Ese No Es Mi Problema

El video “ese no es mi problema” muestra las consecuencias de tener trabas en la comunicación intraempresarial, de no entender ni aplicar el concepto trabajo en equipo, falta de interés y compromiso hacia y con la organización donde se trabaja y hasta carecen de sentido común.

Esta caricatura muestra una situación organizacional que se desata a partir de un incendio que comienza por negligencia de un colaborador. Expone además, cómo los poco comprometidos miembros de ésta, reaccionan en un escenario de peligro y dificultad crecientes. El video evidencia una situación algo insensata pero que ejemplifica perfectamente un serio problema de comunicación que casi ocasiona el incendio de toda la planta de la organización. Adicionalmente ilustra situaciones que se presentan comúnmente en las organizaciones, donde cada empleado se limita a cumplir de manera individual únicamente con las labores para las que fue contratado, ignorando la importancia del trabajo coordinado enfocado hacia una finalidad en común. Lo cual es posible, en otro contexto (no fuego) si consideramos una situación organizacional en la que no se trabaje en equipo, hallan problemas de comunicación y gestión de información, el resultado obvio sería fracaso, derrota, quiebre y desaparición de ésta.

Los colaboradores de esta organización desde el conserje hasta el presidente, se justifican en que apagar el incendio no está dentro de sus funciones, a pesar de estar interrelacionados como sistema, simplemente señalan otra parte para que se encargue y se desligan de la situación. Todos tienen clara la magnitud que puede alcanzar el problema, es decir, conocen los hechos por observación, inclusive tienen disponible la información y datos recolectados para darle solución al problema, es la transmitida y hasta interpretada como sencilla, pero no es aplicada. Ni siquiera los encargados, pueden tomar una decisión basados en la información disponible.

La compañía adolece de conocimiento, compromiso, criterio, colaboración y manejo de información en todos los niveles del sistema, en mayor grado a los gerentes y directivos por áreas, además son funcionarios desobligados, y sin sentido común. Se debe capacitar desde el conserje hasta el presidente en transformación, asimilación de información y habilidades comunicativas, para que lo apliquen a la producción, obtengan resultados, puedan tomar decisiones ante dificultades y desarrollen capacidades de gestión, estas últimas son básicamente el corazón una sociedad del conocimiento u organización, sin importar su finalidad o tamaño. Gestión y directivos responsables y es lo que más se requiere en la situación del video para empezar a resolver las dificultades en la toma de acciones y decisiones.

El incendio afecta a todos los miembros de la organización, no obstante parece que ignoraran las consecuencias, pasando la responsabilidad de un lado a otro por toda la organización. Lo absurdo, es que cuentan con los medios, las herramientas y el conocimiento pero no los ponen a favor de la organización en la que pasan gran parte del día. Posiblemente porque no se ha presentado o no se han premiado las actitudes proactivas de los colaboradores, cada uno decide decirle a su compañero o superior que se responsabilice por lo que cada uno no quiere responsabilizarse. Cuando el incendio crece y llega a las instalaciones, algunos empleados irrumpen en la sala de juntas y al notar la magnitud que han alcanzado las llamas todos se sobresaltan y comienzan a culparse unos a otros por no haber tomado acciones a tiempo. Es en ese momento de crisis, un colaborador comparte su idea para apagar el incendio y es justo ahí cuando entienden que cada uno es parte del sistema, es importante y necesario para una solución eficiente y eliminación de posibles riesgos. Tras verse en inminente peligro, los miembros de esta organización

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