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La desnutrición y la obesidad infantil son dos problemas que debe enfrentar la sociedad y que se originan, principalmente, por prácticas inadecuadas en la alimentación. En una iniciativa para combatir una de estas enfermedades, la ONG Salud y Vida ha decidido desarrollar un programa piloto de alimentación saludable en las escuelas y colegios. Este programa consiste en brindar desayunos gratuitos, ricos en fibras y nutrientes, a los escolares, y en implementar cafetines y quioscos donde se expendan únicamente productos saludables. En vista de ello, a continuación, se explicará qué problema es el que debe ser abordado por este programa y cuáles serían los beneficios producidos por esta elección. Si bien ambos problemas derivan de una mala alimentación, es necesario precisar algunas diferencias. En principio, la desnutrición surge por un déficit de calorías y proteínas. Debido a una deficiente alimentación, estos compuestos están ausentes o son escasos en los alimentos que consumen cotidianamente los niños. En los infantes que padecen obesidad, en cambio, hay una excesiva ingesta de alimentos hipercalóricos, es decir, los alimentos que ingieren les proporcionan gran cantidad de grasas y azúcares, pero escaso contenido de vitaminas, minerales y otros micronutrientes saludables. Aunque ambos problemas se presentan en la niñez, cabe resaltar, además, que la etapa de mayor riesgo es distinta. En el caso de la desnutrición, se presenta hasta los 6 meses en que es necesaria una lactancia exclusiva, y en una mayor medida entre los 6 y 18 meses, debido al insuficiente consumo de nutrientes. La obesidad, en contraste, suele tener una mayor incidencia en la etapa poslactante. Se trata, en el primer caso, de una deficiente alimentación hasta los 18 meses, y en el segundo por una dieta malsana posterior. Además de lo dicho, existe también una diferencia en el entorno en el que se desarrollan ambas enfermedades. Como la desnutrición aparece en una etapa muy temprana de la vida, surge con mayor riesgo en el microambiente del entorno familiar. Añadido a este, la obesidad, por su parte, se manifiesta también en la escuela y, en general, en el macroambiente obesogénico de la sociedad moderna. Si se tiene en cuenta lo dicho, queda claro que el problema idóneo para ser combatido por el programa propuesto por la ONG Salud y Vida en las escuelas es la obesidad. Instaurar este programa en la escuela ayudará no solo a combatir el sobrepeso y la obesidad en los niños, sino también a mejorar la salud pública de la sociedad. Por un lado, los desayunos gratuitos, ricos en fibras y nutrientes, brindarán la energía justa y necesaria para las actividades propias de la vida escolar, y, por otro, los quioscos y cafetines, al estar bajo la supervisión de nutricionistas, ofrecerán solo comida saludable para los recreos o tiempos libres de los estudiantes. Esa medida ayudará a evitar el consumo indiscriminado de comida chatarra, que tanto

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