Diferencias Entre Don Quijote Y Sancho Panza

Introducción

“En Don Quijote de la Mancha, el hidalgo y su escudero, Sancho Panza, son diferentes pero también semejantes, se complementan y llegan a intercambiar sus características y actitudes”

Don Quijote de la Mancha es una novela escrita por Miguel de Cervantes Saavedra, está dividida en 2 partes, la primera se llama El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha y fue publicada en 1605. La segunda parte de la novela fue publicada 10 años después y se llama El ingenioso caballero don Quijote de la Mancha.

El hidalgo a lo largo de la novela sufre cambios al igual que Sancho, su escudero. Son tan distintos entre ellos que se complementan. Por lo tanto el Quijote se parece más a sancho y viceversa, esto procesos se llaman sanchificación y quijotización, durante el desarrollo de esta monografía se analizarán, compararan y comentaran tanto estos procesos como los personajes. 

Don Quijote

Según lo visto en clase, Don Quijote puede ser descripto de acuerdo con como uno lo mire, por ejemplo como un loco. Aunque se diga que está loco, el personaje presenta momentos de sensatez en los cuales demuestra sabiduría y experiencia. Eso hace que el personaje oscile a lo largo de toda la obra entre la locura y la cordura. Esta locura lo va a llevar a cumplir su sueño, ser un caballero medieval.

El verdadero nombre de Don Quijote era Alfonso Quijano, “Nada sabemos del nacimiento de Don Quijote, nada de su infancia y juventud, ni de cómo se fraguara el ánimo del caballero de la fe, del que nos hace con su locura cuerdos.” El autor da comienzo el libro diciendo “En un lugar de La Mancha cuyo nombre no quiero recordar.” Cervantes no hace mucha referencia a su procedencia.

Familiarmente, en su aldea natal se le conocía por el nombre de “Alonso Quijano el Bueno”. En el primer capítulo, cuando él se arma caballero, el narrador cuenta "quiso ponerse nombre a sí mismo, y en este pensamiento duró otros ocho días, y al cabo se vino a llamar don Quijote. [...] Quiso, como buen caballero, añadir al suyo el nombre de su patria y llamarse Don Quijote de la Mancha, con que a su parecer declaraba muy al vivo su linaje y patria, y la honraba con tomar el sobrenombre della."

Don Quijote era un hidalgo, perteneciente a la decadente baja nobleza, descendiente de antiguos caballeros, hecho que observamos cuando recoge las armas de sus bisabuelos (caballeros andantes en la Edad Media). Pero el antiguo prestigio y poder que estos hombres tuvieron, había desaparecido completamente, con la caída de la sociedad feudal. Sancho lo describe diciendo “Hijodalgo de solar conocido de posesión y propiedad y de vengar quinientos sueldos.” El, al haber leído tantos libros de caballería soñaba con ser un caballero medieval. Su obsesión indica que llevaba una vida aburrida y tenía ganas de variarla, por eso se lanza a la aventura.

Como todo buen caballero, Don Quijote se enamora de Dulcinea del Toboso, conocida también como Aldonza Lorenzo, ya que la tradición manda que todo noble caballero tenga un escudero y una dama en su corazón a quien dedicarle sus victorias. Don Quijote describía a Dulcinea como una joven “virtuosa, emperatriz de La Mancha, de sin par y sin igual belleza”, que sólo existe en su imaginación.

El personaje oscila entre la sensatez y la locura. Una prueba de esto son sus discursos, opiniones y consejos. “Cervantes aprovecha la acción novelesca para insertar parlamentos que pone en boca de don Quijote.” Su conocimiento está dado por la experiencia. No es un cobarde y defiende su dignidad cuando es necesario. Se dice también que era necio y sabio al mismo tiempo.

A lo largo de la obra Don Quijote va dejando poco a poco esas actitudes de caballero de novela. En la primera parte, decide abandonar todo e ir a recorrer el mundo para rendir honor a su rey y a su dama. Pero, con el tiempo, va adquiriendo consciencia del mundo real. Ese proceso es inspirado por sancho y se llama Sanchificación, no está definido en los diccionarios pero se lo utiliza para describir el cambio que tuvo Don Quijote a lo largo del libro. La palabra viene de “Sancho” porque esos cambios son inspirados por su escudero, Sancho Panza.

En la primera parte, Alonso Quijano puede ser interpretado como la fantasía, el idealismo o la locura. Se creía capaz de resolver injusticias y tratando de resolverlas solo lograba empeorarlas a través de confusiones. A pesar de esto el continua. Era incapaz de distinguir entre el bien y el mal.

En la segunda parte, empieza a interesarse por lo que los otros hablan de él. Influenciado por Sancho comienza a usar su típico lenguaje popular. Deja ese idealismo que lo caracterizaba para ver las cosas de una manera totalmente distinta, comienza a ser pesimista aunque se da cuenta de su evolución hacia la cordura.

Al final de la obra, antes de morir, Don Quijote hizo llamar a sus amigos y les dijo que ya era otra vez Alonso Quijano el Bueno, que ya era cuerdo. Tras hacer testamento y dejar una clara muestra de que ya había vuelto a la cordura comenzó a criticar la actitud de Avellaneda que había escrito un libro falso acerca de estupideces como las que él había vivido.

Antes de morir le dijo a su sobrina que, por favor, no se casara con un hombre que conociera las novelas de Caballerías ya que estas volverían loco. Y entonces murio. “Se sabe que las intenciones de Cervantes al hacer morir al Quijote no eran sólo las de inmortalizar a su personaje sino también la de hacerlo irrepetible para otros escritores, que ya empezaban a copiar la suprema creación de Cervantes.”

Sancho Panza

“La posteridad, y la decisión última del autor, han hecho que conozcamos el Quijote con el nombre exclusivo del caballero andante; pero no es menos verdad que la figura de Sancho Panza, negada en el título, es compañía imprescindible del Caballero de la Triste Figura en cualquier tipo de representación gráfica o escultórica que se precie. Nunca, al referirse a la inmortal obra cervantina, aparecerá don Quijote solo; y podría decirse más, no entenderíamos la figura del ingenioso

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