MENINAS DE MICHEL FOUCAULT

COMPRENSION Y PRODUCCION TEXTUAL II

BRENDA VELEZ VARGAS

TALLER.

MENINAS DE MICHEL FOUCAULT:

En un prestigioso ensayo del siglo XX, el filósofo Francés Michel Foucault en 1966 analiza el cuadro de Diego Velázquez Las Meninas.

La descripción que hizo Michel Foucault sobre las meninas fue minuciosa y exhaustiva, no dejo ningún detalle rodante. No hubo nada que se escapara de su ojo fugaz que detectó cada particularidad del cuadro de Diego Velázquez. Aunque en su intento por incluir hasta el mínimo detalle, el análisis se vuelve tedioso. Soy consciente, por supuesto, de que mi dificultad para entenderlo pueda partir de mi propia ineptitud. No obstante cabe destacar que estamos tratando con una abstracta forma de escritura, de un tipo radicalmente distinto al discurso académico normal.

Desde el principio, las meninas de Foucault no es fácil de enfocar, porque Foucault, en lugar de anunciar con claridad sus intenciones, se aproxima modestamente a realizar una descripción de la superficie.

Resaltando sus fortalezas podemos encontrar a un hombre de gran energía mental y fluidez verbal, su formación discursiva le brinda a Foucault otro alcance. Inspecciona detalladamente el cuadro, para finalmente analizarlo utilizando un lenguaje meticuloso. La forma en que aplica a la imagen un vocabulario altamente abstracto hace un vínculo entre la realidad y la ficción.

DESCRIPCION DE “LA PERSISTENCIA DE LA MEMORIA” DE SALVADOR DALÍ.

El famoso pintor español Salvador Dalí, con delirios egocéntricos, en su movimiento surrealista llega a pintar en 1931 el célebre cuadro “la persistencia de la memoria” también llamado “los relojes blandos”. La descripción de la pintura se designa por áreas.

El panorama es simple. El mar, que se mezcla casi con el cielo envuelto de flotantes nubes blancas y una formación de acantilados a la derecha. En la pintura se observa cuatro relojes, un reloj de bolsillo y tres relojes blandos y desfigurados. A la izquierda del cuadro se halla una especie de plataforma café rectangular, en donde se encuentra uno de los relojes blandos a punto de escurrirse por el muro, sobre este reloj se encuentra una mosca. En la misma superficie café se encuentra el reloj de bolsillo colmado de hormigas y el tercer reloj está suspendido en equilibrio de la única rama de un árbol seco que está sobre aquella superficie mencionada. Más abajo en el centro del cuadro se contempla una cara blanda con una enorme nariz y una larga lengua que sale de ella, esta cara reposa dormida

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