Ensayo Demain

ENSAYO DE EL LIBRO DEMIAN DE HERMANN HESSE

Esta novela de una manera psicoanalítica, esta orientada a llevarnos a buscar nuestro destino por medio de la narrativa de una historia interesante que nos puede encantar y emocionar.

Demian es la historia de Sinclair. La historia de un niño que ve, más allá de la felicidad que envuelven su vida familiar, el otro mundo que le rodea: un mundo que teme pero a la vez le fascina.

Es la historia de unos pasos tambaleantes por el camino que la mayoría tratan de evitar. Es la historia de la duda entre la crisálida protectora de la infancia y el camino que conduce fuera de ella. Entre la facilidad de adaptarnos a nuestro entorno y la necesidad de adaptar el entorno a nosotros.

Pero Demian es sobre todo la historia de la pregunta que nadie quiere contestar, del camino que nadie quiere recorrer. Demian es quien nos explica cómo sortear los obstáculos de ese camino, pero también quien rasga la fina capa de ignorancia que es nuestra crisálida y nos obliga a mirar entre las sombras que se forman alrededor de esos obstáculos antes de llevarnos a la luz.

Demian es, en definitiva, la búsqueda de nuestro auténtico yo a través del rechazo de lo preestablecido.

El leerla es una linda vivencia que durante su lectura nos llevará reflexionar en temas que son tan controversiales como cotidianos, entre los cuales encontramos algunos como: La trayectoria de vida, la religión, el amor, la felicidad y la amistad, partiendo de lo que se piensa de estos de una manera cotidiana hasta verlos de una perspectiva diferente sin cambiar el concepto que se tenía conocido.

La historia se remonta cuando el narrador tenía 10 años e iba a su escuela de letras.

Para él, existían 2 mundos: el del hogar (lo correcto) y el de fuera (lo prohibido).

Al acabar sus clases, Sinclair fue a pasear con dos amigos; en el camino, Franz Kromer, un bribón de 13 años, se les unió; Sinclair se sintió incómodo.

Los 4 se sentaron formando un círculo y empezaron a contar sus hazañas; como Sinclair no tenía alguna, inventó que robó unas manzanas de un huerto.

Franz le preguntó si eso era real y Sinclair dijo que sí; entonces, Franz dijo que el dueño de las manzanas daría 2 marcos de recompensa por encontrar al ladrón y que aprovecharía la oportunidad para entregarlo.

Sinclair suplicó que no lo haga; Kromer le dijo que tendría que pagarle los 2 marcos, sino lo denunciaría; Sinclair le dio el dinero según lo obtenía (durante semanas).

Al colegio llegó un chico llamado Max Demian; era huérfano de padre y rico; aunque era mayor que Sinclair, se hicieron amigos y discutían sobre las asignaturas.

Max empezó a hablarle sobre la historia de Caín; al finalizar, Sinclair llegó a la errónea conclusión de que Caín había sido un hombre noble, pero incomprendido y Abel un cobarde y que debido al estigma que Caín llevaba en la frente, habían inventado el resto de la historia; Sinclair dedujo que muchas de las cosas de la Biblia eran falsas; pero Max le dijo que eran verdad, pero mal explicadas.

Cuando Max se fue, Sinclair recapacitó de lo hablado y pensó que le habían tomado el pelo, pues cómo era posible que Dios no hubiera actuado; Max lo había engañado; pensó que Max era un Caín, al hablar con desprecio de los débiles y piadosos.

Max se enteró de cómo Kromer atormentaba a Sinclair; entonces le dijo que si no podía librarse de él, que lo mate.

Poco después, los llamados (silbidos) de Kromer a Sinclair, no se escucharon más; luego de muchos días, Sinclair se encontró con Kromer y éste trató de evitarlo.

Max había hablado con Kromer para que deje en paz a su amigo.

Ahora que Sinclair era "libre", sus padres se alegraron al verlo sin preocupaciones.

Durante una clase de religión, donde el sacerdote narraba la pasión y muerte de Jesús, Max le dijo a Sinclair que el arrepentimiento del "buen ladrón", era de personas sin carácter (pues tenía miedo de su trágico fin); mas el "mal ladrón" sí tenía carácter, pues nunca se arrepintió de lo hecho.

Luego dijo que la mitad del mundo era religiosa y la otra mitad pecadora; entonces ¿por qué rechazar a la segunda mitad?; mejor sería crear un nuevo dios que sea mezcla del bien y del mal y así, toda la humanidad estaría unida.

Este sería para Sinclair su último año en ese colegio; luego estudiaría lejos de casa.

Sinclair fue llevado a un internado (fuera de su ciudad); allí se convirtió en un pésimo alumno; junto con su amigo Alfons Beck, se emborrachaban en tabernas, recibiendo advertencias de expulsión; pero por las súplicas de su padre, no lo botaban.

Un día, paseando por el parque, vio a una chica muy hermosa de la que se enamoró; aunque no la conoció, dejó sus vicios y empezó una nueva vida; la llamó Beatrice.

Sinclair estaba tan obsesionado con "Beatrice", que decidió hacer un retrato de ella; al terminarlo, lo contemplaba largas horas, hasta que descubrió que el rostro no era exacto al de ella, sino que se parecía al de Max y si loobservaba con más detalle, también se parecía a él mismo; entonces se dio cuenta que su dibujo representaba cómo sería su amigo, cómo sería su verdadera amada y cómo sería su vida futura.

Luego

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