ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La Mochila De Humo


Enviado por   •  3 de Junio de 2015  •  2.206 Palabras (9 Páginas)  •  155 Visitas

Página 1 de 9

“LA MOCHILA DE HUMO” (de Ana Heredia)

OBRA EN UN ACTO

PERSONAJES: los cuatro son adolescentes y visten uniforme

LALI / CÉSAR / SANTIAGO / LUCHO

….......................................................................................................................................

(Patio de un instituto, colegio o centro educativo. Lali está sentada, leyendo un libro. Lucho está en un rincón, armando una maqueta sobre una mesa, en silencio. Entran César y Santiago, mirando un celular)

Santiago - ¿Y? ¿Qué te contestó? ¿Aflojó?

César – No (pausa) - Ya viste como son estas minitas, histeriquean un rato y después se rajan... ¿quién las entiende?

Santiago - ¡Yo! ...¡No!...¡¡¡Jaaaa!!! ….¡Bueno, pobre mina, seguro la comiste con los brackets puestos!, ¡¡¡Jaaa!!! ¡¡¡¡Uh, que cara tenemos hoy, che, era un chiste!!!!! … ¡¡¡no es para tanto!!!

César - ¡Es que vos no entendés nada! ¡Para mí sí es importante!...no sé, me parece raro que no se conecte, no me conteste los mensajes, no atienda los llamados, nada...¡¡no sé qué le pasa!!

Santiago – Le pasa lo que le pasa a las chabonas, a todo el mundo...¡se cansan de vos, César, jaaa!

César - ¡Basta, loco, cortála, te hablo en serio!

Lali – Perdón, chicos, no quiero meterme, pero ...

César (interrumpiendo) – ¡Pero te metiste igual! ...a ver, ¿que ibas a decir?

Santiago – Seguro es algo más inteligente que las pavadas que vos decís

Lali – Bueno, no es para tanto... es que te escuché decir que hablaban de Sofía

César - ¿Y vos cómo sabés? ¡Si yo no la nombré! (mirando a Santiago) ¡Seguro fuiste vos!

Santiago - ¡No, te juro que yo no fui!

César - ¡Qué! ¿me tenés miedo ahora, que no querés confesar?

Santiago - ¿Miedo yo? … ¡Ni ahí! … ¡te juro que yo no fui!

Lali – Es verdad, él no fue. No intervine antes porque no quiero quemarlo... al mensajero, digo

Santiago – Claro, cómo lo vas a mandar al frente... (mirando con picardía a Lucho) - Si no me equivoco... es callado, un tipo que se hace el distraído....y le gusta mucho armar maquetas, se la pasa en su mundo, hasta que abre su bocota...¡y páfate, la arruina deschavando a la minita del amigo!

Lucho (como saliendo de su letargo) – No tengo idea de qué están hablando. Yo no me meto con nadie y no quiero que me jodan, ustedes en lo suyo y yo en lo mío, ¿estamos?

César - ¿Vos buchoneaste algo? ¿Qué dijiste? ¿Me quemaste con Sofía?

Lucho - ¿Que qué? … No entiendo de qué me hablás. Ya sabés que yo no hablo nada de nadie... y la verdad, no me importa, ni ella, no vos, ni nada...

Santiago - ¿De verdad no te importa? Mmmmm.....¿por qué será que me cuesta tanto creerte?

Lali - ¡Otra vez con eso! ¡Déjenlo en paz!

César – Ah, claro, salió la defensora de pobres y ausentes...mejor dicho, ¡de pobres y autistas!

Lali - ¡No lo tratés así!, sabés que después se pone mal y no sabemos qué puede pasar...

Lucho – Está bien, Lali, no te preocupes, ahora puedo controlarlo mejor... ya no me ahogo como antes … ya no me afecta tanto

Santiago – Claro, te dejaron de gustar las rubias, jaaaa (mirando a Lali) - ¿Ahora te gustan las morochas? ¿Qué te gusta?

Lali (irritada)- ¡Terminala de una buena vez! (a César, con tono conciliador) – Y en cuanto a vos, te recomiendo que aceptes que ya no hay vuelta con Sofía, si ella no te quiere ver, ni te contesta, ¡ya fue!... ¡chau! ¡adiós!

Lucho (intenta hacer entrar en razones a César) – Ella tiene razón, escuchá lo que dice, y dejá de amargarte por algo que no vale la pena…

César - ¿Que no vale la pena? ¿Y vos cómo sabés si vale o no vale la pena? ¡Claro!, ¡Cómo no iba a salir a hablar el traidor!...(dolido) ¡Qué flor de amigazo tengo con vos!

Lucho (sorprendido) – Yo nunca dejé de ser tu amigo, estás ciego, imaginás cosas que nada que ver con la realidad. Yo no hice nada malo, sólo soy un simple amigo de Sofía

César (exaltado)- ¡Amigo! ¿Un amigo que habla con ella más que conmigo?

Santiago (mientras discutían los demás, ha estado observando y completando detalles de la maqueta de Lucho) – Che, Lucho, decime: ¿cuánto tiempo te lleva hacer ésto? ¡Es un laburo enorme!

Lali - ¡Vos sí que no entendés nada, Santiago! ¿No te das cuenta que ahora Lucho está en “otro tema” más importante que la maqueta?

Santiago - ¿Sí? ¿Vos crees? …. A mí me parece que no, yo creo que para este extraterrestre, las maquetas son más importantes que cualquier cosa... hasta Sofía...

(Se produce un denso silencio, los tres lo miran a lucho, esperando su respuesta)

Lucho – Sí, teneś razón. Las maquetas son mi vida... bueno, por lo menos, llenan mis horas vacías

César - ¡Ahora sos poeta! ¡No sigás contándome de tu sufrida vida, que me pongo a llorar!

Lucho - ¿Y vos qué sabés de mi vida? ¡Lo único que te importa es tu bendito equipo de rugby, el boliche, la pilcha, y tener a todas las minitas detrás tuyo! ¡Total, los amigos no existimos! ¿No?

César – Si le hablan pavadas a las minitas que salen conmigo, no, no existen. No me interesan. Ni ellas, ni vos

Lali – Yo, mejor me voy, no tengo nada que hacer acá

Santiago – No, mejor quedáte, (mirando a Lucho) - A ver si lo embocan a éste

César – Que “éste” se quede tranquilo, no pienso ensuciarme las manos tocando basura

Lali - ¡No tenés idea de lo que decís, César, te vas a arrepentir de haber dicho eso!

César - ¿Ah, sí? (irónico) ¿Y por qué, si se puede saber?

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (12.8 Kb)  
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com