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El Soplador De Estrellas


Enviado por   •  27 de Septiembre de 2013  •  2.955 Palabras (12 Páginas)  •  456 Visitas

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“EL ORGULLO MEXICANO”

De Aldo Vargas Romero

La obra:

La personalidad mexicana puesta al servicio del humor. Seis personajes te harán reír con sus ocurrencias. Una obra que enmarca la importancia de la búsqueda orgullo mexicano, claro sin dejar de lado lo que caracteriza a la mayoría de todos los mexicanos… “la simpatía y la comicidad”.

Personajes (por orden de aparición):

María

Romeo

Abuela

Niña

Joven

Don Cándido

El escenario se ambienta con un árbol, a lado de él puede haber muchas plantas d mediano tamaño para simular un arbusto, unas piedras grande y otras pequeñas, mucha hojarasca, y un tronco que sirva como asiento. Se ambienta con música de cantico de pajarillos.

María: (Entra buscando algo a lo largo del escenario, se truena los dedos; se sienta en el tronco, se levanta y dice muy dulcemente) _ ¡Ho Romeo… Romeo!… ¿Dónde estás que no te veo?

Romeo: (Desde detrás del arbusto) _ ¡Estoy aquí atrás!

María: (Desde su lugar trata alcanzarlo con la vista) _ ¡Estaba a punto de llorar… sal que no te puedo mirar!

Romeo: (Sigue escondido) _ ¡Ya deja de rimar y déjame ca…ray! Pensé que no ibas a llegar (sale estrepitosamente del arbusto).

María: (Se acerca a Romeo muy cariñosa) _ ¿Qué es eso que me querías enseñar?… (Insinuándose) _ ¡Romeo!

Romeo: (La aparta de él tomándola de los hombros y echando su cuerpo hacia atrás) _ ¡Estate quieta!… no empieces de empalagosa, puede vernos mi abuela, anda por aquí buscando hongos.

María: _ ¿Va a hacer quesadillas hongo o algo así?

Romeo: _ No que va, son para darse sus viajes, no ves que es fanática de María Sabina… mira lo que te quería enseñar es…

María: _ Si… (Tierna).

Romeo: _ Es… una canción, no la compuse yo pero de todos modos te la quiero cantar, dice más o menos así… ti quero, más que a mis ojos, más que a mis ojos ti quero… pero quero mas a mis ojos pero quero mas a mis ojos, porque mi ojos ti veron… (Acerca su cara a la de María)_ ¡te quero!

María: _ ¡Yo no soy ningún taquero!

Romeo: _ No… ti quero.

María: _ ¿Ha no me quieres? Ponte de acuerdo Romeo, me confundes, ¿me quieres a mi?, ¿a tus ojos o al taquero? (comienza a sollozar como queriendo llorar).

Romeo: _ ¿Te hice llorar mi niña?, ahora si hare lo mismo que hizo Tizoc en la película (levanta del suelo una piedra que no es una piedra y comienza a golpearse la boca con ella).

María: (Mortificada como queriendo detener a Romeo) _ ¡No Romeo… no Romeo, no te pegues con eso!

Romeo: _ ¡Cómo no me voy a pegar si te hice llorar y eso no me lo puedo perdonar! (se sigue golpeando).

María: _digo que no te pegues con eso porque es caca de vaca (Romeo avienta la caca, María levanta otra piedra más grande y pesada) _ si te quieres reventar el hocico que sea con esta. (Le da la piedra).

Romeo: (Toma la piedra, la ve y hace cara de preocupación) _ ¡No mejorar así que se quede, te prometo que no lo vuelvo a hacer!

María: (Se acerca a Romeo) _ Entonces que… ¿no me das un beso?... (Acerca su rostro al de Romeo y lo siguiente lo dice muy insinuante) _ ¡Romeo!... (Romeo al sentir su aliento en el rostro hace cara de fuchi y comienza a tener signos de querer vomitar) _ ¡huy entonces de planchar la ropa ya mejor ni hablamos!

Romeo: (La toma de la cintura) _ ¡Como de que no!... si de eso pido mi limosna (la jala y da unos pasos hasta quedar cerca del árbol)

María: (Haciéndose la desentendida) _ ¿Qué me vas a hacer Romeo?

Romeo: _ Te voy a hacer mía.

María: (Comienza a limpiar el suelo con su pie como si fuera una gallina no dejando de abrazar a Romeo) _ ¡Conmigo te equivocas Romeo… conmigo te equivoca! (sigue limpiando el piso con el pie quitando piedras, hojarasca o lo que haya).

Romeo: (Viendo extrañado lo que hace María) _ ¿Ahora tu qué haces María?

María: _Limpiando el terreno de batalla porque luego la grava me deja marcadas las tambochas.

Entra la abuela, con su bastón, su chal y una bolsa de mandado, y mira enojada se dirige a los dos muchachos.

Abuela: (Levantando su bastón y agitándolo) _ ¡Muchachitos! Déjense ahí, ¿pero qué es lo que estaban a punto de hacer?

Romeo: (Ocultando a María detrás de él) _ Lo que pasa es que a Mary se le cayó un arete y lo estábamos buscando (a María) _ ¿verdad tu?

María: (Nerviosa y buscando su arete) _ Si, así es venerable anciana.

Abuela: _ Ahora resulta que a la calentura se le llama arete, ese cuento no me lo trago.

María: _ No pos no se traga el cuento, pero que tal traga comida viejita gorrona.

Abuela: _ No me insultes a mí he ¡tanga fácil!… debería darles pena, que no ven que anda por aquí mi nietecita, imagínense si los hubiera visto.

Romeo: _ ¿Vienes con mi hermanita, abuela?

Abuela: _Si mijo, lo que pasa es que se quedo haya tras lomita a hacer pipi por que ya le ganaba y me adelante porque ¡ha como salpica esa niña!

Entra la niña con una muñeca en los brazos y una mochila en la cual lleva un cuaderno y un lápiz)

Niña: (Entra dando saltitos de alegría, se detiene al ver a María) _ Oye abue, ¿ella es la tabla del uno verdad?

Abuela: _hay no se hijita, ¿por qué dices eso?

Niña: _ Ha pues porque dicen en el pueblo que la tabla del uno es la más fácil.

Romeo: (enojado) _ óyeme chamaca, ¿Por qué le dices eso María?, si ella es una señorita virginal, pura y casta (a María) _ ¿verdad mi amor?

...

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