Compresión lectora. El verdugo del amor

UNIVERSIDAD SERGIO ARBOLEDA

PSICOLOGIA

SEMESTRE VIII

PLAN LECTOR V

ESTUDIANTE

JAIMAR SARAY CANTILLO JIMENEZ

SANTA MARTA MAGDALENA

2023

PRÓLOGO

En el libro se presenta bases concretas de la psicología existencial y como el autor estudia problemas cotidianos  en los 10 pacientes En sus sesiones de psicoterapia y el transcurrir de ellas se debaten con el dolor de la existencia, y así mismo en el proceso se llega a encontrar el punto común de que todos padecían problemas comunes de la vida cotidiana, soledad, autodesprecio, migrañas, impulsividad sexual, obesidad, hipertensión, pena, amor obsesivo que lo consumían, estados cambiantes de ánimos y depresión, en consecuencia, el autor identifica 4 supuestos particularmente pertinentes a la psicoterapia, enumerándolos de la siguiente manera, primero, la inevitabilidad de la muerte, tanto personal como de seres querido, segundo, la libertad de hacer nuestra vida a voluntad, tercero, nuestra extrema soledad, cuarto, la ausencia de un pronóstico o sentido obvio en nuestra vida. Por lo tanto se parte de que la ansiedad por la muerte aflora en cada una de las pesadillas, considerando que “una pesadilla es un sueño fracasado, un sueño que al no “manejar” la anidas falla en su papel como guardián del reposo”, recordando que los sueños son manifestaciones del inconsciente, difiriendo de persona a persona, y tiene contenido manifiesto, el proceso subyacente de toda pesadilla es el mismo, refiriéndose y argumentando a la ansiedad de la muerte, la muerte escapa de sus guardianes y estalla en el plano de la consciente e inconsciente.

Desde otra de las temáticas evidenciadas, la impulsividad sexual es visto en el libro por los protagonistas de otros relatos como un talismán de protección, el envejecimiento y la proximidad de la muerte, de allí se denota la promiscuidad compulsiva de un hombre Joven, frente a un cáncer que lo está matando y también como el señor mayor que se aferra a las cartas de su amante que estaba muerta desde hace 30 años

Por otro lado, se reconoce que un ámbito importante para los terapeutas, la Asunción de la responsabilidad por parte del paciente, reconociendo su situación de vida, debido a que la responsabilidad se asume cuando se cree que los problemas son causadas por una fuerza o agencia exterior a uno mismo, la terapia no tiene éxito, reconocemos que somos criaturas que desean la estructura, y nos atemoriza un concepto de libertad que implica que debajo de nosotros no hay nada, una carencia total de fundamento, por lo tanto es oportuno afirmar que la responsabilidad es el vestíbulo del cambio, no sinónimo de cambio, en consecuencia, se reconoce en las terapias existe resistencia a asumir una responsabilidad por parte de cada ser humano y por parte de los pacientes, siendo esta un término que se debe trabajar en conjunto con el término voluntad, móvil principal de la acción.

Otro aspecto que se evidencia en el prólogo. Es los postulados del autor: el primero, “las cosas se desvanecen; las alternativas excluyen”, esto en cuanto a la toma de decisiones, cuando se toma una decisión, estamos excluyendo automáticamente otra oportunidad, debido a que los seres humanos somos criaturas que buscamos significados, cuando más deliberadamente lo busquemos, es menos probable que lo encontremos. En la terapia como en la vida, el significado es un resultado de la ocupación y la dedicación

CAPITULO 1

Somos seres enamorados, de la vida, de las personas, y de muestras cosas de la vida, pero el principal anhelos más intrínseco del ser humano, es la ilusión de encontrar a otra persona, con interés de ofrecer un amor reciproco, sin embargo, el amor está constituidos por momentos de alegría y momentos de odio y desesperación que pueden llegar a ser muy dolorosos y tristes, y en los peores casos pueden ocasionar situaciones  de violencia y abuso a los derechos del individuo, poniendo el peligro a las personas que participan de ellas. Para el autor del libro El verdugo del amor, resulta desagradable el trabajaren terapia con personas enamoradas, porque en cierto sentido, el terapeuta por uno u otro motivo se convierte en quien debe terminar con el romanticismo, para traer al paciente de vuelta a la realidad. Él lo presenta en los siguientes términos:

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