Las Buenas Conciencias

“LAS BUENAS CONCIENCIAS”

CARLOS FUENTES

Introducción.

Jaime Ceballos está al final de su adolescencia; pronto deberá decidir el rumbo que tomará su vida. Por lo pronto, su percepción del mundo es que no tiene lugar definido en él. Quiere ser puro, pero su sangre hierve. Se debate entre la moral cristiana y los impulsos físicos de su ardiente juventud; entre la jerarquía familiar y sus ansias de independencia; entre su pequeño mundo de pueblo chico y el horizonte infinito que vislumbra; entre el pecado y la salvación. La vida lo pondrá frente a verdades desnudas que lo harán cambiar radicalmente.

Reseña.

Bueno, este libro nos habla acerca de la vida durante la pubertad o adolescencia de Jaime Ceballos. Claro, sin dejar a un lado la forma de vivir de la familia Ceballos.

La historia se desarrolla en Guanajuato, México. Para no generalizar tanto podemos decir que casi toda la trama ocurre en la mansión de los Ceballos. También cabe recalcar que en ciertas ocasiones se hace mención de Irapuato.

Podemos apreciar la ideología del México de los siglos XIX y XX, con un toque de pensamientos Revolucionarios. Y podemos decir que era conservadora al punto de llegar a la segregación de los pobres.

Tenemos una perspectiva muy abierta con relación a los problemas que se presentan en torno a la familia. Desde el comienzo de la bonanza de la familia, hasta el fin de los Ceballos. Desde el abandono de la madre de Jaime por parte de la familia, hasta la muerte de Rodolfo, el padre. Y también podemos ver la forma denigrante en que eran tratadas las personas de escasos recursos; y como ejemplo tenemos la prohibición de la relación entre Jaime y Juan Manuel Lorenzo. Observamos la manera de la religión para hacer que las familias no se fueran por otros “caminos” y siempre fueran gente de bien.

Por lo que leí en el libro en el primer capítulo para mí resalta en especial cuando Jaime Ceballos describe el hogar de su infancia el cual el habita en esos tiempos; sus ventanas asomaban cortinas de tercio piel de diferentes colores creo que la casa es o era demasiado grande por los enormes corredores y los patios en los cuales jugaban.

En la entrada de la casa en un cuarto de lado izquierdo que tenía demasiadas telarañas Jaime encontró un baúl que en ello había velos de su abuela que huso cuando su abuelo Pepe Ceballos falleció.

Es una historia en Guanajuato cerca del año de 1852, donde comienza narrando como era la casa del abuelo Pepe Ceballos, ya que eran una de las familias más importantes de la sociedad, ellos venían de Madrid, su casa se encuentra entre la bajada del Jardín Morelos y del Callejón San Roque, es una casa muy rustica, con pisos de tezontle, muebles de nogal, donde en todas las habitaciones les entra mucha luz, así como también tiene su bodegón el cual está lleno de telarañas y recuerdos, como los sables plateados del tío Francisco, como los que jugaba Jaime simulando combates, donde alguna vez llegó a encontrar los velos negros que llego a usar la abuela en el entierro de Pepe Ceballos.

Se dice que Guanajuato es el centro de la ciudad, la esencia de un estilo la castidad exacta. Donde el guanajuatense posee una doble facultad de aprender lo teórico y aplicar lo práctico. Como los michoacanos es la seriedad, en los guanajuatenses es la conveniencia y la ironía, en los zacatecanos

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