de los roles de género. Macbeth se encuentra manipulado por sus profecías que conducen al asesinato de Duncan, desmantelando el caos. No obstante, la audiencia a menudo se puede encontrar perpleja cuando caracteriza a las brujas como criaturas femeninas o peculiares. Shakespeare emplea estos personajes para personificar el mal, lo sobrenatural y el peligro y retratar. Curiosamente, sus apariencias pueden ser engañosas, ya que son representativas de una feminidad fea, violadora de la naturaleza: viejas, repugnantes y con barba, un rasgo típicamente masculino. Como consecuencia, el autor logra comunicar el hecho de que las mujeres que no lograban representar la feminidad

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