“EL HECHIZO”

“EL HECHIZO”

Palacio Pérez Juan Carlos

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Muchas tardes lo siguió, sin importar la rutina de su marido, ella lo espiaba con hambre de encontrar pruebas sobre la supuesta infidelidad, su comportamiento era extraño, como si ella ya hubiera visto la infidelidad. Peleaban hasta el cansancio, el miedo se propagó como un cáncer, la desconfianza cegó a la mujer y la nubló para apreciar y ver el amor que su esposo tenía por ella.

Cada día imaginaba cosas peores, planteaba historias y escenas inexistentes, pero nunca le preguntó a su marido sobre el porqué de su visita a la misma casa. Su relación empeoraba y borraba el amor mutuo. Entre ellos siempre una conexión diferente, como si hubiera una cuerda y ambos estuvieran atados a cada extremo, se entendían de una manera diferente, las risas, cariños, deseo, amor, todo esto se fue esfumando por el miedo de la esposa.

Un día ella le preguntó por qué su vida se había hecho rutinaria, el le contestó “porque nosotros lo hemos permitido”, tenían que cambiar, tenían que reconocer sus errores, el le dijo “voy a dar todo para recuperar tu amor” ella sin embargo no confiaba en él, creía que todo se iba a quedar en promesas.

El tuvo la idea de empezar a realizar actividades que lo hicieran olvidar todos los problemas con pero no funcionó, todo le recordaba a ella, cualquier actividad terminaba en su recuerdo.

Aquí fue donde vio los sentimientos hacia ella, se dio cuenta de lo que estaba perdiendo, de sus errores, de sus virtudes, fue un encuentro con el mismo. Harto de extrañar los buenos días juntos, decidió expresárselo de la manera más honesta posible, la invito por una copa de vino y en la plática, surgió el tema de su relación, ella con miedo sobre lo que el pudiera decir se quedó callada.

El no encontraba las palabras exactas para decirle todo lo que sentía, por un momento, dejó de hablar con la cabeza, y habló con el corazón, sacó las palabras más hermosas del mundo, sus sentimientos, y todo esto terminó en una frase sencilla como “estás mejor sin mi”. Ninguno se dio cuenta que se amaban mutuamente, que se distanciaron por problemas que tenían solución y que sin importar lo que pasara, sus sentimientos eran más fuertes que cualquier problema.

Ella le dijo “¿para que visitas esa casa?”, la explicación fue muy fácil, el comenzaba a trabajar ahí para darle una mejor vida con un más sacrificio, ella no vio lo que el daba por ella, cuando se dieron cuenta que estaban enamorados, era muy tarde. Pero no se desanimó, ella lo buscó, hablaron, sus almas se tocaron con tan solo un beso, en ese momento vieron que eran uno para el otro y que la desconfianza no termina en buenas consecuencias

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